Regresaron a la escuela 30 años después para ver su sueño hecho realidad
Un grupo de exalumnos se reencontraron en su querida Escuela Hopólito Bouchard y se emocionaron hasta las lágrimas al ver cuanto creció. Ahora el colegio cuenta con un polideportivo cuya construcción nació de una carta que ellos siendo niños le entregaron al intendente.
Por Mauricio Argenti | LVSJ
La reciente inauguración del Salón de Usos Mútiples de la Escuela Hipólito Bouchard trajo mucha alegría a toda la comunidad educativa y vecinos del barrio homónimo, por lo que significa contar con un espacio acorde a la realización de distintas actividades educativas y deportivas para la institución.
Pero lo que pocos conocen es que esta obra permitió poner un cierre a un anhelado sueño de parte de un grupo de vecinos que, siendo niños, comenzaron a imaginar mientras correteaban por los pasillos de su querida Escuela Bouchard que el próximo 1 de julio cumplirá 80 años.
Corría el año 1994 cuando el entonces intendente Jorge Luis Bucco fue invitado a un acto en el establecimiento educativo y los directivos de esa época pensaron que era el momento ideal para dar inicio al anhelo de contar con un SUM.
En ese momento, un grupo de niños de la promoción 1994 fueron los encargados de entregarle al intendente Bucco un sobre conteniendo el pedido tan esperado que había sido elaborado por la entonces directora Nilda Retamar de Gualdoni.
El mandatario municipal se sorprendió por el contenido de la carta y prometió iniciar las gestiones ante las autoridades provinciales para conseguir los fondos que permitan iniciar la obra. Además, dejó en ese momento un aporte municipal que fue utilizado para la impermeabilización del techo del edificio escolar.
Pese a esto, la comunidad educativa tuvo que esperar 29 años para hacer realidad este sueño. En ese tiempo, durante la intendencia de Martin Llaryora, el 1 de octubre de 2013 se inauguró el playón sobre el cual se construyó el polideportivo.
La obra alcanzó los 595 m2 (37 mts x 15 mts) con una inversión que superaba los 200 mil pesos aportados por el Fodemep junto a otros cien mil pesos aportados por la municipalidad de San Francisco.
Emocionante reencuentro en su colegio de la infancia y del barrio. (Fotos: Marcelo Suppo | LVSJ)
Los trabajos continuaron luego por iniciativa de Ignacio García Aresca, quien realizó y gestionó los aportes necesarios para el techado del espacio. Precisamente, el 2 de marzo de 2020, García Aresca presidió la apertura del ciclo lectivo en un acto realizado donde hoy se levanta el SUM y tras inaugurar el techo del playón se comprometió a gestionar los mil ladrillos que aún restaban para conseguir el cerramiento definitivo del sector.
Finalmente, con una inversión de 30 millones y medio de pesos, en la mañana del 8 de marzo, quedó inaugurado el Salón de Usos Múltiples de la Escuela Hipólito Bouchard con la presencia del intendente Damián Bernarte quien de esta manera pudo terminar de hacer realidad el deseo de toda la comunidad educativa.
Su escuela, su orgullo
A casi 30 años del inicio de ese sueño, los exalumnos Jorge Borgognoni, Carolina Molinari, María Romero, Matías Algarbe y Eduardo Centurión, integrantes de la promoción 1994, volvieron a su escuela primaria, algunos de ellos por primera vez luego de haber egresado con el objetivo de ver su ilusión de niños que se hizo realidad siendo adultos.
A medida que ingresaban al establecimiento era evidente que la emoción surgía en cada uno de ellos quienes, como si hubieran vuelto a ser niños, recorrían cada centímetro del edificio.
Tras saludar a las actuales autoridades, la directora Mabel Biraghi y la vicedirectora Anahí Frare, no pudieron evitar recordar innumerable cantidad de anécdotas vividas en los diferentes rincones de su querida escuela.
"Detrás de esto hay una lucha muy grande que finalmente ahora es una hermosa realidad".
