Por la tormenta, Devoto perdió un olivo de casi 100 años

La tormenta que abatió a San Francisco y gran parte de la región dejó como saldo un centenar de árboles caídos en los pueblos de San Justo, pero en Devoto no es uno más. Un olivo de casi cien años, propiedad de Orlando Moine y Ana Cabella, es una de las pérdidas invaluables. 

Según señalan los devotenses, se trata de uno de los pocos ejemplares de esta especie, que quedaban en el pueblo. Muy apenados, sus propietarios recordaron que este árbol los acompañó durante más de 45 años de residencia en esa casa, y que tenía una antigüedad semejante, cuando ellos llegaron. Habitualmente, los vecinos buscaban allí los ramitos, para el tradicional Domingo de Ramos, en Semana Santa.

La postal de árboles caídos se repite en varios sectores de la localidad, siendo la plaza San Martín la más afectada con muchos ejemplares perdidos. En la mañana de hoy, empleados municipales trabajaban en el despeje de calle Rivadavia donde un árbol caído provocó el corte de la circulación, desde la tormenta, hasta la mañana de hoy. 

Por su parte, en el estacionamiento de la planta Sancor. La caída de un árbol sobre las cocheras, causó daños en dos vehículos en la noche del miércoles. 

Voladura de techos en Freyre y Morteros 

Freyre es otra de las localidades afectadas por el fuerte viento y tormenta que se desató en la noche del miércoles. A las 19.55, bomberos voluntarios, con apoyo de personal municipal y de la cooperativa de eléctrica salieron a paliar los daños entre ellos la voladura de techo de una vivienda. 

Intervinieron cuatro unidades y 21 bomberos a cargo del jefe oficial principal Guillermo Rittiner

Asimismo, se registró la caída de un techo en Saenz Peña 1150, de la ciudad de Morteros donde los bomberos acudieron al llamado de un vecino afectado por el temporal. Afortunadamente, no hubo heridos, pero se procedió a retirar las placas inestables para evitar futuros incidentes.

Otro de los siniestros reportados en esta ciudad ubicada a la vera de la Ruta Provincial 1, fueron la caída de un árbol obstruyendo la vía pública en la esquina de Avellaneda e Ituzaingó. En este caso, el personal de bomberos colaboró con CoopMorteros para retirar la rama del lugar y restablecer la circulación. 

Algo similar sucedió en la esquina de Mitre y Riobamba, donde dos dotaciones de bomberos trabajaron en conjunto para cortar el árbol y despejar la vía. Una vez más, la pronta respuesta de los bomberos permitió restablecer la normalidad en la zona afectada.