Clases con polémicas pero también con alegrías
Un nuevo ciclo lectivo arrancó con una medida de fuerza que opaca la tradicional alegría del reencuentro y obliga a la reflexión acerca de la necesidad de que el salario de maestros y profesores esté de acuerdo con la importancia social de su misión.
Niños y jóvenes de toda la provincia comienzan hoy las clases. El hecho es más que una noticia cada año. Porque en este reinicio se subsumen las esperanzas de alcanzar estándares de calidad educativa que preparen a las nuevas generaciones para afrontar los desafíos del mundo actual y del que viene. Por lo mismo, se renueva la idea de considerar a la educación como el principal tesoro de una comunidad.
En este marco, como casi siempre ha ocurrido en los últimos años, el comienzo del ciclo lectivo está teñido de polémica por la ardua negociación salarial entre los distintos gremios que agrupan a los docentes y los gobiernos nacional y de las provincias. La medida de fuerza de un paro de 48 horas opaca la tradicional alegría del reencuentro y obligan a la reflexión acerca de la necesidad de que el salario de maestros y profesores esté de acuerdo con la importancia social de su misión, así como también de pensar en que las medidas de acción directa que suspenden clases, si bien legítimas, no siempre son la acción más adecuada puesto que se perjudica a los educandos claramente.
Pero ni siquiera este repetido marco conflictivo impedirá que las calles de San Francisco se pueblen nuevamente hoy de guardapolvos y uniformes. Ese paisaje es el más apropiado para demostrar la vitalidad de una comunidad que apuesta a la educación de sus hijos y reconoce en esta actividad un núcleo central de su pujanza. Además, el año lectivo en la ciudad estará enmarcado por aniversarios más que trascendentes de prestigiosos establecimientos.
Así, las Escuelas Domingo Faustino Sarmiento y Presidente Roca, como también el Colegio Fasta Inmaculada Concepción celebran en 2017 el centenario de vida. Diez años después llegaron aquí los Hermanos Maristas. Por ello, el colegio Sagrado Corazón cumple 90 años. Y uno de los establecimientos educativos más jóvenes está preparando los festejos de sus primeros 25 años: el colegio Fasta Jesús de la Misericordia de barrio San Cayetano. Como si fuese poco, una escuela muy especial como la Ana Sullivan, celebrará 60 años.
La historia, riquísima, de cada una de las escuelas nombradas -y de las demás en la ciudad- es extensa para retratar en una columna y seguramente será motivo de notas especiales en este diario. Pero en el comienzo de un nuevo año lectivo, resulta muy grato para LA VOZ DE SAN JUSTO rememorar la trayectoria de las escuelas centenarias y de las que celebran aniversarios puntuales, porque, al tiempo que se agradece el esfuerzo por educar a varias generaciones, su valioso aporte a la vida de la ciudad merece ser resaltado de la mejor manera.