40 años de noche y diversión para la región y San Francisco
Este mes, la noche está de festejo. Son cuatro décadas desde que jóvenes de la ciudad decidieron darle a San Francisco y la región la mejor diversión. Hoy, se celebra en Altantis que combina pasado, presente y futuro con nuevas luces y sonido único.
Hace 40 años, un grupo de jóvenes empezó a escribir la historia de la noche
en San Francisco. Desde Albatros en adelante, la ciudad y la región tuvieron la
posibilidad de disfrutar de lo mejor y son cuatro décadas de marcar
generaciones.
Hoy, es Atlantis la que lleva el estandarte de la historia bolichera local, aportando a miles de vecinos los mejores momentos.
Allí, en la esquina de bulevar 25 de Mayo y Moreno, se celebran estos 40 años donde el mítico boliche se transforma a partir de su increíble sistema de sonido acompañado de un majestuoso y moderno formato en luminaria que fue único en su tiempo y se convirtió en un verdadero emblema de la noche de los boliches de San Francisco y la región.
De esta manera, Atlantis se convierte en el primer local nocturno donde se puede disfrutar de la música mientras se comparte una copa a través de una charla, sin necesidad de alzar la voz, pero creando un verdadero ambiente de disfrute y diversión.
Pero eso no es todo, Atlantis reincorpora el sistema de luminaria utilizado en el pasado que cautivó generaciones, pero con un toque moderno único, haciendo que lo antiguo y lo moderno coexistan en 35 años de vida de la esquina más mítica de la noche local, la cual es parte de 40 años de empresas nocturnas para la ciudad y la región.
De esta manera, Atlantis es ese lugar que mantiene vivo el espíritu de los inicios de la noche con Albatros Juvenil en mayo de 1982 con el inicio cinco años después de Altantis Discotheque y otros emprendimientos que hicieron posible la diversión en la ciudad y para toda la región.
Cuatro décadas de diversión
Para Néstor Cacchiarelli, cumplir cuarenta años en la noche "es el inicio de una empresa que le dio vida al boliche. En plena guerra de Malvinas y con el fin de juntar dinero para nuestro viaje de egresados a Bariloche, comenzamos con Albatros en 25 de Mayo y Garibaldi. Hicimos los primeros danzantes por unos meses".
"Desde ese entonces, con un compañero de secundaria, abrimos Xeraos en el primer piso del Hotel Libertador convertido en hito para todos los jóvenes de la época que se daban cita los jueves, viernes, sábados y algunos domingos".
Al cierre de Xeraos, nace Altantis quedando ésta como único boliche en la ciudad y la región con su estilo.
"Es un honor, es un orgullo decir que cumplimos 40 años en el rubro, más en este ambiente que es de corta vida para las empresas. Después de salir de la pandemia y ofrecerle lo mejor a la gente nos llena de orgullo y no nos queda más que agradecer a quienes cada fin de semana nos elige para disfrutar y pasarla bien", concluyó Cacchiarelli.
El comienzo fue en mayo de 1982 con la apertura de Albatros Juvenil. En abril del año siguiente, abrió sus puertas Xeraos Discotheque. Para 1987, la madre de todos los boliches, Altantis, abrió sus puertas para darle lo mejor a la región.
Así, continuaron otros como Absorción (1988), La Calle Eelectric Dance (1989), El Banco Disco (1990), La Gondola del Pub (1993), Fellini Pub - La Nave Megadisco (1994), La Calle Dsicotheque (1997), La Calle en Carlos Pellegrini (1998), Fellini Pub, Los Años Locos Resto Dance y Atlantis Las Rosas (1999), La Calle Electric Dance en San Vicente (2000), Margarita Pub (2001), Zoom (2002), Puerto Madero (2006), Casa Blanca Resto Bar (2007) y Hollywood Resto Dance (2008).
Mantenerse vivos
Sobre Altantis Discotheque, "el nuevo sistema de sonido está a cargo de Agustín Lovera, un especialista en sonido. Estamos cambiando todo el sistema, generando nuevos desarrollos para que la gente pueda disfrutar del boliche bailando y charlando a la vez, recreando un espacio ameno de disfrute".
En cuanto a las luces, "estamos recuperando equipos de iluminación que eran los viejos de la disco que van a coexistir con la nueva tecnología".
Para esto, "hay un importante trabajo de recuperación muy delicada que pronto la gente podrá disfrutar".
Hoy, para celebrar, "lo más importante es la luminaria vintage, pero también el sonido que nos permita disfrutar sin andar gritando, lo que posiciona al boliche pero más a la ciudad en el entorno regional".
Tanto sonido como iluminación "buscan recordar y traer al boliche el toque vintage con lo moderno, para que coexistan ambos tiempos. Es algo similar a lo que muestran los edificios actuales en sus fachadas", confió Cacchiarelli.
"Al boliche le va a aportar una especie de antagonismo entre aquella iluminación antigua que es más potente y presente con la actual, que nos permite un nuevo funcionamiento de la luminaria en el boliche así como ahorro energético", explicó el entrevistado.