CES, 94 años apoyando al comercio y apostando al progreso
"La interacción pública y privada es fundamental para que nuestra comunidad se mantenga ordenada y en crecimiento", aseguraron desde la entidad que se encamina hacia el siglo de vida.
El Centro Empresarial y de Servicios (CES) se encamina hacia los 100 años de vida. Este lunes cumplirá 94 años de fructífera trayectoria y crecimiento y si bien no habrá actos, la comisión directiva ya trabaja para la gran fiesta que será el centenario.
En este arco, entrevistamos a Darío Tamagnini, actual presidente de la institución que agrupa a más de 500 empresas de diferentes rubros.
Tamagnini analizó la realidad de entidad que tiene la misión de representar, defender y promocionar los derechos e intereses de sus socios de forma democrática e igualitaria. Además de ser una institución de consulta y colaboración para el diagnóstico, elaboración y evaluación de las políticas públicas aplicadas al sector comercial.
-¿Qué balance hace de la gestión?
Por cuestiones de la pandemia, los últimos fueron años muy complejos, muy complicados. Tuvimos que realizar muchísimos cambios. Tuvimos que digitalizar y tratar de hacer las cosas no tan personalizadas como las hacíamos antes, todo lo que es el trabajo interno del CES cambió mucho. También hicimos cambios muy grandes con el edificio, reformas para dotarlo de mayor lo accesibilidad. Además, hemos avanzado mucho en el tema de los centros comerciales a cielo abierto. Hoy a nivel provincial somos referentes de los paseos culturales. Fue una iniciativa que nació en respuesta al pedido de los comercios para mejorar la actividad y fomentar las ventas.
-¿Cuál es el mayor legado de aquella primera comisión de 1928 del Centro Comercial e Industrial de San Francisco?, que nació para promoción y defensa gremial empresaria pero a la vez tuvo una activa participación en el desarrollo de la ciudad y la zona.
Ese legado de compromiso y responsabilidad lo tenemos actualmente quienes estamos conduciendo el CES. Los visionarios que iniciaron esto, lo hicieron suficientemente bien como para que a los 94 años siga funcionando. El legado de los pioneros nos da mucho prestigio y fuerza después de tantos años de trabajo en la ciudad.
-¿Cuál es la situación de la entidad al día de hoy? ¿A qué desafíos se enfrentan?
Hoy el principal desafió coyuntural que tenemos, como siempre sucede en la Argentina, es el problema económico, y el desafío a futuro es empezar a capacitarnos para los cambios que se vienen en cuanto a lo tecnológico y en ventas a medida que tengamos cada vez más gente -jóvenes, sobretodo- comprando seguramente desde los celulares y por Internet, esto es uno de los grandes desafíos y cambios. Uno no hace proyecciones a futuro en base a lo que está pasando ahora. Estamos hablando de criptomonedas y todas estas cosas nuevas que vienen apareciendo a las que seguramente vamos a tener que ir adaptándonos. Siempre las instituciones son las que tiene que tratar de orientar al empresario sobre dónde está parado y qué tiene que hacer para seguir funcionando bien. Este es el desafío que tenemos, adaptarnos al futuro, capacitándonos para lo que viene.
-En 2019 el CES lanzó su propia plataforma de comercio electrónico, City Shopping San Francisco, ¿cómo funciona hoy?
La plataforma no está funcionando. Con la pandemia de Covid cambió mucho, no se pudo hacer funcionar como lo teníamos pensado. Tenemos el dominio y estamos analizando qué vamos a hacer en el futuro. No le hemos podido dar el suficiente volumen para que tome un ritmo como el que esperábamos.
-Podría decirse que la virtualidad que impuso la pandemia no aceleró el comercio digital en la ciudad...
Es complicado dar números. Nos basamos un poco en lo que se dice a nivel Came (Confederación Argentina de la Mediana Empresa).
-¿Están preparados nuestros comercios para dar ese salto? ¿Qué falta?
Siempre se está preparado para hacer el cambio, pero se tiene que hacer en el momento justo. Si uno se adelanta, por ahí los cambios no dan los resultados que uno quiere. Hoy creo que la mayoría están preparados y están usando el comercio electrónico. Quizás no en la medida que se podría aprovechar. La mayoría de los comercios están trabajando en cierta forma con plataforma de ventas por Internet. También hay que analizar y manejar el tema de las aplicaciones, algo que todavía no está aceitado en ciertos lugares. Hay que preparase, hay que hacer el análisis lo más preciso posible para no hacer cosas que son muy costosas y que después no dan resultados. Estamos en un momento donde todo los digital es tan dinámico y los cambios son tan rápidos y grandes que cuesta hacer una inversión. Se está trabajando con las redes como Instagram y Facebook, y aún no le estamos encontrando la vuelta para entrar en ese mercado a full, con una plataforma propia.
Darío Tamagnini preside el CES.
-En los últimos años encararon una serie de reformas edilicias de la sede. ¿Cómo sigue la obra?
La obra se terminó. Lo principal que queríamos lograr era que todos los accesos estuvieran hechos con rampas. Antes teníamos una escalera y era imposible pensar que se podía entrar con una silla de ruedas o parea una persona que utilice bastón ya era un problema, hoy eso ya está solucionado. Nos falta hacer toda la parte del frente. El proyecto está, pero esas refacciones se irán realizando a medida que las cosas vayan mejorando. Lo estamos postergando ya que la situación económica no lo permite. En cuanto a la parte interna, está todo terminado.
-¿Cuántos asociados tiene hoy el CES? Hay diversidad de rubros, pero ¿cuáles predominan?
