Victoria Gallegos recordó la eliminación de Argentina

La sanfrancisqueña Victoria Gallegos, quien actualmente vive en Auckland, y trabaja dentro de la organización en la Copa Mundial Femenina 2023 que se desarrolla en Australia y Nueva Zelanda, a través del voluntariado Fifa, dejó sus sensaciones tras la eliminación de la Argentina.

“El día miércoles 2 de agosto, a las 19 en Nueva Zelanda o 4 en Argentina, nuestra selección jugó contra Suecia en el Waikato Stadium ubicado en la localidad de Hamilton”, recordó en el comienzo de la comunicación con LA VOZ DE SAN JUSTO.

“Se sabía que sería un partido difícil ya que nuestro contrincante está ubicado en la tercera posición a nivel mundial en lo que respecta al fútbol femenino. Sin embargo, la ‘celeste y blanca’ peleó hasta el final y resultó ser un rival muy fuerte para la selección sueca”.

“Pero, más allá del desenlace, que resultó ser 2-0 a favor de Suecia, lo que se vivió en la cancha fue indescriptible”, indicó.

“Nuevamente, tuve la posibilidad de presenciar el detrás de escenas gracias a mi papel de voluntaria: el reloj marcaba las 13  y todos los voluntarios que íbamos a participar de la ceremonia de apertura ya nos encontrábamos en el estadio: nuestro papel sería el de desplegar el inmenso banner de 80 metros que contiene el logo de la competencia”. 

“Practicamos múltiples veces en el estadio antes de que se abrieran las puertas al público, coordinamos el uniforme (ya que todos debíamos estar vestidos exactamente iguales), cenamos y nos preparamos para el ingreso a la cancha”.

“Ya en ese momento se sabía que un grupo de argentinos estaba reunido en un bar a pocas cuadras del estadio haciendo la famosa “previa” y ya se podía apreciar, dentro del estadio, muchas personas vistiendo los colores de nuestra bandera”, siguió con su relato.

“Pero lo que más llamó mi atención es que no todos eran de nacionalidad argentina, eran personas de todo el mundo que elegían alentar a nuestra selección. En varias oportunidades me acerqué a ellos para consultar por qué alentaban a Argentina y su respuesta inmediatamente era ‘porque me gusta Messi’”, destacó.

“Una vez ya ubicados en la manga que nos daría acceso a la cancha, solo teníamos que esperar a que sonara la música que nos indicaría que ya debíamos ingresar al campo de juego. En ese momento, nuestro equipo ya se encontraba entrando en calor y se notaba la ilusión del público”.

“Luego de abierto el banner, tuvo lugar el tradicional Haka que da la bienvenida a los espectadores y a continuación, ingresaron las jugadoras. Nosotros como voluntarios debíamos quedarnos arrodillados, quietos, hasta que nos dieran la señal para levantarnos y salir de la cancha”.

“En ese interín, empezó a sonar el Himno Nacional argentino. Piel de gallina en todo momento, al escuchar a las jugadoras (ya que las tenía a mis espaldas) y al público cantar. Habían ni más ni menos que 17.907 personas, la multitud más grande y más esperada en la localidad de Hamilton. La banda argentina se concentraba especialmente detrás de uno de los arcos, saltando y cantando al ritmo de los bombos”.

“Luego de salir de la cancha y de correr a toda la velocidad que el frío me permitía, pude finalizar mi rol como voluntaria, cambiarme e ingresar a la cancha como espectadora ya habiendo transcurrido 10 minutos del primer tiempo”.

“El partido fue avanzando hasta que, luego de empezado el segundo tiempo, las suecas marcaron su primer gol. Había muchas personas alentando a dicha selección, pero el respeto que mantenían todos los espectadores garantizó que todos pudiéramos disfrutar del evento de una manera pacífica”. 

“Más adelante, de penal, las suecas marcaron el segundo gol. El 2-0 se mantuvo hasta el final del partido”.

“La tribuna argentina gritaba cada vez más fuerte y eso llegó a las jugadoras, quienes al finalizar, se acercaron y agradecieron al público. A pesar del resultado, y de quedar fuera del mundial, pude ver una expresión de alegría en la cara de la mayoría de las jugadoras, y creo que eso es lo importante: el apoyo y agradecimiento de que vayan donde vayan, un argentino las va a estar alentando”, finalizó.