“Popo” Giaveno: “La esencia de la educación salesiana no se va a perder”
Como ex alumno del colegio agrotécnico de Colonia Vignaud, el popular humorista y médico veterinario contó como se moviliza la comunidad- y en particular sus ex compañeros- para garantizar la continuidad de la educación que dejó huellas en sus vidas. "Ya no hay vocación sacerdotal pero queda la semilla que los salesianos plantaron en nosotros. Estamos dispuestos a devolver lo mucho que nos dio el colegio", manifestó.
La posible salida de la comunidad salesiana de Colonia Vignaud moviliza a todo el pueblo, en especial a los ex alumnos del colegio agrotécnico que ya planean armar un grupo de apoyo, para garantizar el funcionamiento de la escuela como hasta ahora. Uno de ellos es el médico veterinario y popular humorista Norberto " Popo" Giaveno, quien aseguró que "la esencia de la educación salesiana no se va a perder".
"No van a estar los más los salesianos como curas pero un grupo de ex alumnos se harán cargo del colegio , como ocurre en otras instituciones del país. La parte educativa está garantizada y la religiosa, seguramente se resolverá", manifestó el popular humorista en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO.
"Hay laicos capacitados que son muy buenos cristianos van a poder colaborar con la palabra de Dios como hacen en otros lugares del país", agregó.
Nativo de Colonia Vignaud, "Popo" asegura la educación salesiana marcó su vida. "Aprendimos muchas cosas que nos quedaron para toda la vida: el honor, la divinidad, el respeto. Tengo compañeros que hasta el día de hoy hablan como curas y nos comparten la palabra".
"Otros con los que hace más de 20 años no nos vemos y me escribieron preocupados para ver que podían hacer para que el colegio no desaparezca. Eso hacen los salesianos, que vivamos en comunidad todos como hermanos", sostuvo.
"A aquellos curas que me retaban cuando era chico, ahora los recuerdo con mucho cariño y les agradezco mucho todo eso; cuando los visito digo que voy a ver a mis segundos padres", contó.
Giaveno manifestó que "lamentablemente ya no hay vocación sacerdotal pero queda la semilla que los salesianos plantaron en nosotros. Muchos compañeros están dispuestos a realizar un grupo de apoyo para que la escuela siga funcionando como hasta ahora.
"El colegio sabe que estamos dispuestos al cien por ciento a devolverle lo mucho que nos dio", añadió.
El médico veterinario que hoy reside en Colonia Valtelina precisó además que hoy alrededor de 20-30 ex alumnos que estudiaron en Vignaud y trabajan en el colegio. De hecho, el propio director del Instituto Agropecuario Salesiano (IAS), padre Carlos Bosio fue compañero de Giaveno en la secundaria.
"Tengo mucha confianza de que va a hacer cosas para que Vignaud continúe con su espíritu salesiano", expresó.
Ir a Vignaud: ¿castigo o bendición?
Es usual escuchar en boca de ex alumnos del IAS que sus propios padres los "amenazaban" con enviarlos a este colegio como una especie de castigo o penitencia, pero que en realidad se transformaba en el lugar más amado por ellos. Así lo relata el propio "Popo".
"La comida no era la misma que la de mamá, nos acostumbramos a comer lo que había. Después del mediodía había que limpiar el colegio. Allí se vuelve natural lo que en casa es difícil hacerle hacer a los chicos, pero así y todos nosotros quedábamos chochos de que nos manden al colegio de Vignaud", cuenta el humorista.
"Escuchar a los ex alumnos hablar de su escuela, o que la gente nos diga los de su escuela son diferentes", es mi mayor orgullo.
Una gran familia
La escuela cuenta con una matrícula de 160 alumnos y según contó "Popo", "todos los años quieren entrar más chicos de los que podemos recibir". La mayoría de los varones están pupilos, mientras que las chicas paran en el pueblo.
"Se vive como una gran familia, donde los chicos no son alumnos sino hermanos. Se hacen tan compinches que hasta van a estudiar todos juntos a la facultad cuando terminan la secundaria", cuenta el "Popo".