Nutrición
“Petisos sociales”: las carencias nutricionales en la infancia pueden limitar la talla
Uno de cada diez niños en la Argentina tiene problemas de crecimiento debido a una mala alimentación. La nutricionista Pamela Testaferri explica qué alimentos deben consumir para un desarrollo saludable.
Cada niño o niña tiene derecho a una buena nutrición, uno de los determinantes para alcanzar el máximo potencial de crecimiento y desarrollo, que brinda mejores posibilidades para llevar una vida saludable, para mejorar su aprendizaje y su interacción con los demás, y para seguir prosperando a lo largo de la vida, con beneficios que se extienden a las generaciones futuras.
En el marco del Día Mundial de la Concientización sobre el Crecimiento Infantil que se conmemora cada 20 de septiembre, se conoció un informe reciente de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) que establece que 1 de cada 10 niños en Argentina tiene problemas de crecimiento y desarrollo.
En ese contexto, desde Profesionales Expertos en Nutrición Infantil (Profeni), advirtieron sobre los niños cuya talla y desarrollo están por debajo de lo esperado para su edad y potencial genético debido a una carencia de nutrientes esenciales a los que definen con el término “petisos sociales”, que no busca estigmatizar, pero sí visibilizar una problemática creciente que no responde a factores genéticos, sino a malos hábitos de nutrición.
¿Cuáles son los malos hábitos de nutrición que pueden llevar a que los niños tengan talla baja? La licenciada en Nutrición, Pamela Testaferri (MP-2974) de nuestra ciudad, afirmó a LA VOZ DE SAN JUSTO que las causas de déficit de crecimiento son muchas. “En el caso de causas nutricionales pueden ser por falta o deficiencia de calorías, proteínas o micronutrientes: hierro, calcio, vitamina D, zinc. Las calorías faltan cuando la cantidad de alimentos es insuficiente, el niño que no tiene para comer”.
Explicó que las “proteínas, vitaminas y minerales tienen que ver con la calidad de la alimentación, es decir, el niño puede comer suficiente en cantidad, pero los alimentos que ingiere son pobres en nutrientes o bien su organismo no puede absorberlos eficientemente”.
Advirtió que actualmente, “los malos hábitos infantiles tienen que ver con el alto consumo de alimentos ultraprocesados (galletas dulces o saladas, postres lácteos, snacks, golosinas, cereales azucarados, gaseosas o aguas saborizadas, etc.) y selectividad alimentaria que desplaza alimentos naturales y sanos”.
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¿Qué alimentos se recomiendan?
Todos los nutrientes son importantes para un crecimiento y desarrollo saludables: carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. La licenciada Testaferri remarcó que la forma de incorporar estos nutrientes “es a través de alimentos naturales, preparados en casa y evitando los ultraprocesados”.
“Es necesario que los niños consuman lácteos (sin azúcar ni edulcorantes), carnes, huevos, granos y sus harinas (arroz, trigo, harina de maíz, centeno, quinoa, amaranto), legumbres (lentejas, garbanzos, arvejas, porotos), frutas y verduras, frutos secos y semillas, aceite de oliva”, dijo.
Agregó que en caso que, por elección familiar, selectividad, intolerancia o alergia no se consuma algún grupo de alimentos, “se recomienda hacer una consulta con un profesional de nutrición para evaluar y completar o suplementar los nutrientes críticos”.
Diferentes tipos de malnutrición
La malnutrición puede ser por déficit o por exceso.
• Desnutrición: puede ser el peso insuficiente para la edad, el peso insuficiente para la talla o la talla insuficiente para la edad. Esta última, la afectación en la talla se produce cuando la falta de nutrientes se mantuvo por un tiempo prolongado y es irreversible.
• Malnutrición relacionada con micronutrientes o desnutrición oculta: déficit de vitaminas (A, complejo B, D, C ) y minerales (hierro, zinc, calcio). En Argentina el 70 % de los niños no cubre la ingesta diaria recomendada de calcio y el 96 %, la de vitamina D. Eso sucede porque 8 de cada 10 no consumen las tres porciones diarias de lácteos recomendadas.
• Sobrepeso y obesidad: es el exceso de peso para la talla y la edad.