MERCEDES FUNES: “SAN FRANCISCO ES UN LUGAR ESPECIAL PARA MÍ”
MERCEDES FUNES: “SAN FRANCISCO ES UN LUGAR ESPECIAL PARA MÍ”
La actriz construyóuna carrera que no para de ascender. Sus
papeles de "villana" se instalaron fuertes en el público.
La actriz construyóuna carrera que no para de ascender. Sus
papeles de "villana" se instalaron fuertes en el público.
-
Las actriz no descarta regresar a la ciudad de su familia, esta vez con la exitosa obra Le Prenom.
La actriz Mercedes Funes es rosarina pero
lleva a San Francisco en su corazón. Por un lado, por tener a su familia materna;
los Menegón en nuestra ciudad y por
otro, su padre, el dirigente peronista santafesino Carlos "Chango" Funes, quen
fue periodista de LA VOZ DE SAN JUSTO y fue un colaborador en 1973 en la
gestión del edificio propio del Colegio Superior San Martín.
Mercedes, hoy de 38 años, se luce en el
escenario como Anna en la obra Le Prenom que actualmente la tiene de gira por
las sierras cordobesas y adelantó que podría visitar nuestra ciudad con este
trabajo teatral.
Le Prenom es una de las grandes comedias
de la época y ya tiene dos desembarcos en el cine, con los filmes "Le Prenom",
de 2012 y la italiana "Il nome", del figlio de 2015.
En la Argentina, lleva cuatro temporadas
con gran éxito, con más de 300.000 espectadores y un Premio Estrella de Mar
2016, en Mar del Plata.
La familia, la política, el amor... las
raíces de una villana que se ganó la admiración del público.
-
Estás en la ciudad de Córdoba para promocionar tu obra Le Prenom...
Tenemos funciones el fin de semana en el
Teatro Candilejas en Villa Carlos Paz y ahora estamos promocionando la obra en
la ciudad capital. Lo bueno es que vamos a estar en distintas ciudades del
interior como Bell Ville y General Cabrera. Creo que vamos a estar en San
Francisco, pero todavía no me lo confirmaron.
- ¿Tienes
contacto con San Francisco?
¡Sí! En la ciudad están los Menegón, mi
familia materna. Están mi tío Ítalo, Américo, mi tía Marta y mis primos. Allí
se casaron mi mamá y mi papá (Nelly y Carlos) un 17 de octubre, aunque no
recuerdo el año. Allí también nacieron
mis hermanos mayores. Mi mamá tuvo que pasar sus dos embarazos con mis abuelos
porque mi papá viajaba mucho. Tengo un vínculo
estrecho con esa ciudad.
-
¿Qué recuerdos tenés de la ciudad?
Mientras mis abuelos maternos vivían,
pasé todas las fiestas de Navidad y Año Nuevo entre San Francisco y San Martín
de las Escobas, en Santa Fe. Amo profundamente a mi familia y a San Francisco. Me
une mucho la historia familiar. Mis nonos eran inmigrantes italianos que
primero se radicaron en Colonia Marina y después se mudaron a San Francisco,
cuando mamá era chica. Mi abuelo materno era herrero y recuerdo que había una antigua casa en San
Francisco que tenía la inicial "M", de Menegón, tallada en hierro. Mis abuelos
vivían a dos o tres cuadras del Pequeño Cottolengo Don Orione y la familia
siempre colaboró con la institución. Pasaron muchos años desde que no voy pero
jamás perdí el contacto. Es un lugar especial donde está la gente que quiero.
-
Tu padre, Carlos "Chango" Funes fue parte de nuestro diario. ¿Qué te contó sobre
aquellos tiempos como periodista?
LA VOZ DE SAN JUSTO es el lugar donde dio
sus primeros pasos como periodista, se fue formando en el diario. Más tarde, se
dedicó a la política sin dejar de lado del todo el periodismo y terminó siendo
asesor político de importantes referentes del sector como Juan Domingo Perón,
que lo llamó con treinta y pico de años de edad para trabajar en Puerta de
Hierro, donde estaba la residencia del expresidente en Madrid, España.
-Entonces
la política era tema corriente en la vida cotidiana de los Funes...
Sí. Vengo de una familia peronista, de
mesas largas, llena de militantes cantando la marcha peronista, comiendo
empanadas. Recuerdo ser una niña merodeando esas mesas con mucho entusiasmo y
pasión por el peronismo; con amor al país. Mi papá era un compañero militante.
Nunca se llenó de plata con la política. De hecho, falleció en 2001 sin escriturar
una casa y solo dejó para nosotros un viejo automóvil Fiat Siena. Su legado fue
absolutamente moral, espiritual y de amor.
