Verónica Paschiero cumplió un importante rol en la serie “Cris Miró”

Por Stefanía Musso | LVSJ

Primero en subte, después en colectivo. Llega a su casa luego de estar activa desde las 6 de la mañana. Verónica Paschiero, la sanfrancisqueña que conquistó la escena artística porteña hace 13 años, hoy se consagra en el mundo de las series.

La actriz, corógrafa, bailarina y profesora de Educación Física nacida en nuestra ciudad, dejó su marca en la nueva serie biopic “Cris Miró” (Ella) que repasa la historia de la primera vedette trans argentina. 

La morocha que despliega todo su talento tanto en televisión como en el teatro, muestra su magia como directora de coreografía de la serie que tiene a la actriz española Mina Serrano en la piel de la recodada artista fallecida el 1 de junio de 1999 a los 33 años bajo la dirección de Martín Vatenberg y Javier van de Couter, y coescrita por Lucas Bianchini.

La serie de Miró, que se estrenó a fines del mes pasado en TNT y Flow, está basada en el libro “Hembra, Cris Miró. Vivir y morir en un país de machos” de Carlos Sanzol y relata  la historia de la primera mujer trans argentina en convertirse en vedette del Teatro Maipo en los 90, algo que, en ese entonces, solo era posible para mujeres.

Con ocho episodios de 30 minutos, la serie hace un recorrido por la vida y trayectoria, hasta el momento de su diagnóstico e internación.

“Es muy emocionante. Venía con ganas de participar en series o películas porque si bien la tele y el teatro me gustan mucho, las plataformas están en continuo crecimiento. Siempre me atrapo el mundo de Cris Miró. Recuerdo verla siendo chica en la tele en mi casa en San Francisco y me cautivó”, dijo Verónica Paschiero a LA VOZ DE SAN JUSTO. 

“Sos vos”

 La propuesta llegó a Verónica de la mano del director de la serie Martín Vatenberg. “Me preguntó por mi carrera y como había hecho teatro de revista, me acerca mucho a Cris desde ese lugar y eso le gustó mucho a él. Me dijo que no había una mejor coreógrafa que yo para ocupar ese lugar. Lamentablemente el proyecto quedó ahí y empecé con El Bailando pero a las dos semanas me avisaron que empezaban el rodaje”, recordó Verónica. 

La actriz que  representó a la vedette fue la española Mina Serrano y cuando llegó a Buenos Aires, había que “convertirla” en Cris. “La conocí por primera vez de espaldas en un salón de baile. Cuando nos saludamos le dije ´Discúlpame, pero sos igual´. Mina tiene una personalidad increíble y es hermosa, más allá de lo que vemos por fuera”. 

La esencia de “La Negra” como le dicen sus allegados, se ve y se siente en todas las escenas coreografiadas para Cris Miró. También acompañó a Adabel Guerrero y Vico D´Alessandro. 

Sobre la representación de Cris, Verónica dijo que “fue muy difícil representar a alguien tan conocida y de la cual no hay casi material fílmico. Mi gran joya es la escena de la toalla, donde Mina tuvo que representar una audición fallida porque no tiene su vestido y entonces, encuentra una toalla en una silla y con eso, hace una coreografía”.

“Esto me lo contaron y tuve que recrear ese momento y el resultado fue maravilloso. También fue posible porque Mina cumplió con todas las exigencias. Otra parte difícil fue crear la última foto de Cris Miró pero lo logramos. Lloramos cuando lo hicimos”.

La actuación de Miró en el Maipo también movilizó a Verónica ya que ella también estuvo en esas míticas tablas haciendo Revista. “Estar en el Teatro Maipo, trabajando y recreando un ícono como Cris Miró, la primera vedette trans, fue muy movilizador para mí. Tuvimos la suerte de recibir la visita del hermano de Cris Miró y él se encontró con Mina, quien representa a Cris. Ahí caí en la cuenta que estábamos haciendo algo real porque más allá de la creatividad, hay que entrar en la historia y todo tiene coreografía”.  

Siempre en movimiento

Antes estuvo en el Bailando por un Sueño, en obras de teatro de renombre, pero también se convirtió en coreógrafa del staff de Marcelo Tinelli. Consultada sobe el lugar en el que mejor se siente, si bailarina o coreógrafa, “había estudiado composición coreográfica pero jamás imaginé que surgirían oportunidades para trabajar de eso y tomar otro rumbo pero todos me decían que no era otro camino”. 

“Disfruto ver cómo el otro desarrolla lo que le propongo. Ver lo mío representado por otra persona me llena tanto o más que ser bailarina. Me dí cuenta que ser bailarina y coreógrafa lo disfruto de la misma manera”.

Una chica por Buenos Aires

Desde su barrio porteño, Colegiales, sale hacia cada trabajo que se le presenta pero más allá de la Gran Ciudad, el corazón de Vero está en estas tierras cordobesas. “Extraño mi familia porque si bien toda mi vida la tengo acá en Buenos Aires, mi corazón también está allá. Mis papas viven en San Francisco, mi hermano en Córdoba capital y mis queridas amigas de la vida están allá y cada vez que voy, trato de verlo pero acá tengo mi trabajo que es mi gran amor, que es el motivo por el que me quedo y acá tengo la familia que elijo”. 

A lo largo de estos años, Paschiero supo construir una carrera y mantenerse en el mundo del espectáculo sin escándalos ni problemas. “En todas las carreras hay altibajos. A veces estás en la cima y por momentos, todo se calma. Ahí es donde no tenés que perder el ímpetu, las ganas y querés seguir o ponerte nuevos objetivos. Con el correr del tiempo, eso hice”.

“Cuando llegué a Buenos Sires no fue fácil, no conocía a nadie, pero venía a cumplir mi sueño y esta ciudad fue más de lo que imaginaba. Pensaba en hacer algunas cosas pero de repente, vi otras posibilidades. En ese momento solo pensaba en estar en la calle Corrientes, hacer temporada de verano con grandes figuras y trabajar en televisión con Marcelo Tinelli pero sin querer fui trascendiendo y permaneciendo”.

Tal como Cris, Verónica busca trascender y el mensaje de la serie en la que participó le marca el camino. “La serie nos revela que uno debe trascender y nos muestra la valentía de decir ´yo soy esto´ más allá del género y quiero luchar por mostrarme tal cual soy”, concluyó.