Salud
Farmacias: por diferencia de precios la gente se vuelca a los genéricos
Como sucede con los alimentos, el fuerte aumento que tuvieron los remedios de las marcas más reconocidas del mercado hace que los consumidores compren las versiones más económicas de los medicamentos.
El fuerte impacto inflacionario sobre la economía familiar ha llevado a implementar notorios cambios en la vida diaria de los ciudadanos para llegar a fin de mes. Por eso, fueron quedando en el camino las primeras marcas de ropa, alimentos e inclusive medicamentos para permitir que los exiguos ingresos puedan rendir un poco más frente al imparable embate inflacionario.
Precisamente, en el rubro farmacia vienen advirtiendo en los últimos meses que sus clientes se están ‘pasando’ para el rubro de los genéricos, buscando con ello un ahorro.
Cuando se habla de medicamentos genéricos hay que señalar, entre otras cosas, que es un medicamento con la misma forma farmacéutica e igual composición cualitativa y cuantitativa en fármacos que otra especialidad de referencia, cuyo perfil de eficacia y seguridad esté suficientemente establecido por su continuado uso clínico. Su precio en general resulta inferior al de los mismos medicamentos de marca, pues no repercuten en él los costos, los gastos de la investigación, el desarrollo ni la promoción inicial. Normalmente son fármacos monodrogas, cuya eficacia está avalada con muchos años de experiencia clínica y que tienen una utilidad terapéutica plenamente vigente.
En nuestra ciudad, las farmacias están recibiendo cada vez más consultas de parte de sus clientes sobre la posibilidad de adquirir estos medicamentos ante la imposibilidad cada vez más concreta de pagar el costo de los productos de los laboratorios convencionales.
Esta situación fue confirmada desde el Colegio de Farmacéuticos de San Francisco, por su titular Nora Gagliano, quien indicó que por efecto de la pérdida del poder adquisitivo de la mayoría de la población “estamos observando que cada vez más la gente pregunta por los medicamentos genéricos como una manera de achicar sus gastos”.
“La gente busca alternativas”
“En el rubro de venta de medicamentos las personas no pueden evitar consumirlos porque tiene que ver con el cuidado de la salud. Lo que estamos observando es que se están inclinando por marcas alternativas”, agregó.
“La gente que lo necesita, no puede dejar de tomar medicamentos porque en eso le va su salud. De todas formas, cuando la gente viene a la farmacia con la receta y pregunta el precio del medicamento recetado, se asusta y pregunta por alguna otra opción más accesible” y allí es donde entra la demanda de medicamentos genéricos.
“En ese momento los farmacéuticos le explicamos al cliente cómo está compuesto el medicamento, qué drogas posee ya que el genérico tiene la misma composición, pero con un precio notoriamente más barato”, explicó Gagliano.
De hecho, en las farmacias la diferencia de precios entre productos de laboratorios más comerciales contra otros denominados genéricos suele llegar hasta el 300 %.
Ante esta situación, la farmacéutica reiteró de manera tajante que en virtud de la actual crisis económica “la gente busca alternativas” cuando llega al mostrador de las farmacias y ratificó que “no hay diferencias en los resultados” que brinda un medicamento de laboratorio comercial que otro del tipo genérico.
“La gente está cada vez más informada sobre los medicamentos genéricos y saben que todo lleva el mismo control de parte de la Anmat”, explicó Gagliano.
Cambios por el DNU
Por otra parte, cuando el presidente Javier Milei elaboró el Decreto de Necesidad y Urgencias conteniendo numerosas disposiciones para poner en práctica, se incluía precisamente una modificación clave en las recetas que elaboran los profesionales de la medicina.
De acuerdo con el documento publicado en el Boletín Oficial, las recetas médicas deberán incluir únicamente el nombre genérico de los medicamentos. Así, los profesionales de la salud ya no podrán colocar una marca comercial dentro de la prescripción.
De esta manera, la marca del remedio que el paciente requiera será definida por el farmacéutico en el mostrador y no por el médico.
Sin embargo, esta situación generó reclamos de las cámaras empresarias del sector, de asociaciones médicas y de la propia Academia Nacional de Medicina a partir de lo cual el gobierno introdujo una modificación para darles a los médicos la posibilidad de sugerir marcas comerciales en las recetas.
En este caso, la presidenta del Colegio de Farmacéuticos reconoció “el poder del lobby” del sector de los laboratorios ya que “este tema se llevó puesto el gobierno del expresidente Arturo Illia. El presidente Javier Milei estableció originalmente que el médico debía prescribir por medicamentos genéricos, pero eso fue lo primero que cambiaron ante la presión de los laboratorios. Ahora no solo se dispuso que el médico debe prescribir por la marca comercial, sino que, en el caso de que en la farmacia se cambie el producto por otro más económico, al médico le llega un informe indicando esa situación”.