Celina, un ejemplo del potencial que tienen las personas con discapacidad

Por Isabel Fernández | LVSJ

Celina Roca tiene 21 años, nació con Síndrome de Down y su historia demuestra que las personas con discapacidad pueden trabajar y tener autonomía. Luego de terminar el secundario, Celina se capacitó en estética y hoy lleva adelante su emprendimiento realizando tratamientos faciales, maquillaje profesional, además de vender cremas y productos de belleza.

Es su trabajo, para el que eligió capacitarse por vocación y el que le “encanta”, según aseguró a LA VOZ DE SAN JUSTO al contar su experiencia de vida. En 1992, Naciones Unidas estableció el 3 de diciembre como el Día Internacional de las Personas con Discapacidad con el fin de promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad.

Para integrarse en el mercado laboral y realizarse, Celina cuenta con el apoyo de su familia, su mamá Gabriela Revol; su acompañante terapéutica y profesora de Educación Especial, Virginia Díaz y de algunos sectores de la sociedad que entendieron sobre la inclusión. 

Pero a pesar de los avances en ese sentido, todavía existen barreras, tanto en instituciones, lugares de trabajo y entre muchos que, ante una persona con discapacidad, producen “silencios incómodos” que discriminan.

En un negocio, en la calle o en distintos encuentros sociales, las personas con discapacidad todavía viven estas situaciones embarazosas. Esta jornada especial invita a reflexionar sobre la importancia de incluir a estas personas que son parte de la sociedad y entender el gran potencial que tienen.

Estudiar y lograr autonomía

En su casa Celina tiene su oficina y el espacio donde realiza los tratamientos de belleza para los que se capacitó en el Centro de Formación Estética Silvia Schneider que le abrió sus puertas para que pueda estudiar. “Fui aprendiendo mucho estos años y sigo aprendiendo. Comparto los productos en las redes, los cobro y entrego, también tengo clientes que vienen a hacerse tratamientos. Así yo gano mi plata y puedo pagar el gimnasio, salir con mis amigas y comprar mis cosas”, dijo.

“Estudié estética facial, aprendí todo, aprobé todas las materias y me recibí, también hice un curso de maquillaje profesional. Me gusta mucho maquillarme, soy muy coqueta. Ahora puedo trabajar y me encanta. Estoy muy organizada y trabajo con Virginia que es una maravilla”, dijo.

“Necesitamos que acepten el desafío”

Mientras Celina cuenta con entusiasmo sobre su trabajo, su mamá Gabriela la mira emocionada y con orgullo, igual que Virginia, su acompañante terapéutica.  Es que, abriendo las puertas a la inclusión y con apoyo, las personas con discapacidad pueden lograr su autonomía y hacer su aporte a la sociedad.

“Necesitamos que del otro lado haya alguien que acepte el desafío de incluir, de brindar una oportunidad a las personas con discapacidad. Aunque se abrió muchísimo la sociedad todavía falta mucho”, aseguró Gabriela.

Recordó que cualquier mamá “lo que quiere es que su hijo o hija sea feliz, que haga lo que le gusta, que pueda tener autonomía, que logre desarrollarse en la vida, sea cual sea la condición que tenga. Con los apoyos necesarios, las personas con discapacidad pueden lograrlo”.

Resaltó agradecida la inclusión del centro de estética que formó a Celina. “Es un lugar de puertas abiertas. Cuando nos dimos cuenta que a Celina le gustaba mucho la estética, nos acercamos y estuvieron dispuestos a formarla. Para ellos también fue un desafío que tomaron para poder conectar con ella y enseñarle, ellos también y todos aprendimos de ella”.

“Todos somos importantes”

Por su parte Virginia remarcó que es fundamental “entender que todos somos importantes, para lograr una sociedad mejor. Entender que ese otro tiene todo que ver con cada uno de nosotros y de algún modo hay que pensar en acercarnos y comunicarnos. Aunque la gente tiene más conciencia, todavía se producen esas situaciones que ponen barreras”.

“Es muy importante trabajar la autoestima de las personas con discapacidad, porque ellos pueden ser autónomos, deben y pueden participar plenamente de todas las actividades que quieran. También que la sociedad aprenda a escuchar lo que estar personas tienen para decir”, finalizó.

El trabajo de Celina puede encontrarse en Instagram: buniblisssanfco y celinarocamis20.