En el ACV el “tiempo es cerebro”: la importancia de consultar de inmediato
Hoy 29 de octubre se conmemora el Día Mundial del Accidente Cerebrovascular. Reconocer un ACV y dirigirse de inmediato a un centro médico es fundamental para recibir el tratamiento adecuado. El neurocirujano, Raúl Villafañe detalla cómo detectarlo y prevenirlo.
Por Isabel Fernández|LVSJ
Un accidente cerebro vascular (ACV) es la obstrucción de una arteria cerebral o su ruptura y es una urgencia médica causada por la brusca pérdida de flujo sanguíneo al cerebro. En ambos casos, el "tiempo es cerebro", ya que las neuronas se debilitan o mueren porque no pueden funcionar sin oxígeno.
Por eso, reconocer los síntomas de un ACV y dirigirse de inmediato a un centro médico es fundamental para recibir el tratamiento adecuado, evitando secuelas más graves o incluso la muerte.
Cada 29 de octubre se conmemora el Día Mundial del Accidente Cerebrovascular. Para saber cómo prevenirlo LA VOZ DE SAN JUSTO consultó al neurocirujano endovascular, Raúl E. Villafañe (MP-16012/6) del Instituto Internacional de Neurociencias de nuestra ciudad, quien remarcó que es muy importante estar atento en el momento en que comienzan los síntomas y su duración.
"Alguien puede vivir con la mitad del corazón infartado y nadie lo nota. Un ACV que dañe medio cerebro genera un paciente que no habla; no entiende, está paralizado de al menos un hemicuerpo, confinado a una silla de ruedas y un gran porcentaje muere por complicaciones entre 6 meses a un año", advirtió Villafañe.
Remarcó que para evitar eso "es importante que cuanto antes el paciente o la familia sospeche que está sucediendo un ACV debe concurrir a un centro especializado. Hay una ventana de tiempo antes que el cerebro se dañe en forma irreversible y es de hasta 6 a 12 horas. Se debe desobstruir la arteria tapada antes de transcurrido ese tiempo de ocurrido el evento, para evitar el daño permanente cerebral; las secuelas neurológicas graves o la muerte".
"Esta trombectomía cerebral, debe ser realizada por un neurointervencionista. En algunas oportunidades los cardiólogos se aventuran con sondas en el cerebro pero esto es un riesgo ya que el funcionamiento es muy diferente al corazón", advirtió Villafañe quien es el único profesional en la ciudad autorizado por las sociedades científicas para ese procedimiento.
"El único procedimiento eficaz es destapar la arteria cerebral obstruida lo antes posible, todos los medicamentos endovenosos o por vía oral ayudan, pero estudios basados en evidencia científica, no han mostrado diferencia con los pacientes que no lo recibieron", afirmó el especialista.
Dr. Raúl Villafañe
Tipos de ACV
¿Cuántos tipos de ACV existen?. El doctor Villafañe afirmó que hay dos tipos: "el isquémico que ocurre cuando se obstruye la arteria y se produce un infarto cerebral, igual que en el corazón y el hemorrágico que ocurre cuando se rompe una arteria cerebral y se produce un hematoma".
En cuanto a los factores de riesgo Villafañe explicó que la hipertensión arterial y el tabaquismo "son los principales, están presentes en casi el 80% de los pacientes que sufren un ACV, mientras que hay otros menos importantes como la diabetes, alteraciones del colesterol, triglicéridos y alteraciones de los globulos rojos, etc".
La prevención también ocupa un rol fundamental: 8 de cada 10 ACV pueden prevenirse y casi el 80% se pueden prevenir mediante hábitos de vida saludable. Es importante realizar controles periódicos con el médico de cabecera, adoptar hábitos saludables y, sobre todo, controlar la hipertensión para lo cual el médico puede recetar medicamentos.
La cuarta causa de muerte
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 15 millones de personas sufren un evento vascular cerebral al año en todo el mundo. De este grupo, 5 millones mueren y otros 5 millones sufren una discapacidad de por vida. Así, el ACV representa la cuarta causa de muerte y la primera causa de discapacidad.
En la Argentina se produce un accidente cerebrovascular cada nueve minutos y 126 mil casos por año, de los cuales 18 mil terminan en muerte.
"Durante la pandemia, aumentaron los casos de ACV. Por el comportamiento del coronavirus y además porque algunas de las vacunas son trombogénicas, facilitan la coagulación de la sangre dentro de las arterias, y así sucedieron ACV, infartos de corazón, que provocaron hasta la muerte", recordó Villafañe.