Bolsas de plástico: cultura de un solo uso

Las bolsas de plástico se han convertido en uno de los productos más utilizados en el día a día por los seres humanos. 

Este producto es el claro símbolo de la cultura de un solo uso. Este fenómeno que, lentamente, se ha apoderado de nuestro estilo de vida y el cual está provocando un problema insostenible de degradación ambiental.

Ahora bien, ¿Por qué son tan dañinas las bolsas para el medio ambiente?

Las bolsas de plástico tardan más de 100 años (en el mejor de los casos) en lograr descomponerse por completo. Pero incluso cuando lo hacen, no dejan de contaminar, debido a que se convierten en tóxicos que perjudican los suelos y las vías fluviales.

Al no ser reciclables, ya que cuesta 100 veces más reciclarlas que producirlas nuevas, sus restos quedan en el planeta perjudicando al medio ambiente e incrementando la degradación.

Se estima que cada persona gasta aproximadamente 230 bolsas de plástico por año, lo que representa más de 500 billones de bolsas alojándose en el mundo. 

Los estudios científicos realizados sobre este tópico son preocupantes; hay tantos microplásticos en el planeta que ya no solo se propagan por ríos y mares, sino que flotan por toda la atmósfera. En otras palabras, se podría decir que llueve plástico en todo el mundo. 

Impacto en la salud

Uno de los mayores daños que causa este tipo de productos, es el consumo semanal de 5 gramos de microplásticos por ingesta de alimentos, tanto en los seres humanos como en los animales.

Estos contaminantes nuevos y emergentes, cuyas consecuencias exactas son desconocidas, ahora forman parte de la población mundial. Esto quiere decir, que las partículas no sólo se encuentran en mares y tierra, sino que también están presente en el aire. Parece no haber sitio seguro para librarse del plástico.

Aunque no se conocen los daños a lo largo del tiempo, está comprobado que el consumo de micro plásticos afecta de forma inmediata al sistema cardiovascular, renal, gastrointestinal, neurológico, reproductivo y respiratorio. Además, uno de los impactos más estudiados es el importante lugar que tienen en el desarrollo de cáncer, diabetes y envenenamiento por toxinas.

Es hora de actuar 

Si bien se ha avanzado mucho en la reducción de este producto, es un proyecto que requiere la colaboración de toda la sociedad.

Las bolsas de plástico generan un consumo extremadamente nocivo para la tierra, y al mismo tiempo, son muy fáciles de reemplazar. Por lo que aquí abajo encontraras consejos para reducir su uso. 

1. Nunca salgas de casa sin una bolsa reutilizable: las bolsas de tela ocupan muy poco espacio y son muy fáciles de guardar. Así, estarás preparado a todo momento y evitaras consumir bolsas de plástico.
2. Reutiliza las bolsas que ya tienes en casa: Por mucho que queramos reducir las bolsas, a veces se acumulan una buena cantidad en el hogar, ¡no las tires! Se pueden reutilizar para hacer las compras o como bolsas de basura.
3.  Recicla: en caso de tener que tirar bolsas porque están en mal estado o rotas, asegúrate de tirarlas al contenedor de plásticos.
4. Optar por un consumo responsable: Trata de consumir productos donde la función principal del envase sea con sistemas de larga duración o reutilizables.