Arquitectura
Neuroarquitectura: fenómeno que crece
El diseño de los espacios de trabajo tiene una influencia psicoemocional en las personas.
La neurociencia es una de las disciplinas que se puso de moda en los últimos tiempos. Cada vez más rubros convocan a esta especialidad para mejorar sus resultados.
En ese sentido la neuroarquitectura investiga cuál es la influencia psicoemocional de los lugares en las personas poniendo en jaque a los arquitectos ante un gran desafío: la creación de sitios placenteros, que incentiven el bienestar, la felicidad y la productividad.
La neuroarquitectura investiga cuál es la influencia psicoemocional de los lugares en las personas poniendo en jaque a los arquitectos ante un gran desafío: la creación de sitios placenteros
Dicho de otra forma, la neurociencia permite hacer más humana la arquitectura.
La iluminación resulta un elemento clave. La artificial no ayuda al cerebro, ya que debe esforzarse más, eso en las empresas puede influir en una baja productividad.
Las zonas verdes, también cumplen un rol fundamental. Contemplar la naturaleza tiene un efecto restaurador para la mente y aumenta la capacidad de concentración.
La forma en que se utilice el color no es un tema menor. El color azul y algunos verdes pueden ayudar en las tareas que requieren creatividad. Mientras que el uso de los grises y blancos tiene un impacto negativo en los niveles de estrés.
El cerebro busca distraerse, para recuperar energía. El open space tiene la ventaja de facilitar la sinergia, pero es una amenaza a la concentración. Por lo tanto los espacios de no distracción, silenciosos y agradables permiten articular trabajo en equipo con enfoque individual.