Economía
Metalúrgicos afirman que las nuevas medidas económicas afectan la competitividad
Advierten que implican la pérdida de mercados. “La Argentina va a contramano de cualquier país lógico y razonable”, dijo Ariel Poli, titular de la AIM.
La Asociación de Industriales Metalúrgicos de San Francisco (AIM) apoyó la postura expresada por la Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes de Córdoba que sostuvo que las nuevas medidas económicas del gobierno nacional vigentes para el sector productivo constituyen “un impuestazo”.
Sostienen que los últimos anuncios, que esperan sean de carácter transitorio producto de la escasez de divisas, afectarán la actividad, con fuerte impacto en las Pymes, a partir de una mayor presión fiscal al sector productivo, mayores costos y pérdida de competitividad para la exportación.
En los últimos días, la cámara que nuclea a los industriales metalúrgicos de la provincia se reunió con el ministro de Industria, Comercio y Minería, Eduardo Accastello, oportunidad en la cual entregó un escrito a través del cual plantean su preocupación ante las últimas medidas anunciadas por el ministro Sergio Massa.
Entre otras cosas, sostienen que “las nuevas disposiciones afectan la competitividad del sector industrial cordobés, implicando la pérdida de mercados”.
Más presión fiscal. Aplicar el impuesto País sobre importaciones limita aún más el acceso a insumos necesarios para la industria.
El Gobierno anunció mejorará el tipo de cambio para el maíz y las economías regionales y eximirá del impuesto País a las importaciones vinculadas con la canasta básica alimentaria. Sin embargo, industriales advirtieron, entre otras cosas, que rigen para las operaciones que accedan al mercado libre de cambios y lo perciben los bancos al momento del pago, en pesos, es decir que aplica sobre importaciones pautadas con anterioridad, generando costos retroactivos que no tenían cobertura cambiaria, generando un quiebre en la cadena de pagos de los sectores afectados.
La Provincia acompaña el pedido del sector
En respuesta a la postura expresada por los industriales metalúrgicos cordobeses, Accastello enviará un escrito al secretario de Industria de la Nación, José Ignacio De Mendiguren, expresando “la preocupación” por la que atraviesa la comisión directiva de la Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes de Córdoba (Cimcc).
Precisamente, el pasado lunes, el presidente de la Cimcc, Gustavo Del Boca, entregó al ministro Accastello una nota en la que expresan que ante las recientes medidas anunciadas por Massa, oficializadas en la RG 5393 de Afip, es necesario revertir la situación que vienen afrontando los industriales cordobeses.
Los directivos de la Cámara sostienen que más que una devaluación encubierta, “estas medidas constituyen un impuestazo que atenta de manera directa contra la actividad exportadora del país, además de profundizar el efecto inflacionario que impacta en todo el arco industrial y con mayor intensidad en aquellas que requieren insumos importados para la producción”.
Señalaron además, que con estas medidas es “el sector industrial el que financia el déficit del Estado”, teniendo en cuenta que al incluir en el impuesto País la importación de mercaderías comprendidas en la Nomenclatura Común del Mercosur, con una alícuota del 7.5% y un pago a cuenta del 95% de dicho impuesto, el Gobierno Nacional implementa una medida tributaria sobre operaciones cambiarias vinculadas al pago de importaciones.
Asimismo, desde la Cimcc indican que “los porcentajes de sobrecosto que esta medida implica hacen inviable la exportación metalúrgica ya sea de manera directa e indirecta”.
Apoyo de la AIM San Francisco
Ante esta situación, la AIM brindó su apoyo a la postura expresada desde la cámara provincial que agrupa al sector al tiempo que renovó sus críticas a la medida dispuesta por el gobierno nacional.
El titular de la AIM San Francisco, Ariel Poli, consideró a esta medida como un instrumento “que atenta contra la competitividad” de las empresas, razón por la cual “nuestros costos en dólares se van por las nubes, con el agravante de que los insumos importados que necesitamos para terminar nuestro producto no se consiguen”.
“No solo padecemos el impacto que produce la aplicación de este impuesto sobre los bienes sobre el precio final del producto, sino que además hay que agregarle el inconveniente de la escasa llegada de componentes importados” necesarios para completar la producción.
Además, Poli coincidió en que “estas medidas constituyen un “impuestazo” que atenta de manera directa contra la actividad exportadora del país. A través de esta política, “le pusieron un incremento del 7,5 % sobre los bienes de capital y el 25 % sobre los servicios”.
“Yo no puedo trasladar mis sobreprecios internos a mis clientes del exterior y esto te pone en la disyuntiva de resignar ganancia o perder el mercado. Ellos no entienden esta cuestión porque es algo que no pasa en ninguna parte del mundo. La Argentina va a contramano de cualquier país lógico y razonable”, agregó.
Con todo esto en funcionamiento, Poli indicó además que “se agravan los problemas que tenemos actualmente para conseguir la materia prima con la cual poder trabajar y eso genera una baja considerable en la productividad”.