“Las rutas pueden estar mejoradas, pero lo importante es la responsabilidad de los conductores”
En el verano de 2008, un choque frontal entre dos autos se cobró la vida de 13 personas, entre ellas, toda su familia. Solo Melisa Álvarez sobrevivió a la tragedia de La Francia. Tenía 9 años. Hoy, ella convertida en madre y gran parte de la ruta 19 en autopista, apuesta a la educación vial.
Por Stefanía Musso | LVSJ
Ian, de 2 años y tres meses, juega sin parar en la casa de su mamá Melisa. Está contento de poder compartir cada momento con ella antes de ir al jardín. Eso que él está disfrutando le provoca a Melisa un pensamiento constante de los años que no pudo compartir con su familia.
Ellos viven en Recreo, la ciudad santafesina de la que Melisa Álvarez partió de vacaciones hacia las sierras de Córdoba junto a sus papás y sus hermanitos, en 2008, pero solo ella regresó.
La joven que hoy tiene 23 años es la única sobreviviente del hecho conocido como "la tragedia de La Francia", el accidente que ocurrió en la ruta nacional 19 en pleno recambio turístico de enero, cuando 13 personas murieron como consecuencia de un choque frontal entre dos autos.
Del total de las víctimas fatales (todos turistas), seis eran adultos y los siete restantes eran niños. Solo una niña sobrevivió y es Melisa, que por entonces tenía 9 años.
Ella es parte de lista de sobrevivientes de accidentes viales que se registraron en la transitada, angosta y peligrosa ruta nacional 19. Faltando poco más de 60 kilómetros para convertirse totalmente en autopista, Melisa celebra la concreción de la obra que seguramente brindará mayor seguridad pero pidió a los conductores prudencia y educación vial.
Ella espera que la transformación de la ruta en la que toda su familia encontró la muerte, permita que otras no tengan que pasar lo mismo que los suyos atravesaron. "Lo primero que viene a mi mente sobre la autopista 19 lista es que refleja un gran avance y una buena noticia para las personas que la transitan. Gracias a Dios que se pudo lograr eso", dijo Melisa.
Y reflexionó: "Las rutas pueden estar mejoradas, pero lo importante es la responsabilidad de los conductores para evitar los accidentes".
Esta joven mamá pertenece al grupo 460 de Estrellas Amarillas y para ella es fundamental la prevención y la educación. "Los accidentes se pueden prevenir, sea en el vehículo que sea. Para ello tiene que haber educación vial", afirmó.
Una de las fotos que atesora Melisa junto a sus
padres.
Siempre presentes
Hace cuatro años que Melisa no recorre la ruta 19. Cuando vuelva a viajar hacia nuestra provincia, ya lo hará sobre una autopista. "Viajé con la iglesia a la cual pertenezco, pasé por San Francisco y también por La Francia. Hice el recorrido muy despierta porque desde el momento en que salí de Recreo, no pude dormir. Tal vez sea porque el último recuerdo que tengo de ese día es que estaba dormida y desperté a los tres días del accidente", recordó la entrevistada.
Para Melisa la forma de viajar es la misma que tuvo cuando volvió a transitar la 19, más ahora que vela por la seguridad de su pequeño Ian. "Cuando me subo a un auto para viajar, no puedo cerrar los ojos y estoy atenta a todo el recorrido que hago. Puedo tal vez dormirme 10 minutos, pero no puedo dejar de prestar atención a lo que ocurre y voy observando la ruta", contó.
Aunque pasen los años, cada 13 de enero un fuerte dolor la paraliza. "Estoy bien, con ánimos y ganas de salir adelante pero el día de la fecha del accidente me siento muerta porque es el recuerdo de haber estado dormida y no haber hecho nada por mi familia, aunque si hubiera estado despierta, no sé si habría podido hacer algo".
Melisa recuperándose luego del accidente con una estrella amarilla en su
yeso.
Pese a que pasó mucho tiempo de ese acontecimiento que le marcó su vida para siempre, ante cada siniestro vial que se entera, se genera una reflexión en ella. "Me pongo en el lugar de las familias que quedan y se me viene la imagen de mi accidente, de lo que yo pasé hace 13 años. Cada caso me genera empatía, los conozca o no, pero les envió fuerza para poder salir adelante y que sean capaces de soportar esa prueba y sobrellevarla. Eso lleva mucho tiempo".
"A mí me pasó hace 13 años y cinco meses, y todavía me cuesta mucho salir adelante. Solo me queda el recuerdo de mi familia que guardaré siempre en mi mente y en mi corazón. No estoy enojada, pero sí con dolor por no tenerlos. Sé que ellos me cuidan, a Ian y a mí, desde un lugar mejor".
Un accidente sin precedentes
Considerado como uno de los siniestros más impresionantes que se conocieran en la 19, el accidente ocurrió en pleno verano; en un día de calor intenso y para sorpresa de todos, la cantidad de personas que viajaban en los vehículos: un Ford Galaxy y un Fiat Duna Weekend.
En el primero viajaban dos familias de la localidad de Federal (Entre Ríos), mientras que en el segundo lo hacían los de Recreo (Santa Fe).
El impacto se produjo aproximadamente a las 18.30, cinco kilómetros al este de La Francia, en dirección a Devoto, frente a una estación de servicio abandonada que era del Automóvil Club Argentino.
Aunque el tramo era recto y en buen estado general, todo terminó de la peor manera. Una versión dio cuenta que al parecer se le habría roto un neumático trasero al Duna Weekend, lo que hizo que el conductor perdiera el dominio del volante.
Según esta hipótesis, el auto se habría cruzado de carril y habría sido chocado en su lateral derecho por el Ford Galaxy que iba en sentido contrario.
El Galaxy, que dejó grabada una larga frenada en el asfalto, arrastró al Duna Weekend durante varios metros. Ambos terminaron en la banquina sur.
A 13 años de la tragedia de La Francia (Archivo LVSJ)
En el Galaxy viajaban seis, un matrimonio y una familia. El matrimonio estaba formado por el conductor del vehículo, Pedro Alejandro Ruiz (33), y Daniela Gassmann (28). Los demás eran Walter Fabián Amarillo (34), Gisela Mariela Oyuelo (34) y sus dos hijas: Milagros Amarillo (8) y Julieta Ayelén Amarillo (11). Todos murieron.
En el Duna iban Juan Demetrio Álvarez (52), el conductor, junto a Ana Elba Granau (45), Verónica (hija del primer matrimonio de Granau) con sus dos hijas Valentina y Jazmín y los tres hijos del matrimonio Álvarez: Eliana Lara Anabel Álvarez (5), Mauricio Juan Adrián Álvarez (11) y Melisa Noelia Álvarez (9), esta última, la única sobreviviente del trágico choque.
A 13 años de la tragedia de La Francia (Archivo LVSJ)
Córdoba, entre las peores. Según el Ministerio de Transporte de la Nación, durante 2020 ocurrieron 295 accidentes fatales en nuestra provincia, la segunda en cantidad después de Buenos Aires. En cuanto a víctimas fatales, Córdoba ocupa el puesto número 3 con 328 fallecidos, detrás de Santa Fe y Buenos Aires.