Víctor Tonini, el dueño de la receta de los mejores chorizos
Cumplió 60 años como comerciante en la ciudad. Empezó como cadete en el negocio que después terminó siendo de su propiedad. Sus clientes lo reconocieron por hacer los mejores chorizos de San Francisco.
Por María Laura Ferrero
Que un negocio mantenga abiertas sus puertas más de 60 años en un mismo barrio significa que existe una perfecta relación entre el comerciante y clientes. Pero si a esto le sumamos que sobrevivió sin necesitar de fuertes campañas publicitarias ni tampoco los afectó la competencia con grandes superficies, deja en claro la sinopsis que se generó entre ambos, en la cual se priorizó la buena atención y el servicio personalizado.
Víctor Tonini (74) es el propietario del mercadito ubicado en Cabrera al 1100 en el barrio Vélez Sarsfield. Es el negocio es el más completo de la zona porque en pocos metros sus clientes tienen al alcance de sus manos una carnicería, verdulería y una pequeña despensa con todo lo necesario para salir de paso. Pero también es reconocido por tener los "mejores chorizos" de la ciudad. "Eso me llena de orgullo. Viene gente de distintos barrios a comprar porque dicen que son los mejores", aseguró.
Víctor, como lo llama la clientela, tiene 60 años de trayectoria en el comercio de este tradicional barrio sanfrancisqueño. El comerciante contó a LA VOZ DE SAN JUSTO que comenzó como cadete el 1 de junio de 1959 en el exnegocio llamado "Mercado Central", cuyo dueño era Francisco "Pancho" Colombatti.
"Yo dejé el colegio y empecé a trabajar como cadete. Era muy jovencito y con la bicicleta y el canasto repartía la carne a los clientes de don Pancho. Siempre en el mismo barrio así que los conozco a todos por acá", afirmó el comerciante. Y agregó: "La gente de antes era distintas y confiada. Te dejaban entrar a la casa y eran muy amables. Tenía una clienta que me servía un té y quería que me sentara a tomarlo. Entonces tenía que dejar el reparto y sentarme un rato porque si no se ofendía", afirmó risueño Víctor.
Poco a poco, el adolescente fue creciendo y cuando cumplió 18 años sufrió la muerte de su padre. Tras esa pérdida, los tíos de Víctor quisieron llevar a la familia de vuelta a Suardi, de donde eran oriundos. El comerciante contó que Colombatti intervino para que se quedaran en la ciudad. "Yo me hago cargo. Le aseguro el trabajo", recordó Víctor que dijo su patrón a su mamá. "Don Pancho era una persona muy conocida y respetada en el barrio. Esos que tenían la palabra justa y siempre estaba enseñándote algo. Para mí fue como un padre y voy a estar agradecido", indicó Tonini.
"Quedan pocos de este tipo de comercios, la
mayoría son kiosco o almacenes" asegura Víctor
Abriendo camino
A principio de 1973, Víctor y su esposa se hicieron cargo del negocio. Colombatti se jubiló y le dejó el comercio a su empleado para que siguiera atendiendo a su clientela. "Voy a estar eternamente agradecido por los que hizo por nosotros", apuntó Víctor.
En ese momento, los almacenes de ramos generales eran los comercios más importantes y cada barrio tenía uno para autoabastecerse. "Antes era lo único que había y la gente compraba en estos lugares. Nosotros siempre nos destacamos por la carnicería y la calidad de los cortes. Una vez llegamos a vender 6.000 kilogramos de carne en un mes. Fue un récord para nosotros que todavía lo recordamos", señaló.
Pero en la actualidad con los grandes hiper y supermercados cada vez son menos los negocios que tienen la cantidad de rubro como los Tonini. "Quedan pocos de este tipo de comercios, la mayoría son kiosco o almacenes", apuntó.
Conservando la receta original de las
antiguas carneadas que se hacían el campo, el carnicero sigue utilizando los
mismos ingredientes obteniendo productos de altísima calidad
Entre las miles de anécdotas, Víctor contó lo sucedido el 1 de julio de 1974 cuando falleció el expresidente Domingo Perón. "La radio decían que iban a cerrar los comercios, pero nosotros antes de llegar teníamos una cola esperándonos para abrir. La gente estaba desesperada por conseguir un trozo de carne y se llevaron todo. Había pedazos con gasa y huesos que otras veces no quedaban, pero esa vez liquidaron todo", afirmó.
Con tantos años en el comercio, los Tonini pudieron formar su familia y criar a su cuatros hijos.
Hace 11 años que se mudaron al local de Cabrera al 1100 y soportaron diferentes crisis con distintos gobiernos. Para ellos cada momento es particular y a pesar que se recienten las ventas siempre lucharon para continuar con su negocio. "Somos gente de trabajo y no sabemos hacer otra cosa por eso siempre miramos para adelante", afirmaron.
Víctor con sus 73 años está dispuesto a seguir al frente de su negocio y todavía no piensan en retirarse. "La única vez que pensé en dejar fue cuando falleció en un accidente mi hijo mayor de 19 años. Eso fue lo peor que pasamos como familia y nos costó seguir adelante con mi esposa. Por eso, a mí las crisis económicas no me afectan mucho porque uno entiende que lo material no es lo más importante", aseguró comerciante.
Daniel Gavilán y Víctor Tonini elaboran más de 20 kilogramos de chorizos por semana
El especialista
A Víctor se le hincha el pecho y se llena de orgullo cuando se le pregunta sobre la elaboración de sus embutidos. "La gente dice que son los mejores de San Francisco y clientes de todos lados vienen a comprar", dijo.
"Hace unos años que tenía un abuelo que venía todas las semanas en bicicleta desde barrio Jardín a comprarme exclusivamente los chorizos", agregó el comerciante.
Víctor todas las semanas elaborar sus preciados productos con la ayuda de Daniel Gavilán, un empleado que estuvo con él desde el principio y ahora lo ayuda en el despacho de mercadería y en la elaboración de chorizos.
Para el especialista la clave del éxito es una sola. "Usamos la fórmula que tenía don Colombatti que fue probada en distintas carneadas en los campos. Siempre utilizamos el mismo porcentaje de ingredientes y conservamos la calidad. Nunca se cambia la receta a pesar de la crisis. Ese es el único secreto que tenemos", finalizó.