Gatronomía
Clericó: secretos para prepararlo
Un cóctel refrescante que combina vino tinto con una variedad de frutas frescas y jugosas, creando una mezcla riquísima de sabores y colores.
El clericó es un cóctel refrescante que combina vino tinto con una variedad de frutas frescas y jugosas, creando una mezcla riquísima de sabores y colores. Es muy habitual en América Latina, pero su popularidad ha trascendido fronteras, para convertirse en una bebida clásica en reuniones sociales y festejos, sobre todo en verano.
La palabra clericó proviene de la palabra inglesa “claret cup“, por la forma de la copa en la que se servía tradicionalmente este cóctel.
Se cree que su origen viene de Roma, pero fueron los ingleses quienes lo popularizaron primero en sus colonias, y después en países de América Latina.
Su versatilidad radica en que se puede adaptar a los gustos personales, ajustando el nivel de dulzura y el tipo de vino que se utilice.
El proceso de preparar este trago es muy sencillo. Se elige un buen vino tinto, preferentemente joven y afrutado, aunque nada impide que sea rosado o blanco. En una jarra, se mezcla el vino con frutas frescas cortadas en trozos, como manzanas, naranjas, peras y duraznos.
Se endulza a gusto y se le agrega un poco de licor, ya sea brandy o cointreau, para darle un toque especial. Es importante dejarlo reposar en la heladera unas horas, y agregar hielo en las copas al momento de servirlo.
Ingredientes: 1 botella de vino tinto frutal, 1 naranja en rodajas, 1 manzana en cubos, 1 pera en cubos, 1 durazno en cubos, 2 cucharadas de azúcar, miel o el endulzante elegido, 1/4 taza de licor de naranja, hielo.
En un recipiente grande o jarra, combinar el vino tinto con las frutas cortadas. Agregar el azúcar y el licor de naranja. Revolver suavemente con una cuchara de madera. Llevar a la heladera por, al menos, 20 minutos. Servir el clericot en copas o vasos individuales con hielo. Se puede decorar cada vaso con una rodaja de naranja o una ramita de menta. ¡Disfrutar bien frío!
Tips
1) Frutas: Experimentar con diferentes combinaciones de frutas para descubrir cuál nos gusta más.
2) Licor: Agregar el licor con moderación, ya que su papel es realzar los sabores, no dominarlos.
3) Endulzante: Ajustar la cantidad de endulzante a gusto, cuidando que no se tapen los sabores naturales de la fruta y el vino.
4) Reposo: Dejar reposar al menos 20 minutos en la heladera y servir con mucho hielo.