Política
Martín Menem es el favorito de Milei para presidir la Cámara de Diputados
El sobrino del ex presidente Carlos Menem corre con ventaja para quedarse con la titularidad de la Cámara baja a partir del 10 de diciembre.
El diputado nacional electo de La Rioja por La Libertad Avanza Martín Menem es por estas horas el favorito del presidente electo Javier Milei para presidir la Cámara baja.
Si bien no se ha confirmado por las vías oficiales de LLA, el sobrino del fallecido presidente Carlos Menem lleva la delantera en la puja por comandar Diputados a partir del 10 de diciembre.
Según supo Noticias Argentinas, la decisión de Milei podría oficializarse en las próximas horas, días antes de la jura de los legisladores electos.
Menem había sido candidato a gobernador de La Rioja este año, ubicándose en el tercer puesto provincial.
En tanto, queda pendiente también la definición sobre quién se hará cargo de la presidencia del bloque de diputados nacionales, que contará con 38 integrantes.
De esta forma, el presidente electo se definió por un integrante de La Libertad Avanza para ocupar el tercer puesto en la línea de sucesión presidencial.
Ese cargo era codiciado por el diputado nacional del PRO por la provincia de Buenos Aires Cristian Ritondo, quien contaba con el respaldo del ex mandatario Mauricio Macri.
Este viernes Milei a través de su Oficina de prensa confirmó a la titular del PRO, Patricia Bullrich, como su próxima ministra de Seguridad, pero en el entorno de Macri aseguran que esa designación fue negociada por la ex funcionara a título personal.
La Presidencia de la Cámara Baja para Ritondo era uno de los lugares que había reclamado Macri, no así el Ministerio de Seguridad.
Otro que también quedaría afuera de la puja de confirmarse la designación de Martín Menem es el diputado nacional bonaerense Florencio Randazzo, cercano al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
En las últimas horas comenzó a fortalecerse dentro de La Libertad Avanza el reclamo para que la Presidencia de Diputados fuera ocupada por un legislador propio, más allá de la nula experiencia en el Congreso que tienen algunos de los elegidos en las elecciones del 22 de octubre pasado.