Su grupo de colegas y él creían
fervientemente en el peronismo como una causa de unificación nacional y de oportunidades
para todos. Era parte de un peronismo que hoy dejó de existir, porque el país
cambió. No creo que esté representado por el kirchenismo ni tampoco por el
macrismo o cualquier partido que se la dé de popular pero con políticas
neoliberales. El peronismo de papá era una utopía necesaria que le hizo muy
bien al país, al menos eso fue lo que yo viví. Mi familia es de inmigrantes
trabajadores. Mi abuelo herrero terminó teniendo solo tres dedos en una de sus
manos porque se fue cortando uno por uno por su trabajo. Mi abuela lo acompañó
con cariño. La familia de papá son criollos mezclados con portugueses que
siempre trabajaron en el campo. De hecho, papá nunca cursó el secundario. La
lectura y su pasión por el ajedrez encausaron el camino de su pensamiento y su formación. El siempre dijo que el ajedrez le
abrió las puertas. En mi familia se respiró intelectualidad mezclada con lo
popular.
El recuerdo del "Chango"
-
Respecto del lugar que tomaron algunos actores argentinos durante el gobierno
kirchnerista. ¿Cuál es tu opinión?
Mi papá tenía un camino político
intachable, el cual sigo conociendo mucho después de fallecido. Todo el tiempo
se acerca gente a decirme lo maravilloso que fue. Se lo despidió con todos los
honores. Soy actriz y de política sé lo que aprendí de papá. El dejó de existir
y yo dejé de aprender de política. ¡Ni loca levanto una bandera o me paro al lado
de un político para una foto!, porque quiero un camino impecable y no quiero
que los amigos de papá digan: `¿Qué hace la hija del "Chango" parada al lado de
este u otro político?'. A amigos de papá
como a Carlos Reutemann u otros colegas, los quiero mucho pero nunca voy a ser
una actriz "K" o "anti K", porque lo respeto a papá.
-¿Sería
un honor para vos interpretar en cine o teatro a Eva Duarte de Perón?
A todas las actrices del mundo nos
gustaría interpretar a Evita. En mi ADN tengo mucha información pasional que
quizás otras no tengan. Frente a todo lo que dije, mi padre siempre dijo cosas
maravillosas. Era muy compinche y tenía mucho humor. Seguramente transitaría esa
situación con el mismo compañerismo. Éramos muy amigos, con un vínculo muy
estrecho. Mi papá también era un artista.
-
Sos la villana favorita de muchos. ¿Cómo se logra un papel con éxito?
Siempre interpreto villanas de buen
corazón. Son mujeres heridas y tal vez porque tengo esa concepción de la
maldad. La gente no es mala, está herida. Cuando la gente me dice en la calle:
"¡Qué mala que sos, te amo!". Es porque lo logré.
-
¿Cuál es el secreto para estar siempre espléndida?
La espiritualidad, el uso de cremas
faciales y corporales desde adolescente; no tomar sol y comer súper sano; hacer
actividad física y algún tratamiento en el centro de estética. Se puede vivir
sin estrés y con amor, ¡ni hablar que se nota en la piel!.
-
¿Cómo está ese corazón?
En pausa. Está bueno que el corazón se
tome vacaciones y estar con uno mismo. Hay que viajar, leer, estar con uno y
con los amigos.
La actriz Mercedes Funes es rosarina pero
lleva a San Francisco en su corazón. Por un lado, por tener a su familia materna;
los Menegón en nuestra ciudad y por
otro, su padre, el dirigente peronista santafesino Carlos "Chango" Funes, quen
fue periodista de LA VOZ DE SAN JUSTO y fue un colaborador en 1973 en la
gestión del edificio propio del Colegio Superior San Martín.
Mercedes, hoy de 38 años, se luce en el
escenario como Anna en la obra Le Prenom que actualmente la tiene de gira por
las sierras cordobesas y adelantó que podría visitar nuestra ciudad con este
trabajo teatral.
Le Prenom es una de las grandes comedias
de la época y ya tiene dos desembarcos en el cine, con los filmes "Le Prenom",
de 2012 y la italiana "Il nome", del figlio de 2015.
En la Argentina, lleva cuatro temporadas
con gran éxito, con más de 300.000 espectadores y un Premio Estrella de Mar
2016, en Mar del Plata.
La familia, la política, el amor... las
raíces de una villana que se ganó la admiración del público.
-
Estás en la ciudad de Córdoba para promocionar tu obra Le Prenom...
Tenemos funciones el fin de semana en el
Teatro Candilejas en Villa Carlos Paz y ahora estamos promocionando la obra en
la ciudad capital. Lo bueno es que vamos a estar en distintas ciudades del
interior como Bell Ville y General Cabrera. Creo que vamos a estar en San
Francisco, pero todavía no me lo confirmaron.
- ¿Tienes
contacto con San Francisco?
¡Sí! En la ciudad están los Menegón, mi
familia materna. Están mi tío Ítalo, Américo, mi tía Marta y mis primos. Allí
se casaron mi mamá y mi papá (Nelly y Carlos) un 17 de octubre, aunque no
recuerdo el año. Allí también nacieron
mis hermanos mayores. Mi mamá tuvo que pasar sus dos embarazos con mis abuelos
porque mi papá viajaba mucho. Tengo un vínculo
estrecho con esa ciudad.
-
¿Qué recuerdos tenés de la ciudad?
