Estudiantes de arquitectura transformarán viviendas sociales para liberarlas de la estigmatización
La iniciativa forma parte de un proyecto provincial que busca repensar los espacios de habitar doméstico en relación con las obras de urbanización.
Este martes, la ministra de Promoción del Empleo y de la Economía Familiar de la Provincia de Córdoba, Laura Jure, y la decana de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño (Faud) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Mariela Marchisio, firmaron un convenio de colaboración para trabajar en el diseño de viviendas sociales.
La propuesta se desarrollará a través de un Taller Ideas de color - Acciones cromáticas en el Hábitat, e incluirá la articulación con la Cátedra Morfología 3 de la Faud convirtiéndose en una gran posibilidad para que los y las estudiantes transfieran su aprendizaje sobre el color urbano a construcciones específicas en la ciudad.
El objetivo es que mediante este nuevo prototipo ya diseñado las viviendas sociales y su cromía dejen de ser solo símbolos identificables por el asentamiento que había allí o la pertenencia a determinado sector, sino por el contrario que todo sea parte de la misma traza urbana.
De esta manera, se buscará mejorar en conjunto el nuevo prototipo de vivienda social -diseñado desde el Ministerio -, a través de la intervención del color, la puesta en valor y la interacción de quienes la habitarán posteriormente.
La arquitecta Sara Kenny está en la coordinación del programa de rediseño de las viviendas sociales en el Ministerio y forma parte del Instituto del Color, precisamente ella es quien está trabajando en el armado del taller y el impulso que significará para la urbanización de estos espacios.
-¿Cómo se va a desarrollar la propuesta?
Se está trabajando en la urbanización de los barrios, urbanizaciones de loteos de tipo social y en muchos casos son espacios donde se erradican así asentamientos. En relación a estas viviendas, nosotros hicimos este prototipo sobre el que se firmó el convenio y a través del Instituto del Color y la cátedra de Morfología 3 buscamos en la intervención cómo los colores se mimetizan con lo urbano, el entorno final una vez construidas las viviendas.
-¿Con qué modalidad van a trabajar los estudiantes y cuántos se prevé que sean?
En la cátedra nosotros tenemos una currícula de entre 800 o 900 alumnos, ahora en este contexto lo redujimos a un taller donde posiblemente participarán unos 90 o 100 alumnos bajo la idea de que sea semipresencial pero todavía se está armando. Desde el taller queremos que se hagan las propuestas sobre cromía de colores domésticos y que ellos puedan en el contexto real ver como interactúa el color y esa verificación en el lugar que en la parte académica queda en lo teórico muchas veces.
-¿Cómo cree que beneficiará el programa a la eliminación de la estigmatización de estos sectores de viviendas sociales y los lugares o asentamientos que reemplazan?
Este convenio precisamente, además del hecho de trabajar con la facultad, implica hacer una reflexión sobre el color doméstico y su integración desde lo urbano a toda la ciudad y no que sea una diferenciación, por eso hay que trabajar con el entorno, el paisaje y que, en cambio, las viviendas se mimeticen ahí y se tome conciencia de qué colores hacen a lo urbano, al hábitat social que se inserta en una trama real que es la ciudad.
-¿Qué plazo de ejecución tiene?
El taller se realizaría entre septiembre y octubre, también dependen de los plazos de obras, pero una vez que los chicos cursen este taller especial quedarán vinculados para cuando se llegue a esa instancia en el proyecto de las viviendas. Hay varios barrios en construcción y tenemos que elegir con cuál trabajar y que sirva la sistematización u opción en otros que se desarrollan en la ciudad de Córdoba.
-¿Cuáles son las expectativas con el programa?
Son altas. Hemos hecho esta experiencia en un edificio público con los chicos que después pudieron ver el cambio y su integración a la sociedad. Poder hacer el salto de lo abstracto a la aplicación en el objeto es algo muy bueno para el estudiantado. Desde lo social es una gran oportunidad para la apropiación de quienes vivan en esos sectores. Queremos generar la identificación de las personas con ese nuevo hogar y que sea amigable y acogedor.