Cambios en el etiquetado frontal: ¿un paso atrás en la nutrición?

El gobierno modificó el mes pasado el sistema de etiquetado frontal de alimentos, conocido por los distintivos octógonos negros que advierten sobre excesos de azúcar, grasas o sodio. Los cambios buscan armonizar las normativas locales con estándares internacionales y atender las demandas de la industria, también abren interrogantes sobre su impacto en la salud pública ya que muchos alimentos perderán sellos o dejarán de exhibirlos.

Habrá menos octógonos en los alimentos lo que abrirá más opciones para los consumidores que tendrán que interpretar con más detalle la información nutricional. El cambio radica en cómo se contabilizan los nutrientes críticos. Ahora, solo se tendrán en cuenta los nutrientes añadidos durante el proceso de elaboración, dejando de lado los intrínsecos al alimento. Por ejemplo, el azúcar natural de las frutas ya no se considerará en el cálculo de las mermeladas; solo el azúcar añadido será evaluado.

Además, los productos podrán resaltar beneficios nutricionales que no estén relacionados con los nutrientes críticos señalados. Por ejemplo, un queso etiquetado por "exceso de sodio", podrá destacar su contenido de calcio, algo que antes estaba prohibido.

¿Cuál es el impacto para la salud y la educación nutricional que algunos alimentos pierdan sellos con las modificaciones de la ley?. “Esta flexibilización de la ley, va a generar confusión y desinformación en las personas. Desde la implementación de la ley, se observan cambios en las intenciones de compra de muchos consumidores y que se redujo la percepción de saludable de productos con sellos”, advirtió la licenciada en Nutrición, Giselle Oviedo.

La profesional consideró que esta modificación: “Es un paso atrás en la nutrición porque el producto ya no va a estar la totalidad de la información, es decir una mermelada puede que ya no tenga el octógono de exceso de azúcares, ya que el azúcar agregado no supera las recomendaciones, pero si sumamos el azúcar del alimento de base más el agregado, si supera la sugerencia”.

Aseguró que en los consumidores “generará más confusión ya que de la experiencia propia y de colegas en consultorio, como en la vida misma se observa que las personas aún no cuentan con todas las herramientas para interpretar las etiquetas actuales de los productos alimenticios”.

“Son fundamentales las campañas de educación alimentaria en todos los espacios, escuelas, lugares de trabajo, centros de salud, vía pública. La gente tiene el derecho a la información y a tomar decisiones conscientes”, destacó.

Comer alimentos reales 

En los tiempos de exceso de información que corren, cuando hablamos de alimentación “el principal consejo es comer más alimentos reales y menos productos ultra procesados”, dijo la nutricionista.

Si se van a elegir alimentos ultra procesados por el motivo que sea, Oviedo recomendó “ir al supermercado con tiempo, o leer la etiqueta tranquilo en casa para saber si lo volveríamos a elegir o lo sacamos de la lista de comestibles”.

“Es importante dedicar tiempo a leer la etiqueta, cada ingrediente del producto que se va a ingerir. Si son más de 5, si son ingredientes que no conocemos o que no tendríamos en la alacena, no hay que volver a elegir ese producto. En la medida que se pueda lo mejor es cocinar con alimentos reales”, remarcó Oviedo.

Cuáles son los alimentos que reducirán los sellos negros   

Algunas categorías de alimentos experimentarán una significativa reducción de sellos, incluyendo:

• Quesos: muchos perderán el sello por grasas, ya que estas son naturales de la leche. Además, podrán destacar su contenido de calcio y vitaminas.
• Yogures: los que contienen edulcorantes en lugar de azúcar añadida perderán sellos y podrán resaltar su aporte de calcio.
• Mermeladas: al excluir el azúcar natural de las frutas, muchas ya no cumplirán con los criterios para llevar octógonos.
• Jugos de frutas: aquellos que solo tienen azúcar agregada en pequeñas cantidades también se beneficiarán.
• Jamones: podrían perder el sello de grasas si cumplen con los límites de sodio.
• Barras de frutos secos: si no incluyen grasas adicionadas, quedarán libres de sellos y podrán destacar los beneficios de las grasas naturales presentes.
• El sello de "exceso de calorías" se aplicará solo si el producto también tiene sellos por azúcar, grasas totales o saturadas, y supera las 275 kcal por cada 100 gramos. Esto podría dejar fuera de la advertencia a alimentos con alto contenido calórico, pero sin otros nutrientes críticos en niveles significativos.