San Francisco, con viento suficiente para generar energía eólica
Asó lo aseguró el experto alemán Bernard Kachellek que brindó una charla sobre energías renovables.
De un tiempo a esta parte, el mundo comparte una preocupación: hacer más ecológicas las fuentes de energía que potencian la vida moderna. En ese contexto, la disertación en nuestra ciudad del mecánico senior alemán Bernard Kachellek, posicionó a San Francisco como un área apta para implementar energías renovables, en especial, las llamadas eólicas, ya que considera que la superficie geográfica y las características del viento son suficientes para desarrollar un proyecto en esa línea.
La charla se realizó este miércoles en el salón Bistró de Talio y fue organizada por integrantes de las agrupaciones políticas Mejor San Francisco y Cambiemos.
Kachellek se refirió a tres tipos de energías alternativas: fotovoltaica, generada a través de paneles solares; eólica, que utiliza la fuerza del viento para generar electricidad; y otra, aplicada en Europa, que convierte la basura en energía eléctrica.
Sobre la primera indicó que "los generadores eólicos son muy aplicables para esta región, ya que he observado en San Francisco que no existe un período de dos o tres horas sin viento. Con ello no me refiero a vientos que puedan tumbar ramas de un árbol, me refiero a vientos de 10 kilómetros por hora. Eso basta para generar energía a partir del viento y es común aquí".
Y comparó: "estos sistemas, al funcionar con el viento, trabajan más tiempo que la energía fotovoltaica dado que no requieren de la luz solar- En Estados Unidos y Europa -ejemplificó Kachellek-. Las empresas líderes utilizan esta tecnología hace ya 15 años, que además preserva el medio ambiente".
También, fotovoltaica
La energía fotovoltaica es una fuente de energía que produce electricidad de origen renovable, obtenida directamente a partir de la radiación solar. Según Kachellek, este es un sistema que crece en su utilización en San Francisco y la región. "Es un sistema, desde lo técnico, perfecto. Funciona muy bien. Los paneles solares son fáciles de instalar y no son tan caros. Con cuatro o seis metros cuadrados se puede obtener corriente como para limpiar una pileta o regar con una bomba eléctrica un jardín. Es decir, para utilizar esta energía en una casa se requieren entre 50 o 60 metros cuadrados de paneles solares", explicó.
No obstante, el experto alemán insistió en que la energía eólica es "la más adecuada" para nuestra zona.
"Hay que tener algunos parámetros de situaciones respecto a dónde no se pueden utilizar estos paneles solares, no por rendimiento, sino por la falta de sol, por temas geográficos. Aquí, la inclinación de los paneles solares es más o menos de 28 grados, mientras que en Alemania, de 35 grados -señaló-. Se necesita sol. En cuanto este desaparece, lo hace también la energía natural", sentenció.
De basura a energía
Entre los distintos tipos de energías alternativas planteados por Kachellek, resaltó la que se consigue a través del procesamiento de los gases que se generan con los resiudos, una tendencia que gana terreno en el continente europeo, donde en diferentes países existen legislaciones que prohíben enterrar la basura.
"Con este sistema, los gases que produce la basura son sometidos a una depuración con el fin de extraerle la humedad y las partículas sólidas y se lo quema en usinas que trabajan las 24 horas, los 365 días del año", explicó el especialista alemán.
"Estos sistemas demandan una inversión muy grande. Los sistemas en donde se quema la basura, los filtros y también la turbina son muy costosos. Una turbina pequeña, por ejemplo, vale un millón de dólares", recalcó Kachellek.
Sostuvo que esto se torna indispensable porque "la electricidad en la Argentina, aunque se encuentre en el centro de la polémica actualmente su tarifa, es aún más barata en comparación con los países vecinos. En Uruguay, Brasil y Chile, en promedio, su valor es dos veces mayor que en la Argentina", ejemplificó.