Bizarro escándalo de la canciller venezolana
Con denuncias de confabulación "de la derecha" y de supuestas agresiones de la policía, la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, protagonizó días atrás un bizarro y para nada diplomático escándalo. El país caribeño fue suspendido del bloque continental debido a reiterados incumplimientos de los tratados vigentes.
Con denuncias de confabulación "de la derecha" y de supuestas agresiones de la policía, la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez, protagonizó días atrás un bizarro y para nada diplomático escándalo cuando pretendió ingresar a la reunión de sus pares del Mercosur, pese a no haber sido invitada oficialmente, en virtud de que el país caribeño fue suspendido del bloque continental debido a reiterados incumplimientos de los tratados vigentes.
Entonces, lo que iba a ser un acto protocolar de asunción de la Argentina como titular del Mercosur por seis meses se convirtió en una polémica jornada que tuvo a la canciller de Venezuela como protagonista central. El gobierno de Nicolás Maduro no estaba invitado a la reunión en Buenos Aires. Pero Delcy Rodríguez igual se hizo presente y pidió una reunión con la canciller Susana Malcorra, lo que efectivamente se le concedió. Allí, la jefa de la diplomacia argentina le explicó en buenos términos que el gobierno de Caracas no estaba invitado por haber sido suspendido del bloque al no cumplir las normativas del Mercado Común del Sur. Y se le explicó que el bloque aceptaba abrir el mecanismo de resolución de controversias de manera inmediata para que pudiese Venezuela hacer su descargo.
Sin embargo, la funcionaria representante del régimen de Maduro no se dio por vencida y pretendió ingresar "de prepo" al encuentro, lo que lógicamente le fue impedido. Tras cartón, en una actitud que se reitera, se victimizó y pretendió enrostrar supuestas agresiones a la decisión del gobierno argentino y de sus pares de Paraguay, Brasil y Uruguay. El embajador de Venezuela en la Argentina, Carlos Martínez dijo que "nunca en la historia argentina hubo semejante exabrupto y maltrato contra un diplomático". Denunció que la canciller fue llevada a un hospital por haber recibido lesiones. Más tarde, Rodríguez tuiteó: "Los cancilleres de la Triple Alianza confabulados contra Venezuela".
En virtud de la alta responsabilidad del cargo que ostenta, roza lo ridículo el histrionismo de quien representa a un régimen autoritario y cada vez más complicado como el de Venezuela. Su puesta en escena sólo cautivó a escasos adherentes al gobierno argentino anterior y fue motivo de comentarios hasta burlones. Lo más parecido a una comedia de enredos en un contexto inadecuado, sobre todo teniendo en cuenta que los países fundadores del Mercosur han garantizado su decisión de que el régimen de Caracas tendrá el derecho de defenderse, como corresponde, de las acusaciones que han motivado su suspensión del Mercosur.
Una de las conclusiones que se pueden extraer de esta anécdota grotesca es que el gobierno autoritario de Venezuela nunca debió haber formado parte de este bloque. Pero la obcecación ideológica con la que se movieron Brasil y la Argentina en la última década permitió que se llegue a este estado de cosas.
Mientras millones de venezolanos padecen una situación extrema que incluso los obliga a desprenderse de los billetes de mayor denominación que circulan en ese país a raíz de una decisión gubernamental absurda y fundada en argumentos discursivos agresivos e inconsistentes, una de las principales cabezas del gobierno de Caracas protagonizó un papelón internacional que demuestra a las claras el desprecio del régimen liderado por Maduro a las formas diplomáticas, a la democracia, a los tratados internacionales. No se puede admitir que un país pretenda formar parte del Mercosur y sólo reivindique sus derechos mientras sistemáticamente continúadesatendiendo sus obligaciones como integrante del bloque regional.