Bienestar
Lavarse las manos, un hábito económico y efectivo para prevenir enfermedades
Cada 15 de octubre se celebra el Día Mundial del Lavado de Manos para concientizar sobre esta práctica esencial para la salud, ya que, es la manera más efectiva de evitar la propagación de muchas enfermedades.
Las manos son uno de los vehículos más habituales con que se desplazan las bacterias de un lugar a otro, ya que, podemos trasladarlas a los alimentos que preparamos, superficies u objetos que tocamos (mamadera, chupete, juguetes o directo a la boca), tanto cuando vamos al baño o al manipular carnes crudas, huevos y vegetales sin lavar.
El lavado de manos con agua y jabón es una práctica sencilla, efectiva y económica que ayuda a prevenir muchas dolencias, incluso las Enfermedades Transmitidas por Alimentos, tales como síndrome urémico hemolítico (SUH), salmonelosis y shigelosis. Además, cuando los niños se lavan las manos con jabón antes de comer o después de ir al baño reducen el peligro de tener diarrea en más de un 40%.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) invitan a celebrar el Día Mundial del Lavado de Manos con el fin de generar conciencia sobre un hábito que puede salvar vidas, ya que esta práctica es la manera más efectiva de evitar la propagación de muchas enfermedades.
Es imprescindible enseñarles a los niños la importancia de adoptar buenos hábitos de higiene de las manos, porque se sabe que los hábitos adquiridos en edades tempranas, son los que van a perdurar a lo largo de la vida. En tanto, hay que recordar cuatro datos clave:
1. Lavarse las manos solamente con agua no es suficiente, es significativamente menos efectivo que hacerlo con jabón, ya que, usándolo facilita la frotación, lo que permite disolver la grasa y eliminar la suciedad que contienen la mayoría de los gérmenes. Si se usan adecuadamente, todos los jabones son igualmente efectivos para remover los gérmenes que causan enfermedades. Las manos húmedas se deben cubrir con jabón y frotar toda la superficie, incluidas las palmas, el dorso, entre los dedos y especialmente debajo de las uñas, por lo menos 20 segundos. Luego, se deben enjuagar bien y secarlas, ya sea con una tela limpia o agitando las manos. Una manera fácil de calcular los 20 segundos es encontrar una canción familiar que tome ese tiempo para cantarla, por ejemplo, toma cerca de 20 segundos cantar dos veces la canción del “feliz cumpleaños”.
2. El lavado de manos con jabón puede evitar enfermedades que matan a millones de niños por año. Es una de las maneras más efectivas de prevenir enfermedades diarreicas y la neumonía que, juntas, son responsables de la mayoría de muertes infantiles. El lavado de manos también puede prevenir infecciones cutáneas, infecciones a los ojos, parásitos intestinales, gripe aviar e influenza H1/N1 y trae beneficios a la salud de las personas que viven con VIH/sida.
3. Los momentos críticos para el lavado de manos con jabón son después de usar el baño o de limpiar a un niño y antes de manipular alimentos. Las manos se deben lavar con jabón después de usar el baño, después de limpiar las heces de un niño (o después de cualquier otro contacto con heces humanas, incluidas las de los bebes y niños) y antes de manipular alimentos.
4. Los niños pueden y deben ser agentes de cambio. Cuando se trata de compartir buenas prácticas de higiene, los niños pueden actuar como agentes de cambio y transmitir las “lecciones de lavado de manos” que aprenden en la escuela a sus hogares y comunidades. La finalidad del Día Mundial del Lavado de Manos es motivar a los niños para que hagan suyas y compartan las prácticas apropiadas del lavado de manos y hacerlos “embajadores del lavado de manos” en cada una de las iniciativas del país en el nivel nacional y local.