San Justo
Salesianos en Vignaud: se van los curas pero quedan los ex alumnos
“Nos dejan la vara muy alta porque son especialistas en educación”, expresó Gustavo Mina, el director del colegio agrotécnico que tomará la posta junto a otros egresados
Por Vanina Panero
El Instituto Agropecuario Salesiano (IAS) de Colonia Vignaud cuenta con una particularidad: casi la totalidad de sus educadores fueron alumnos de la escuela, que ante la salida de la congregación religiosa, asumirán el desafío de mantener el carisma y el espíritu salesiano, tal como se lo inculcaron a ellos los propios curas.
Así, el director del colegio agrotécnico, Gustavo Mina asumirá un nuevo rol, también como director de obra, respaldado por lo que se denomina un Consejo, integrado por un representante de cada área estudiantil.
“Nos dejan la vara muy alta para seguir trabajando, siendo que los salesianos son especialistas en educación”, expresó Mina en declaraciones a LA VOZ DE SAN JUSTO.
“Realmente es un gran desafío mantener el espíritu salesiano en una escuela histórica como ésta caracterizada por la presencia de los sacerdotes de la congregación, pero estamos tranquilos de que el equipo de docentes en su mayoría son ex alumnos”, continuó.
Mina destacó además el acompañamiento de otros ex alumnos “externos” que ante su nombramiento le manifestaron apoyo para sumar a la escuela.
Para Mina es clave “adaptarse a las nuevas generaciones y estilos de vida, pero sin perder los valores y el espíritu salesiano”.
“El diálogo y el consenso entre docentes y alumnos y entre docentes y familia es fundamental. Somos formadores de personas humanas y técnicas y en lo humano hay valores que no se negocian”, aseguró.
“Nosotros vamos a seguir manteniendo el espíritu día a día promoviendo la fe, ya no con los curas salesianos pero si con el cura diocesano que se designe”, sostuvo.
Es que en el ámbito religioso, la Diócesis de San Francisco será la encargada de designar un laico que ocupe el lugar del padre Edgardo Zenclusen, actual párroco de Vignaud.
Sentimientos encontrados
Para Mina, “la salida de los curas nos genera sentimientos encontrados: por un lado nostalgia porque la presencia de un consagrado es diferente a la presencia de un laico, por el otro un enorme desafío”, sostuvo.
“Será raro no ver a los salesianos caminar por los pasillos”, reconoció el director y ex alumno del colegio agrotécnico.
El popular Norberto “Popo” Giaveno, es otro de los graduados encargados de mantener el legado de los salesianos en Vignaud.
“Los ex alumnos tenemos que demostrar que podemos. Ese es el desafío”, manifestó el “Popo” Giaveno.
“El sentido de pertenencia es muy grande y el orgullo de haber pasado por esta escuela también, por eso vamos a pelearla y a seguir como hasta ahora”, remarcó. De hecho contó que “tenemos un grupo de watsapp de ex alumnos desde hace más de 40 años y seguimos hablando de Vignaud como en aquellos tiempos”.
“Tenemos experiencias de otros colegios donde no hay más sacerdotes y funcionan perfectamente. El colegio Pío XI es uno de ellos, tiene más de 30 años manejado por ex alumnos salesianos y todo permanece intacto”, ejemplificó “Popo”.
El popular humorista, nacido en Vignaud dijo que “lo que necesitamos es que los chicos salgan de la escuela y demuestren que son alumnos salesianos, que se refleje nuestra educación y sean orgullo donde vayan”.
“Que no se pierda esa esencia. La educación y la disciplina debe seguir. Chicos rectos y con dignidad”, sostuvo.
“Es un proceso natural que se está dando en todo el país”
Los sacerdotes salesianos Carlos Bosio y Edgardo Zenklusen dejarán la colonia y serán enviados a otro destino, por decisión de la congregación religiosa ante la falta de vocaciones. “Es un proceso natural que se está dando en muchas congregaciones religiosas. No hay jóvenes que quieran ser sacerdotes y eso hace que tengamos que reorganizarnos”, sostuvo Bosio.
“Los curas salesianos somos cada vez menos y las obras son muchas. Nosotros debemos vivir en comunidad (al menos tres o cuatro) no podemos estar solos como el cura párroco”, puntualizó.
“Los salesianos tenemos 36 obras en el norte, del país y en este momento 15 están en gestión laical, es decir que no hay comunidad religiosa. Hace ya 30 años que estamos en un proceso de reorganización. Donde vemos que la obra funciona bien y tenemos la gente preparada, ahí se retira la comunidad religiosa y todo sigue como antes que es lo que va a pasar en Vignaud a partir del año que viene”, explicó.
Bosio reconoció además que “esto pasa con muchas otras congregaciones religiosas, con la diferencia que en este caso, la escuela no sigue en manos de gente ´externa´ sino de la misma gente, nuestros educadores que tienen la formación y el carisma salesiano”.
El sacerdote reconoció además que la salida de la congregación del pueblo moviliza al pueblo y que es lógico porque “desde hace 120 años que hay presencia de consagrados acá”, sostuvo.
“Entendemos lo que genera en el pueblo, pero es parte de un proceso natural. Nosotros nunca estamos en el mismo lugar por mucho tiempo”, aseveró.
Sin embargo reconoció que ambos (él y Zenklusen) tiene un cariño especial por Vignaud. “Yo soy nativo del pueblo, estudié en la primaria y secundaria en Don Bosco, luego me ordené cura, estuve los primeros años en Vignaud y luego recorrí otras escuelas. Volví hace 10 años a cuidar a mi madre que falleció el año pasado y por eso mi estadía se prolongó en pueblo”, contó Bosio.
“Yo me crié acá y por mi cariño a la localidad y a la obra en Vignaud es especial”, puntualizó.
Algo similar sucede con el padre Zenklusen que desde hace ocho años es el párroco del pueblo. “El lazo afectivo es muy fuerte”.