“Yo nunca me resistí, solo le preguntaba ¿por qué me pegás?”
LA VOZ DE SAN JUSTO entrevistó al joven Fernando Saire, que denunció una salvaje golpiza por parte de dos policías cuando concurrió a la comisaría a hacer una denuncia . A causa de los golpes, fue sometido a una cirugía para extirparle un testículo. Se recupera en una clínica y pide justicia, "que aparten a esta gente" de la fuerza policial. Mañana radicará la denuncia formal. Tribunal de Conducta Policial ya tomó cartas en el asunto.
Para Fernando Saire, el fin de semana terminó de una manera inesperada, internado en la cama de una clínica para recuperarse de una cirugía que derivó en la extirpación de uno de sus testículos como consecuencia de una brutal agresión recibida por parte de dos efectivos policiales en el interior de la comisaría de nuestra ciudad.
En plena etapa de recuperación, Fernando recibió a LA VOZ DE SAN JUSTO y explicó lo que pasó esa noche con el único objetivo de que "se haga justicia".
"Quiero que se haga justicia", dijo entre lágrimas este joven de 29 años quien este lunes a través de su abogado patrocinante, Santiago Ruiz, presentará una denuncia en los Tribunales locales contra los dos policías involucrados sobre quienes no quiso suministrar públicamente sus identidades antes de que se lo haga en la Justicia.
Si bien Saire fue trasladado desde la Departamental San Justo hasta el Hospital "J. B. Iturraspe", donde fue intervenido quirúrgicamente el sábado por la mañana, posteriormente sus familiares decidieron su derivación hacia una clínica privada donde se recupera favorablemente de las heridas recibidas.
Más allá de la pesadilla que le tocó vivir se mostró aliviado porque "el médico me dijo que estaba todo bien, que la operación había sido bien hecha" razón por la cual se esperaba que en breve pueda recibir el alta médica para continuar con la recuperación en su casa.
La víctima debió ser operada por una grave lesión genital.
El relato en primera persona
El viernes por la noche, Fernando se encontraba junto a un grupo de amigos en un boliche de calle Pueyrredón, a metros de bulevar 25 de Mayo, festejando el cumpleaños de uno de ellos, sin saber que horas más tarde iba a enfrentar una brutal agresión en la Departamental San Justo de Policía.
"Uno de los chicos del grupo fue a pedir a la barra una jarra o botella de regalo por el festejo del cumpleaños. Allí fue que uno de los responsables del local lo termina empujando y los patovicas lo sacan. Con el grupo estábamos a cinco metros y vienen unos patovicas y me sacan a mí. Yo no entendía por qué lo hacían y me decían que me tenía que ir. Me llevaron hasta la salida y me sacaron de allí. Junto a dos amigos y dos amigas nos fuimos a la comisaría a hacer la denuncia por el golpe y cuando estábamos esperando nos atendió la sumariante y al mismo tiempo llegó otro muchacho que estaba un poco alterado y empezó a golpear el vidrio queriendo hacer una denuncia al mismo boliche".
En ese momento, "yo trataba de calmarlo y le dije que se quedara tranquilo porque lo iban a meter adentro -continuó Fernando su relato-. En ese momento vino un policía que dijo que no le iban a tomar la denuncia por el estado en que se encontraba (alegando borrachera) y que venga otro día. Se pusieron a discutir y le dije que se vaya y vuelva el lunes a hacer la denuncia".
En ese momento todo cambió para Fernando Saire puesto que según él miso contó, "vino un policía y se me paró frente a mí y me dijo: '¿Qué te tenés que meter?, acá el que da las órdenes soy yo', me empujó y me hizo caer y mi cabeza pegó contra la puerta de la comisaría y me tironeaban. Allí fue cuando le dije a una de las chicas que estaban con nosotros que filmara todo con el celular para mostrar el trato que me estaban dando siendo que yo no había hecho nada. Entonces, uno de los policías le pega en la mano y le agarra el teléfono y se lo llevaba; cuando la sumariante le pidió que se lo devuelva, se lo tiró arriba del escritorio mientras que a la otra chica que nos acompañaba, que estaba por filmar también, le pegaron una cachetada y dijeron que se fueran todos".
