Chicos que viven resfriados: ¿Cómo saber cuando es rinitis alérgica?

Por Isabel Fernández|LVSJ

Los "mocosos" o la edad de los mocos son definiciones que suelen usarse como sinónimo de pequeñez e inmadurez para describir a los niños menores de cinco años. Caritas sucias, estornudos, ojitos tristes y narices que chorrean son los síntomas que tienen comúnmente los chicos pequeños y que motivan la mayoría de las consultas al pediatra.

¿Por qué se resfrían tanto? ¿Cómo diferenciarlo de una rinitis alérgica?. LA VOZ DE SAN JUSTO dialogó con el profesor y doctor en Medicina, pediatra especializado en medicina respiratoria, Héctor Badellino (MP-19324; ME-5968), de nuestra ciudad, quien explicó que los niños en los primeros años de vida tienen pocas defensas y las van adquiriendo a medida que entran en contacto con virus y bacterias.

"La inmunodeficiencia fisiológica es una etapa que va desde los 6 meses hasta cerca de los 5 años, esa inexperiencia predispone a que adquieran esos virus respiratorios que son muy contagiosos. También es la edad en la que comienza a aparecer la rinitis alérgica, entonces se suman las dos posibilidades", aseguró.

El rinovirus es la principal causa de los resfríos en los niños y adultos. Badellino dijo que aunque el frío "no provoca los resfríos, permite una mayor circulación de los virus, por eso es que las virosis en general se producen más en otoño y fines del invierno principio de la primavera".

"Eventualmente hay epidemias como en esta época y el contacto entre niños permite una diseminación con más velocidad, por eso es que el año pasado no hubo tantos casos debido a la cuarentena, pero este año volvieron a producirse los casos habituales", dijo.

El cigarrillo es uno de los principales factores de riesgo para que estos cuadros se produzcan. "En un hogar de fumadores aumentan las posibilidades de que los niños sufran procesos infecciosos respiratorios y también de desarrollo de asma", alertó el médico .

En cuanto al tratamiento remarcó que se debe evitar la automedicación "sobre todo el uso de descongestivos en gotas o spray nasales, que están absolutamente desaconsejados en niños y el uso indiscriminado de antibióticos ante la presencia de mucosidad".

La función de la nariz

Para comprender lo que sucede con la presencia de mucosidad en los niños debemos conocer cómo funciona la nariz. El pediatra aseguró que la nariz "tiene por función filtrar, calentar y humedecer el aire inspirado (para que dicho aire llegue en buenas condiciones a los pulmones), además de tener la función olfatoria".

"Para que se humedezca el aire es necesario producir mucosidad -aseguró el pediatra-. En un adulto sano se generan entre 10 y 30 cc de moco nasal diario. Ese moco se justifica por la presencia de células productoras de moco (llamadas caliciformes) y de glándulas mucosas más profundas".

Añadió que la irrigación de la mucosa nasal "es muy intensa, con gran cantidad de capilares que al dilatarse producen salida de líquido al espacio entre las células originando un inmediato aumento del volumen de los cornetes (estructuras esponjosas que se ubican dentro de la nariz) y por lo tanto llevando a un bloqueo nasal que puede revertir espontáneamente o con medicación".

Remarcó que la presencia de moco, "constituye un elemento fisiológico que en condiciones normales contribuye al funcionamiento nasal y a la defensa contra infecciones".

Ante situaciones en que se producen tanto congestión nasal (nariz tapada) como aumento de la mucosidad -por ejemplo en el resfrío, en la sinusitis, en la rinitis alérgica- ese bloqueo nasal puede dificultar la respiración y obligar al uso de la boca para respirar.

Badellino recordó que los niños menores de 6 meses "son respiradores nasales obligados y que por lo tanto la congestión como la mucosidad (aunque sea escasa) bloquean un porcentaje importante de la luz nasal, dado el pequeño tamaño de la misma".

Dr. Héctor Badellino

Cómo diferenciar resfrío de rinitis alérgica

A veces resulta difícil diferenciar un resfrío de una rinitis alérgica que está comenzando a manifestarse en un niño pequeño. El doctor Badellino afirmó que la "aparición de signos relacionados a la presencia de una sustancia llamada histamina -congestión brusca, mocos acuosos, picazón nasal y síntomas oculares asociados como picazón, lagrimeo y enrojecimiento ocular- al igual que la ausencia de síntomas virósicos -decaimiento, fiebre, cefalea, dolores musculares o antecedente de contacto con enfermos-, sugieren el diagnóstico de una rinitis alérgica".

En esta época del año es frecuente que aumenten los casos de rinitis alérgicas estacionales debido a la presencia de pólenes en el aire y a los vientos que los arrastran. "Los pólenes constituyen una causa importante de rinitis alérgica y en principio su presencia aumenta en meses de otoño o fines de invierno o primavera pero debido al cambio climático global y a la contaminación ambiental las plantas han modificado su ciclo de polinización", afirmó Badellino.

Remarcó que es "importante hacer la consulta con médicos especializados para poder discriminar entre una rinitis alérgica o un resfrío, sobre todo ante cuadros reiterados. Conocer la causa del trastorno conduce a un tratamiento adecuado".

La rinitis en el mundo y en San Francisco

La rinitis alérgica es altamente prevalente en el mundo y nuestra ciudad no es la excepción. En el año 2006, Badellino participó del Estudio Isaac (Estudio Internacional para las alergias y el asma) y se determinó que el 41% de los niños tenían rinitis y el 13% tenían rinoconjuntivitis alérgica.

"En ese momento el 54% de los adolescentes tenían síntomas de rinitis y el 19,8% tenían rinoconjuntivitis alérgica. En el año 2019 participé del Estudio GAN (Global Asthma Network), en el que San Francisco fue el único centro de Argentina en aportar datos y allí el 54% de los adolescentes tenían rinitis pero la prevalencia de rinoconjuntivitis había aumentado al 27,7%. Ese incremento en 13 años muestra que las patologías alérgicas se encuentran en aumento en algunos países del mundo, y en nuestro estudio queda claro que no somos la excepción", detalló Badellino.

Los factores ambientales contribuyen al aumento de las alergias respiratorias. El médico explicó que pueden aumentar "por el uso de cigarrillo en la casa, mayor permanencia dentro de la misma, sobre todo en esta época de pandemia, menor actividad física y el consumo de comida chatarra, junto con la modificación de la microbiota intestinal por factores ambientales y a otras causas".

"Por otro lado en otra de mis investigaciones pude demostrar que los niños y adolescentes que viven en el ambiente rural en contacto con ganado vacuno están protegidos y presentan menos alergias que los niños de ciudad", finalizó.