Economía
“No tenemos otra posibilidad que ser optimistas de cara al futuro”, dicen los exportadores
Rubén Filippa, titular de la CCE, analizó el cambio de reglas que establece el DNU de Milei para el comercio exterior. “Habrá que trabajar mucho para reformular la competitividad de las empresas, así como también ver cómo hacer para que tengamos menos retenciones y no más”.
La Cámara de Comercio Exterior (CCE) de San Francisco y la región renovó sus autoridades para el período 2024- 2025 para lo cual los asociados de esta cámara gremial empresaria designaron a Rubén Filippa como la persona que se hará cargo de los destinos de la institución por los próximos dos años.
Rubén Filippa tiene 59 años, está casado con Norma Abrate y es padre de dos hijos, Florencia y Agustín. Además, se desempeña como gerente comercial de Equipo Original y Exportaciones de la firma ZF Argentina, empresa en la que permanece desde hace 40 años.
Filippa tiene una dilatada trayectoria dentro de la CCE, para lo cual ya ocupó la presidencia entre los años 2011 y 2013. Previo a ello se desempeñó como vicepresidente, en 2010.
En entrevista con LA VOZ DE SAN JUSTO, Filippa repasó las primeras sensaciones vividas en su cargo, analizó la realidad del sector y las nuevas medidas económicas.
En primer término, destacó que “estoy muy contento con esta nueva responsabilidad en una institución como esta que quiero mucho. Esta es una cámara que está sana desde el punto de vista organizativo y económico. Es un gusto volver a presidir la institución ya que es un buen momento para aportar y dar valor a la cámara”.
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Luego, Filippa aludió al panorama por el que atraviesa la economía argentina y la influencia que la misma ejerce sobre la actividad de comercio exterior señalando que “la situación actual es delicada y en ese marco la competitividad de las empresas argentinas está altamente complicada”.
Recordó además que para exportar un producto argentino a cualquier lugar del mundo “tenemos que saber que va a competir con otros productos de distintos países y para eso tenemos que ser competitivos en calidad, contar con una logística aceitada y poseer un precio adecuado”.
“No tenemos otra posibilidad que ser optimistas de cara al futuro”, aseguró el entrevistado, aunque para que eso se pueda traducir en hechos concretos que mejoren la actividad “vamos a tener que trabajar mucho con entidades intermedias y con el gobierno para que apoyen a las empresas exportadoras”.
Luego Filippa recordó que la exportación como actividad en sí misma “significa el ingreso genuino de dólares al país y luego ese dólar que ingresa sirve para pagar sueldos, contratar servicios, generar riqueza o agregar valor en el país”.
Con todo ello dijo que “habrá que trabajar mucho para reformular la competitividad de las empresas, así como también ver cómo hacer para que tengamos menos retenciones y no más”.
Acto seguido, Filippa reconoció que las recientes medidas económicas comprendidas en el decreto de necesidad y urgencia (DNU) que el presidente de la Nación, Javier Milei, envió al Congreso de la Nación para su aprobación contienen medidas que “son positivas y negativas”.
"Los empresarios vamos a apoyar y tirar para adelante, independientemente de las circunstancias”.
“En el DNU hay un mix de medidas y en este contexto el exportador, como cualquier empresario, quiere tener reglas de juego claras, positivas y que nos permitan trabajar. Por lo tanto, todo lo que sean eliminación de burocracia, eliminación de trabas y promover la agilidad de las empresas para que puedan desempeñarse libremente es absolutamente positivo. La parte que todavía está bajo análisis tiene que ver con el agregado de retenciones junto a los 10 puntos del Impuesto País. Esto le come la ganancia al empresario que no tiene otra alternativa que aumentar el precio, pero a su vez si esto ocurre, el producto queda fuera de competitividad”.
Filippa sostuvo que el gobierno del presidente Javier Milei “se encuentra con una situación de falta total de dólares, una deuda enorme por falta de pago a proveedores al exterior por lo tanto hay que sacar dólares del Tesoro que no existen. Para eso tienen que echar mano a distintos mecanismos tributarios que termina cercenando gran parte de la competitividad de las empresas argentinas hacia el exterior”.
Por último, dijo que “hay muchas cosas positivas también. Los empresarios vamos a apoyar y tirar para adelante, independientemente de las circunstancias”.