Más violencia y complicidad policial
En ese momento, explicó que "me sacaron para el patio y allí este mismo policía me empuja, me hace caer y ahí viene corriendo y me pega una patada en la cabeza y siguió dándome golpes en el patio mientras me llevaba hacia la celda donde me tomaban los datos y ahí me volvió a pegar. Yo nunca me resistía, solo le preguntaba ¿por qué me pegás? Yo había ido a hacer una denuncia, no había hecho nada malo".
En medio de la brutal agresión que estaba recibiendo, Saire recordó que "una mujer policía se metió en el medio porque seguro escuchó los gritos. Se quedó ahí y me preguntaba qué pasaba para que no me sigan pegando. Cuando ella se fue, le dije al oficial que me estaba tomando los datos que había visto cómo me pegaba el otro policía y él me dijo que no había visto nada. Al volver el otro policía le pedí el nombre para que se identifique, no me la quiso dar y me empezó a pegar primero cuando estaba sentado y luego siguió cuando estaba en el suelo. Al momento en que se va, le dije al policía que me estaba tomando los datos: 'Ahora sí lo viste' y se levantó y me pegó una piña y me siguió pegando un rato mientras yo estaba en el suelo".
Fernando se pregunta "por qué se ensañaron de una manera tan brutal conmigo si no era nada grave lo que había hecho. No hay motivo por el cual te tengan que tratar de esa forma y pegar la paliza que a mí me pegaron".
Si bien dijo que posee las identidades de los efectivos policiales que participaron en la agresión, espera radicar formalmente la denuncia penal para que los mismos trasciendan.
Fernando aguardaba este sábado recibir el alta médica
El traslado al Hospital
Luego de la salvaje golpiza, Fernando fue llevado a una celda donde se encontraban otras personas detenidas. "Al principio estaba bien, pero con el paso del tiempo ya no podía estar sentado ni parado. Me fui a la puerta y pregunté si había algún médico, me dijeron que no y que ni bien se desocupara un móvil me iban a llevar al Hospital. A las 8.45 (del sábado) me llevaron al Hospital".
Y cuestionó que no hayan comunicado a su familia que lo llevarían al centro de salud. "Mi papá fue a la policía alrededor de las 10 a llevarme bizcochos para que coma y allí le dijeron que estaba en el Hospital", indicó.
"A esto no se lo deseo a nadie"
En medio de su relato, con sus ojos llenos de lágrimas, Saire remarcó que "a esto no se lo deseo a nadie. Como alguien que no está acostumbrado a vivir estas cosas, me pega más fuerte. No es la forma de dirigirse a la gente, dándole este tipo de golpizas".
"Me emociona mucho la repercusión de mi caso y el apoyo de la gente. Siempre le voy a estar agradecido clubes que se solidarizaron conmigo en las redes sociales y también a aquellos que me escribieron personalmente", rescató.
Ahora, "quiero que se haga justicia y que aparten a esta gente de la Policía porque le hacen un mal a la institución y para que no le pase a nadie más lo que me pasó a mí porque nadie se lo merece. Que los aparten de los cargos policiales y se tomen las medidas que se tienen que tomar. Si tienen que ir presos, irán presos porque no creo que esta gente esté capacitada para ser policía".
Por último, Fernando expresó que "no todos los policías son iguales, tengo muchos amigos policías y hay gente muy buena ahí".
Cómo sigue la causa La fiscal Silvana Quaglia actuó de oficio ante la
gravedad del hecho y confirmó que los policías acusados son dos. Este lunes se
hará la denuncia formal por lesiones graves calificadas y se presentarán los
testigos a declarar. Mientras tanto, hoy arribaron a San Francisco representantes del Tribunal de Conducta Policial de la Provincia de Córdoba para entrevistar a Saire y conocer detalles de lo sucedido.