"Acá había un playón de tierra, que cuando te caías era imposible no rasparte", recordaba Borgognoni y agregó que "casi siempre jugábamos al delegado ya que pese a que nos gustaba jugar a pelota al cesto no podíamos por falta de pelotas. Era una escuela con muchas carencias, pero los directivos, docentes y la cooperadora tenía muchos sueños y ganas de hacer crecer a este hermoso establecimiento".
Fue así que esas mismas carencias inspiraron a los directivos de entonces a tomar el coraje necesario y comenzar a gestionar el sueño del polideportivo.
"Este es el polideportivo que tanto necesitábamos quienes en su momento veníamos a esta escuela", coincidieron en señalar este grupo de adultos que aún guardan en su corazón el entusiasmo de esos niños que tomaron el coraje suficiente para comenzar a torcer el destino de la escuela al entregar esa carta al intendente Bucco y de allí generar una serie de gestiones que terminaron finalmente con la obra finalizada.
Centurión destacó que la construcción "terminó siendo una obra muy importante no solo para los chicos sino para toda la escuela con una cantidad enorme de cosas que se pueden hacer, desde actos, hasta actividades y competencias de distintos deportes. Estamos muy contentos al ver todo lo que la escuela progresó y sobre todo nos da mucha alegría ver hoy, como adultos, lo que creció la escuela en este tiempo. Ver cómo está la escuela hoy nos da mucha alegría y orgullo".
"En ese momento, cuando nos propusieron entregar la carta al intendente Bucco yo pensaba que no lo iba a ver. Sin embargo, con el paso del tiempo no podemos creer que estemos acá, y que podamos ver el polideportivo finalmente construido".
Para Matías Algarbe "estar hoy en el patio de la escuela, cerca del polideportivo, es algo muy emocionante para todos nosotros. En mi caso, fue muy fuerte ver los cambios producidos en la escuela en estos casi 30 años desde que egresamos. Si bien vivo cerca, hace 29 años que no entraba y es muy bueno ver cómo fue cambiando para mejor".
Los exalumnos junto a los directivos de la escuela hoy.
"En este momento estoy atravesando por una catarata de recuerdos que vienen por mi mente. Recuerdo verme sentado aquí mismo, en este patio, jugando en estas gomas, corriendo de un lado para otro. Es como si se viniera nuevamente de golpe toda mi infancia en este momento de mi vida", dijo.
Más adelante, comentó que "para mí la escuela formó parte importante de mi vida. Yo comía en la escuela, acá recibí educación y alimentación. Hoy como adulto valoro mucho todo esto y eso me hace ver la importancia que tiene el crecimiento que logró la escuela a lo largo de todos estos años".
Mientras escuchaba a Matías, Carolina Molinari no podía evitar que las lágrimas recorran su rostro producto de la profunda emoción vivida en ese lugar que la recibió desde jardín de infantes.
"Junto a María fuimos compañeras desde jardín", recordó para luego agregar que "yo vivo acá a la vuelta y aún recuerdo el olor a la merienda compartida. Muchos recuerdos lindos que ahora vuelven a nosotros y nos emocionamos mucho".
A medida que fue creciendo, Carolina fue testigo del crecimiento de la escuela. "Qué lindo que se haya podido cumplir con estos sueños de mucha gente a lo largo de tantos años. Detrás de esto hay una lucha muy grande que finalmente ahora es una hermosa realidad".
"Nosotros no teníamos noción de lo que significaba tener un polideportivo porque igual jugábamos y nos divertíamos, pero ahora, como adulto, uno dimensiona la importancia que tiene una obra de estas características".
Al igual que el resto de sus compañeros, María Romero no había vuelto a la escuela desde el día en que terminó séptimo grado. "Son muchos los recuerdos que se vienen a la mente y fundamentalmente mucha emoción".
Sobre la inauguración del esperado polideportivo, reconoció que "es algo muy importante, sobre todo porque los chicos que vienen ahora a la escuela lo van a poder disfrutar. Nosotros no teníamos noción de lo que significaba porque igual jugábamos y nos divertíamos, pero ahora, como adulto, uno dimensiona la importancia que tiene una obra de estas características".