Mientras mis abuelos maternos vivían,
pasé todas las fiestas de Navidad y Año Nuevo entre San Francisco y San Martín
de las Escobas, en Santa Fe. Amo profundamente a mi familia y a San Francisco. Me
une mucho la historia familiar. Mis nonos eran inmigrantes italianos que
primero se radicaron en Colonia Marina y después se mudaron a San Francisco,
cuando mamá era chica. Mi abuelo materno era herrero y recuerdo que había una antigua casa en San
Francisco que tenía la inicial "M", de Menegón, tallada en hierro. Mis abuelos
vivían a dos o tres cuadras del Pequeño Cottolengo Don Orione y la familia
siempre colaboró con la institución. Pasaron muchos años desde que no voy pero
jamás perdí el contacto. Es un lugar especial donde está la gente que quiero.
-
Tu padre, Carlos "Chango" Funes fue parte de nuestro diario. ¿Qué te contó sobre
aquellos tiempos como periodista?
LA VOZ DE SAN JUSTO es el lugar donde dio
sus primeros pasos como periodista, se fue formando en el diario. Más tarde, se
dedicó a la política sin dejar de lado del todo el periodismo y terminó siendo
asesor político de importantes referentes del sector como Juan Domingo Perón,
que lo llamó con treinta y pico de años de edad para trabajar en Puerta de
Hierro, donde estaba la residencia del expresidente en Madrid, España.
-Entonces
la política era tema corriente en la vida cotidiana de los Funes...
Sí. Vengo de una familia peronista, de
mesas largas, llena de militantes cantando la marcha peronista, comiendo
empanadas. Recuerdo ser una niña merodeando esas mesas con mucho entusiasmo y
pasión por el peronismo; con amor al país. Mi papá era un compañero militante.
Nunca se llenó de plata con la política. De hecho, falleció en 2001 sin escriturar
una casa y solo dejó para nosotros un viejo automóvil Fiat Siena. Su legado fue
absolutamente moral, espiritual y de amor.
Su grupo de colegas y él creían
fervientemente en el peronismo como una causa de unificación nacional y de oportunidades
para todos. Era parte de un peronismo que hoy dejó de existir, porque el país
cambió. No creo que esté representado por el kirchenismo ni tampoco por el
macrismo o cualquier partido que se la dé de popular pero con políticas
neoliberales. El peronismo de papá era una utopía necesaria que le hizo muy
bien al país, al menos eso fue lo que yo viví. Mi familia es de inmigrantes
trabajadores. Mi abuelo herrero terminó teniendo solo tres dedos en una de sus
manos porque se fue cortando uno por uno por su trabajo. Mi abuela lo acompañó
con cariño. La familia de papá son criollos mezclados con portugueses que
siempre trabajaron en el campo. De hecho, papá nunca cursó el secundario. La
lectura y su pasión por el ajedrez encausaron el camino de su pensamiento y su formación. El siempre dijo que el ajedrez le
abrió las puertas. En mi familia se respiró intelectualidad mezclada con lo
popular.
El recuerdo del "Chango"
-
Respecto del lugar que tomaron algunos actores argentinos durante el gobierno
kirchnerista. ¿Cuál es tu opinión?
Mi papá tenía un camino político
intachable, el cual sigo conociendo mucho después de fallecido. Todo el tiempo
se acerca gente a decirme lo maravilloso que fue. Se lo despidió con todos los
honores. Soy actriz y de política sé lo que aprendí de papá. El dejó de existir
y yo dejé de aprender de política. ¡Ni loca levanto una bandera o me paro al lado
de un político para una foto!, porque quiero un camino impecable y no quiero
que los amigos de papá digan: `¿Qué hace la hija del "Chango" parada al lado de
este u otro político?'. A amigos de papá
como a Carlos Reutemann u otros colegas, los quiero mucho pero nunca voy a ser
una actriz "K" o "anti K", porque lo respeto a papá.
-¿Sería
un honor para vos interpretar en cine o teatro a Eva Duarte de Perón?
A todas las actrices del mundo nos
gustaría interpretar a Evita. En mi ADN tengo mucha información pasional que
quizás otras no tengan. Frente a todo lo que dije, mi padre siempre dijo cosas
maravillosas. Era muy compinche y tenía mucho humor. Seguramente transitaría esa
situación con el mismo compañerismo. Éramos muy amigos, con un vínculo muy
estrecho. Mi papá también era un artista.
-
Sos la villana favorita de muchos. ¿Cómo se logra un papel con éxito?
Siempre interpreto villanas de buen
corazón. Son mujeres heridas y tal vez porque tengo esa concepción de la
maldad. La gente no es mala, está herida. Cuando la gente me dice en la calle:
"¡Qué mala que sos, te amo!". Es porque lo logré.
-
¿Cuál es el secreto para estar siempre espléndida?
La espiritualidad, el uso de cremas
faciales y corporales desde adolescente; no tomar sol y comer súper sano; hacer
actividad física y algún tratamiento en el centro de estética. Se puede vivir
sin estrés y con amor, ¡ni hablar que se nota en la piel!.
-
¿Cómo está ese corazón?
En pausa. Está bueno que el corazón se
tome vacaciones y estar con uno mismo. Hay que viajar, leer, estar con uno y
con los amigos.