El que más predomina es el comercio minorista, indumentaria, gastronomía. Hay comercios un poco más grandes pero son los menos, como las ventas de autos o de maquinarias agrícolas, que son las más costosas. En total son 550 empresas asociadas.
-¿Es fundamental el apoyo de los gobiernos para la subsistencia de la institución?
En cuanto al apoyo económico no. La institución está funcionando con recursos propios, en ese sentido no se necesita apoyo gubernamental. Estamos trabajando en espacios públicos, necesitamos hacer algún tipo de evento, algún reclamo por alguna cosa que queremos que se cambie en una calle o en algún tipo de impuesto, en eso sí la interacción con el gobierno municipal o el provincial es permanente. En el caso del Paseo Cultural y Gastronómico estamos teniendo reuniones casi a diario ya que esto requiere de un armado y una coordinación con la municipalidad. En este momento estamos trabajando muy fuerte con el municipio por el tema de la remodelación de bulevar 25 de Mayo a través del concurso de ideas que ya tiene sus ganadores. Tenemos una relación permanente con las autoridades municipales y es necesaria.
-La actual gestión municipal apuesta a la sinergia entre el sector público y privado y despliega un ambicioso cronograma de eventos. ¿Qué análisis hace de lo realizado hasta ahora?
La interacción pública y privada es fundamental para que nuestra comunidad se mantenga ordenada y vaya creciendo, tirando todos para el mismo lado. Está muy bien, es muy positivo. Nosotros un poco lo iniciamos con los paseos culturales, se lo pedimos a la municipalidad cuando estaba el intendente Ignacio García Aresca y él tomó la posta y ahora Damián Bernarte lo sigue dando más fuerza. Es muy bueno para la ciudad y muy bueno para los comercios. Cuando podés atraer gente de la región o de la ciudad para que salga a realizar alguna activad, genera movimiento para las empresas que están trabajando.
-¿Cómo ve el presidente del CES el panorama empresarial en San Francisco?
No escapa al problema que hay a nivel país, la situación económica es compleja. Hay una incertidumbre muy grande, la inflación genera un montón de desequilibrio en el tema de gastos y movimientos. Las empresas están en una situación complicada en este momento por la economía y porque tampoco sabemos qué va a pasar de acá a un mes. En general, San Francisco tiene empresarios que son bastantes conservadores y que siempre se han adaptados y han sabido salir de estas crisis, como lo están haciendo ahora la mayoría. No cerró una gran cantidad de comercios y eso es bueno. San Francisco está "surfeando" esta crisis de la mejor manera posible.
-Desde hace dos semanas el Gobierno nacional aplicó un mayor control de importaciones, el régimen SIMI, muy cuestionado por el sector industrial. ¿Cómo impacta esto en el comercio?
Acompañamos el reclamo que está haciendo la Cámara de Comercio Exterior de San Francisco. El comercio está vendiendo los productos que fabrican los industriales y todos estamos sufriendo escases. En el caso de los automóviles y maquinarías, faltan repuestos. Esas restricciones son muy dañinas, porque hoy las tecnologías, incluso desde el aparato más chiquito que compramos hasta el más grande, requieren de algún componente importado. Todo esto genera un montón de problemas que van a tener que solucionar lo antes posible. Es muy difícil crecer en un país donde hay tantas restricciones y tantas trabas para poder trabajar.
-¿Hay rubros que no están vendiendo mercadería? ¿Qué productos importados están faltando hoy en día?
Falta de todo. Repuestos, sobre todo. Gracias a que los argentinos somos bastante adaptables a los sistemas, estamos tratando de mantener las cosas en marcha haciendo adaptaciones o reformas para poder seguir. A todos nos pega de alguna forma, a unos un poco más un poco menos, pero todos estamos sufriendo.
-¿Qué debería hacer el Gobierno para solucionar esto? ¿Y qué puede aportar el sector de comercio y servicios para solucionar el problema?
Eso lo tiene que manejar un equipo económico súper sofisticado, no lo puede decir una persona que no tiene una información necesaria para hacer este tipo de análisis. Creo que la única forma que esto se solucione es tener un plan y nosotros tratar de apoyar ese plan y poner nuestras necesidades dentro de ese plan para que salga de la mejor manera posible. Creo que eso nos está faltando. Al no tener un plan económico más o menos razonable, hoy no entendemos lo que está pasando en nuestra economía, tenemos una inflación bestial y un montón de restricciones. Hasta que no existan reglas claras y previsibilidad, es muy difícil poder decir hacia dónde vamos y poder programar inversiones o proyectar un crecimiento. Hoy estamos trabajando en el día a día. El Gobierno tendría que enfocarse en hacer un plan económico con un horizonte que hoy no tenemos.
-¿La recuperación económica pasa también por la formación? ¿El CES brinda capacitaciones a sus asociados?
Estamos trabajando muchísimo, estamos cerrando una capacitación a través de un convenio con la Universidad Nacional de Villa María sobre todo lo que es gestión comercial. Se hacen capacitaciones permanentemente, incluso charlas sobre economía como para orientar a la gente, para saber dónde estamos parados, los problemas que vienen o si se van a solucionar. Este es un trabajo permanente. Este año se hicieron muchos cursos.
-¿Cuáles son sus deseos para el futuro?
Lo que más necesitamos todos es un Gobierno que tenga un plan, que nos oriente hacia ese plan y nosotros, apoyarlo. Creo que en eso tenemos que trabajar todos juntos. La única forma de salir es tirar todos para el mismo lado. Lo que más deseamos todos para este año y el que viene es poder encaminar esta crisis hacia una salida y poder planificar de vuelta a largo plazo como se debería hacer.