Crecen las huertas orgánicas en Alicia
El municipio, a través del área de Bromatología y Ambiente puso en marcha dos proyectos agroecológicos: uno educativo que funciona en la sala cuna y otro de carácter comunitario, integrado por vecinos del pueblo. Autoabastecimiento y alimentación saludable, los objetivos en común.
La cuarentena y la pandemia incrementaron notablemente el interés por armar huertas orgánicas tanto familiares como comunitarias. En la localidad de Alicia, la sustentabilidad es una política de Estado que se consolida a través de diferentes actividades que comenzaron con el reciclado de la basura y amplían las ventajas a favor del medioambiente.
La puesta en marcha de huertas agroecológicas es una de ellas. Recientemente, desde el área de Bromatología y Medioambiente se pusieron en marcha dos proyectos de este tipo: uno educativo que funciona en la sala cuna "El Duendecillo Travieso" y la otra, de carácter comunitario denominada "Don Pepe".
Los niños, transmisores de conductas ecológicas
El
área de Bromatología y Medio Ambiente visitó la mencionada sala cuna para
llevar a cabo una actividad coordinada y brindar a los pequeños una experiencia
didáctica para que descubran la importancia de producir nuestros propios alimentos
y el recorrido de los mismos desde su producción hasta la mesa de nuestros
hogares.
Además se adaptaron aprendizajes sobre huerta agroecológica, preparación de la tierra para sembrar y semillas de estación.
"Sabemos la importancia que tiene la alimentación saludable, y uno de los pilares es la producción de alimentos agroecológicos, por lo que, buscamos una forma de poder llegar a la población y pensamos que los niños pueden ser buenos trasmisores de estas conductas o acciones", señaló a LA VOZ DE SAN JUSTO María Inés Zimarro, del área de Bromatología y Medio Ambiente.
"Adquirir estos conocimientos también fomenta la curiosidad, el interés científico, la posibilidad de desarrollar responsabilidades, promueve la alimentación saludable y el trabajo en equipo", resaltó la funcionaria municipal.
"El objetivo radicaba en que los niños pudieran cuestionarse cómo fueron producido sus alimentos, cómo pueden cuidar esa tierra en la que van creciendo esos alimentos, qué alternativas tienen para no utilizar productos químicos que dañen nuestra salud y la del planeta", continuó.
Zimarro comentó además que "la docente responsable de la sala cuna se encargó de acondicionar, junto a ellos, los canteros con cajones de madera (que buscamos en nuestra planta de clasificado) haciendo vagones de colores simulando un tren. Estos fueron pintado y recubiertos con materiales reutilizables". "La siembra fue en canteros y también directo en la tierra. Otras de las acciones que se llevaron adelante fue el diseño de la cartelería para cada cultivo. Tratamos también de inculcar la reutilización de los materiales y que estos puedan ser transformados en algo útil", añadió.
Entre las semillas sembradas se encuentran acelga, espinaca, rúcula, lechuga, habas, remolachas, rabanito y perejil, aromáticas (lavanda, cilantro, menta y curry, tomillo) y algunas flores (caléndulas). Próximamente añadirán frutales.
"Fue hermoso ver como los niños se interesan por los colores, aromas, formas de cada planta. Ellos frotaban sus hojas y olían sus manos, reconocían cada especie y así podíamos explicarle cual es el objetivo de esa planta en la huerta", expresó.
Trabajo comunitario
Con respecto a la huerta comunitaria "Don Pepe", Zimarro explicó que el proyecto que surge luego de varias capacitaciones que organizó el área de Bromatología y junto a Cultura" empezamos a plantearnos como podíamos hacer para incentivar a los grupos a que formarán una huerta comunitaria agroecológica y fue en ese intervalo, el señor Alejandro Nagel ofrece su predio para poder llevarla adelante".
La Secretaría de Ambiente de Córdoba acompaña brindando asesoramiento y, además, envió suministro de semillas para iniciar, que ya fueron entregadas a las personas que estarán a cargo de llevar adelante la huerta.
También recibieron herramientas de trabajo que el legislador departamental Ramón Giraldi entregó en oportunidad de su última visita.
"Cuentan con una compostera municipal y con la infraestructura necesaria para llevar adelante esta maravillosa labor que emprenden vecinos aliceños", manifestaron desde el municipio.
La huerta comunitaria está integrada por 8 personas y tiene como principal objetivo brindar a la población local herramientas para la mejora de la economía social y generar espacios comunitarios que les posibiliten desarrollar actividades productivas en forma asociativa que contribuyan a mejorar su calidad de vida.
Está proyectado en los planitos una chacra donde pondrán melones, sandias y zapallos, y un monte frutal con 10 frutales cítricos y de carozo.