Pileta, salud y amigos: el combo perfecto para pasar el verano

Por María Laura Ferrero l LVSJ

El sol castigaba furioso la mañana del sábado en nuestra ciudad. En el Polideportivo Municipal, el grupo de la Escuela de Verano para Adultos Mayores está en la hora de pileta libre antes de finalizar la clase. En un rincón, Julio Robledo disfruta del agua mientras movía sus piernas de un lado a otro con la ayuda de un “flota flota”. 

Al salir de la pileta, Julio contó a LA VOZ DE SAN JUSTO que hace cuatro año sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) que le dejó serias secuelas. “El 85 % de mi recuperación se debió a la pileta y no solo por la gimnasia sino por el apoyo que recibí de mis compañeros y mis profesores”, indicó. Y agregó: “Para mí es un cable a tierra que me ayuda mucho a superar los obstáculos que tengo y salir adelante”. 

En la misma sintonía se encuentra Alba Rosa Díaz (67), quien asegura que es una de las “históricas” que se sumó a esta iniciativa. Desde 2008 asiste a las clases de gimnasia y afirmó que le hace muy bien a su salud física y mental. “No me importa dejar la siesta con el aire acondicionado me vengo igual porque acá soy feliz”, confesó la mujer, que agregó que vive en barrio Independencia cerca del paredón de la ex fábrica militar y que se recorre casi mitad ciudad en bicicleta para asistir a cada encuentro.

Alba al igual que otros integrantes de la escuela sigue con esta actividad durante el invierno. El año pasado, el municipio de San Francisco firmó un convenio con el Club San Isidro, para continuar con las clases en su pileta climatizada. 

Norma Navarro, presidenta del Centro de Jubilados de ATE, señaló que desde la institución se alientan a participar de estas actividades. “Nos parece perfecto que tengamos esta propuesta porque es una distracción para muchos adultos mayores que no tienen otras posibilidades por  la parte económica”. “Acá el ambiente es muy bueno entre los compañeros y los profesores. Te dan ganas de venir”, afirmó. 

Más vida

“Esto es vida para nosotros”, agregó Mirian Mana, presidenta del Centro de Jubilados de barrio Bouchard. “Hay muchos adultos mayores que están solos y venir acá significa cambiar la rutina y compartir con otros momentos de calidad a través de una charla, jugando en la pileta o haciendo ejercicios”, indicó la mujer.

Por otro lado, Mirian remarcó que la mayoría  de los jubilados no tendrían posibilidades de acceder a las clases de manera privada y es muy importante que “se hagan cosas para mejorar la calidad de vida de muchas personas”. 

En 2020, Carlos Taborda  sufrió una ACV y sus terapeutas le recomendaron hacer actividad física. “A mí los gimnasios no me gustan y les dije que prefería hacer alguna actividad en el agua y ellos me aprobaron la propuesta”.

Carlos contó que se había jubilado y las secuelas de la enfermedad le jugaban una mala pasada hasta que comenzó a venir a este grupo. “Me siento muy contento por los resultados que obtuve en la parte física, pero lo que más destaco es la mejoría en mí salud mental”, indicó.

“Llegué a un grupo que conocía muy poca gente y me empecé a comunicar con ellos y a conocerlos. Acá cada uno tiene su nana (problema) algunas más graves y otras más tranquilas, pero al final te vas renovado porque te comunicás con otras persona”, aseguró. Y agregó: “No nos gusta hablar de médicos ni de los costos de los medicamento o lo caro que está todo, en cambio, por un ratito salimos de esa realidad y charlamos que las hormigas comieron las rosas o que el basurero no pasó la noche anterior”, relató.

El jubilado reconoció que ellos saben lo que está pasando en el país y lo difícil que está la situación económica, pero resaltó que entre todos se tienen que apoyar y distraerse en estos momentos más duros. “Como dijo el intendente Bernarte cuando nos vino a visitar al principio de la temporada: entre todos hay que buscar la vuelta para salir adelante. Por eso acá no es solo pileta sino también salud física y mental y la posibilidad de compartir la vida con amigos@, finalizó. 

El equipo

Las actividades de la Escuela de Verano para Adultos Mayores están a cargo del equipo de profesores de educación física: Luisina Angeletti, Marcelo Cravero y Maximiliano Montenegro. También, lo acompaña Facundo Serioli, que es guardavida en el Polideportivo Municipal.

El equipo de profesores indicó que cada clase se divide en distintos momentos para que hagan actividad física, pero también brindan momentos libres para compartir dentro y fuera de la pileta.

“Las clases se dividen por una entrada en calor y una hora de gimnasia en el agua con diferentes ejercicios para mover todos los músculos teniendo en cuenta sus edades y posibilidades físicas. Luego, le sigue una actividad recreativa con música que puede ser un juego o una coreografía para que se diviertan en el agua”, explicó Luisina.

“El tercer momento – agregó la profe – se trata de darle el espacio afuera del natatorio para que compartan un mate y alguna comida de traen de su casa. Todos se sientan a merendar y a compartir un grato momento. Al final, se le da un ratito de pileta libre para seguir la charla en el agua”.

Los profes Marcelo y Maximiliano concedieron en el excelente clima que existe entre ellos y destacaron lo predispuestos que están para trabajar. “Siempre con buena onda y ganas de hacer las cosas. Están predispuestos a realizar las cosas que proponemos y llegan con la mejor energía”, finalizaron.