Josefina consternada
Ocho horas de violencia en Bº Acapulco: qué se sabe hasta ahora de los dos asesinatos
A las 23.30 de la noche, una bala traspasó la ventana y mató a Milagros “Milu” Vázquez (25) frente a sus hijos. A las 6.10 de la madrugada, José Sebastián Ramírez recibió un disparo en la calle y no pudo sobrevivir. Dos crímenes sin detenidos, hasta anoche. Las familias de las víctimas exigieron justicia.
Entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, la violencia volvió a adueñarse de barrio Acapulco, en Josefina: una madre de 25 años y otro joven de 34 fueron ejecutados a tiros. Si bien hay fuerte hermetismo en torno al caso, LA VOZ DE SAN JUSTO pudo saber que al cierre de esta edición, aún no había ningún detenido por estos homicidios. Las víctimas fueron identificadas como Milagros “Milu” Vázquez y José Sebastián Ramírez. “Barrio Acapulco es tierra de nadie”, coincidieron sus familiares que exigieron justicia y que estas muertes no queden impunes.
“Estoy desesperada”, fue la cruda frase de Yanina Sapadachini, la abuela paterna de los hijos de Milagros Vázquez, quien murió a causa de un disparo de arma de fuego a la altura del cuello y frente a sus hijos en la noche del sábado, alrededor de las 23.30, en una vivienda del sector de calles 2 y 5.
Lo que ocurrió es una tragedia, una fatalidad. La joven asesinada era mamá de tres niños: dos varones de 6 y 3 años y una nena de 5.
De acuerdo a lo informado a este diario por la exsuegra de la víctima, Vázquez sufrió el impacto de una bala que “atravesó la ventana de la casa” proveniente de la calle. No obstante, la familia sostiene que “no hubo solo un tiroteo” y que los autores podrían haberse “equivocado de casa” o “disparado en varias de la cuadra”.
“Mi nuera –porque así le seguía diciendo yo pese a que estaban separados con mi hijo- se encontraba junto a sus tres hijos en la casa, les estaba dando de comer cuando sintió el ruido de disparos que venía de la calle. El más chiquito de los nenes estaba durmiendo. Todos se tiraron al piso pero ella luego se levantó y es ahí cuando la bala traspasa la ventana y la hiere. Murió desangrada frente a sus hijos. Es terrible”, describió Yanina.
“¿Cómo les explico ahora a mis nietitos que ya no tendrán a su mamá, que ella ya no está?”, siguió la mujer en medio de la conmoción de un hecho que aún está impune, e imploró “justicia por Milu, que atrapen a sus asesinos”.
“Barrio Acapulco es tierra de nadie. No se puede vivir así. Quisiera ya mismo llevar a mis nietos y mi familia lejos de este lugar. No sé cómo vamos a seguir viviendo”, expresó con dolor Yanina que vive a pocas cuadras del escenario del horror.
“La Policía no hace nada. No hay detenidos y todos saben quién fue el que disparó. Esto no fue solo un tiroteo”, agregó.
Otra vida arrebatada
Poco antes del mediodía de ayer domingo, falleció José Sebastián Ramírez, un joven de 34 años que estaba internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital “J. B. Iturtraspe” tras recibir un disparo de arma de fuego en el abdomen en horas madrugada. Por este segundo homicidio tampoco había detenidos.
Según lo manifestado por familiares de Ramírez a LA VOZ DE SAN JUSTO, aproximadamente a las 6.10 de la mañana, José fue hallado gravemente herido en el abdomen en la intersección de calles 5 y 12, a pocos metros del destacamento policial. Se investiga si lo balaron en el marco de un intento de robo, hipótesis en la que más cree la familia.
“Cuando llegué, él estaba tirado en el piso herido. Una vecina me dijo que minutos antes escuchó un disparo y vio una moto que huía; después, que la misma moto regresó, (el conductor) lo miró a mi hermano y se fue. Escuchó un solo disparo”, relató una hermana de Ramírez que fue quien arribó a la escena del crimen. Ramírez fue trasladado al hospital gravemente herido y a las pocas horas se produjo el deceso.
“Pedimos justicia, que detengan a los culpables”, dijo y contó que fue un familiar de Milagros Vázquez (no quiso revelar su identidad) quien la acompañó en el auto a trasladar a José hasta el hospital esa madrugada trágica.
La investigación
La fiscalía de Rafaela a cargo de la investigación busca determinar el móvil de los homicidios y desde el Ministerio de Seguridad Provincial indicaron que los casos “no tendrían relación entre sí”. Sobre la posible relación de los crímenes con el narcotráfico, el coordinador regional del área, Sebastián Rancagno, sostuvo: “Nosotros de ninguna manera vamos a prejuzgar y no vamos a naturalizar algo que todavía no se puede asegurar”. Y destacó el compromiso de garantizar una investigación efectiva poniendo todos los recursos a disposición para esclarecer los hechos. Informó que se están analizando imágenes de cámaras de seguridad en el área y se espera obtener novedades en las próximas horas.
“Nos cayó con un balde de agua fría”, afirmó Rancagno al referirse a los asesinatos. “Esto fue una fatalidad, y siempre cuando hay alguien que queda en el medio de un enfrentamiento, que es lo que creemos, o de una posible amenaza y termina habiendo una víctima fatal, como en este caso, es terrible”. En cuanto a la situación de inseguridad en el barrio, Rancagno explicó: “Desde el día uno, empezamos a hacer un diagnóstico sobre la presencia policial y el patrullaje”. Detalló que se están diseñando “mapas de calor”, zonas de mayor conflicto y formas de patrullaje, y enfatizó que el gobierno está trabajando para mejorar la seguridad con un enfoque integral: “Hay un montón de cosas que se vienen haciendo. No sabemos lo que hubiese pasado si no hubiésemos mejorado algunas cosas”.
Reunión cumbre por la seguridad
Los recientes crímenes en barrio Acapulco han llevado al fiscal regional de Rafaela, Carlos Vottero, a convocar una cumbre de urgencia para este lunes al mediodía. La reunión incluirá a representantes del poder político, legislativo y del Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Fe, con el objetivo de abordar la situación y explorar medidas para recuperar la paz social y la seguridad en la zona.
Entre los convocados se encuentran el intendente de Frontera, Oscar Martínez; la presidenta comunal de Josefina, Jorgelina Sicardi; el senador Alcides Calvo; representantes del Ministerio de Seguridad de la provincia; el jefe de la Regional V, Víctor Rivero; el jefe de la PDI; y representantes de Gendarmería Nacional y Policía Federal, según el portal Rafaela Noticias.
Los crímenes de Milagros Vásquez y José Sebastián Ramírez, ocurridos entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, no parecen estar relacionados. La investigación está a cargo del fiscal especial de Homicidios, Martín Castellano, quien asumió la causa tras las primeras diligencias ordenadas por la fiscal Fabiana Bertero, quien estaba de guardia.