Más cerca del Parque Nacional
Es auspicioso que Córdoba haya terminado los estudios técnicos y estaría a un paso de ceder la enorme extensión de los bañados del Río Dulce y Mar Chiquita a la Nación. El Parque Nacional está un poco más cerca. Dependerá de la presteza y agilidad de los funcionarios nacionales que esta posibilidad sea una realidad en los próximos meses.
La provincia de Córdoba concluyó con los requerimientos técnicos que permitirán adoptar las medidas necesarias para ceder la jurisdicción ambiental de la región que rodea a la laguna de Mar Chiquita al Estado federal para que disponga la creación del Parque Nacional. Se trata de información técnica que demandó más de un año de trabajo a cargo de la "Unidad Ejecutora Ansenuza", para establecer los estudios de títulos de propiedad a los fines de lograr los límites del parque y su respectivo mapa.
Esta noticia es un nuevo eslabón en el proceso para que la más imponente reserva natural del centro del país pueda, de manera definitiva, convertirse en un área protegida bajo el esquema de Parque Nacional. Es que la región de los bañados del Río Dulce y el Mar de Ansenuza son uno de lo sitios más extraordinarios del planeta en cuanto a diversidad y vida silvestre. Es un humedal muy extenso que alberga cientos de especies de aves y otros animales, así como una flora muy característica.
Que Córdoba haya terminado los trabajos técnicos que permiten el traspaso de la zona a la Administración de Parques Nacionales es un paso trascendente. Porque ahora sí se podrá avanzar en cederla jurisdicción al Estado nacional de los inmuebles que sean señalados para la creación del mencionado parque. Esto permite atisbar que en un futuro no muy lejano se podrá aprobar la declaración y, con ello, culminar un proceso que lleva ya al menos 4 años de duración y que parecía demorarse más de la cuenta. Vale recordar que la región de la laguna de Ansenuza es Reserva Provincial de Uso Múltiple desde 1994 y fue declarada Humedal de Importancia Internacional por la Convención Ramsar en 2002, por la riqueza de su biodiversidad en el ecosistema.
Es de esperar que, luego del anuncio de Córdoba, la Nación avance decididamente con la creación del Parque Nacional. Debe tenerse en cuenta que antes de diciembre de este año tendría que culminar este proceso puesto que, de lo contrario, peligraría el aporte de 5,8 millones de dólares que la fundación Wyss, de Suiza, prometido ante la posibilidad de que por fin el Parque sea una realidad. Casi resulta una obviedad señalar que, aun sin ser Parque Nacional, el ecosistema de Ansenuza es motivo de asombro para quienes lo visitan. Y es un elemento central en el desarrollo del noreste provincial.
En definitiva, es auspicioso que Córdoba haya terminado los estudios técnicos y estaría a un paso de ceder la enorme extensión de los bañados del Río Dulce y Mar Chiquita a la Nación. El Parque Nacional está un poco más cerca. Dependerá de la presteza y agilidad de los funcionarios nacionales que esta posibilidad sea una realidad en los próximos meses.