Agustina Massara, saxofonista de La Delio Valdez
“La música es revolucionaria”
Antes de su presentación en el Festival del Humor, la Buena Mesa y la Canción, Agustina Massara de la Delio Valdez habló sobre el éxito de la banda
Festivales, giras, encuentros y recitales. La Delio Valdez está viviendo en este momento la consagración de su carrera de 15 años de manera autogestiva. En medio de este éxito llegará a la ciudad de San Francisco en la nueva edición del Festival del Humor, la Buena Mesa y la Canción que se llevará a cabo el 16, 17 y 18 de febrero en el predio de la Rural.
Con la cumbia como la lengua común que surca Latinoamérica toda en clave musical, el grupo suena como un lenguaje único que supo conquistar diferentes generaciones causando una verdadera revolución musical.
“Inocente”, la canción que marcó un antes y un después en la historia de la banda, abrió camino a estar presentes en muchos lugares y ser de los más solicitados por el público. En el caso del Festival de la Buena Mesa, la noche del sábado es la más solicitada en la venta anticipada de ticket y contará con la actuación esta agrupación junto a Karina, la Princesita, como números centrales.
El camino de la banda es lo que recorrió casi por completo Agustina Massara, la saxofonista de La Delio Valdez que dialogó con AM 105O y LA VOZ DE SAN JUSTO en la previa a su visita a la ciudad aseguró que desde el primer momento su relación fue “amor a primera vista”.
Al frente de la banda de 16 integrantes, “este año estamos cumpliendo 15 años con la banda y en lo personal, tanto tiempo recorrido es un placer estar haciendo música y vivir de esto en tiempos que son tan difícil para la Argentina”.
“Lo siento como un privilegio, lo hago con mucho respeto y conocer las ciudad y localidad de la Argentina, acercarnos a las diferentes costumbres es muy motivador para mí como persona pero muy enriquecedor con lo referido a la música porque es transfrontera y uno está todo el tiempo queriendo aportar colores, ritmos y sonoridades que nos permitan compartir porque la música es para uno pero también para el otro. Eso ocurre en el escenario, es una ida y vuelta con el público, una energía muy fuerte por la que uno se va retroalimentado. Ojalá sea por mucho más que podamos seguir compartiendo, y aprendiendo”, sostuvo.
Sobre el protagonismo que tiene en el grupo, la música se mostró muy movilizada y agradeció a la gente por este momento pero aclaró que fueron muchos años de trabajo y entrega.
“No fue magia porque son muchos años de esfuerzo y de pulir lo artístico, lo personal y lo grupal, pero también, me da orgullo que la orquesta rote todo el tiempo el protagonismo de las voces porque son cuatro cantantes, hay una paleta tímbrica muy variada que logra afianzar la unión colectiva para salir de las estructuras”, explicó Agustina.
“Salimos de la vieja formación del héroe o frontman y entender que se necesita de todos para salir adelante. La Delio lo permite y eso está representado en la música, en los movimientos y todo lo que hacemos como equipo de trabajo porque una cosa es lo que se ve, que es la banda, pero también hay un grupo de gente trabajando atrás que hace que todo sea vea hermoso como es luz, vestuario, escenario y más”, contó.
Una vida con la banda
La orquesta comenzó en 2009, como un grupo de amigos que se juntaron para hacer canciones de cumbia. Al poco tiempo, llegaba Agustina. “Mi ingreso, fue en el segundo año de la orquesta en 2011, cuando me llamó Pablo Fidel “Oso” Broide (saxo tenor y maracas) con quien compartía la escuela de música en Avellaneda. Fue un amor a primera vista cuando llegué al ensayo y aquí estoy 13 años después de rutas y camino de música autogestiva”.
“Ser cooperativa legal no es fácil y tuvimos que aprender porque en el ambiente musical no hay información clara sobre esto. El camino fue ocurriendo por los hechos concretos. Seguimos eligiendo este camino de trabajo y puedo decir que es posible”.
Aunque Agustina toca el saxo desde los 10 años, se formó en la Escuela Superior de Educación Artística en Música Popular Juan Pedro Esnaola y luego siguió la de Avellaneda en Buenos Aires. “Este lugar un ejemplo de lucha, de defender la cultura popular, la escuela pública, de haber batallado muchísimo por tener su edificio propio. Sus profesores son personas de una pasión y militancia muy importante. La Escuela de Música de Avellaneda es un semillero de artistas”, indicó.
Defensora de lo nuestro, “la cultura es un término grande pero sin ella qué seríamos. Para mí es la base, la expresión, la defensa de costumbres, de derechos; es poder expresarse y no ser tajante sino aceptar la ambigüedad de poder adueñarse de una canción y hacerla propia. La cultura no es una cuestión individual y estoy segura que crea la revolución en el ser humano por eso sé que la música es revolucionaria”, concluyó.
La noche de “La Delio”
El grupo será el encargado del cierre de la segunda noche del Festival, cuando también se presentarán el Ballet Patria; Los Fenders; Francisco Ércole; La Roma, Lapeband; Karina La Princesita y Eber Ludueña con su humor.
Las entradas se pueden conseguir en el Superdomo de lunes a viernes de 9 a 13 y por la tarde de 17 a 20. También por internet a través de Edén Entradas (www.edenentradas.com.ar) o en la página del festival (www.festivaldelabuenamesa.com).
Quienes compren vía web pueden optar por retirar la entrada física en el Superdomo o recibir, vía mail, un código QR para el ingreso al Festival.
Se pude pagar en efectivo, débito o hasta 4 cuotas sin interés con Tarjeta Cordobesa. Los menores de 12 años no abonan entrada general.
Por las tres noches (entrada general) hay un abono de $14.000. Todos los precios, a continuación:
Viernes 16: general: $5.500; tribuna: $7.500; platea A-B: $12.000; tablones: $9.000.
Sábado 17: general: $5.500; tribuna: $7.500; platea A-B: $14.000; platea C-D: $11.000.
Domingo 18: general: $5.500, tribuna: $7.500.
Beneficios para personas con discapacidad: entrada gratuita con un acompañante para cada noche; sillas disponibles (con cupo limitado). Deben presentar certificado de discapacidad y DNI.