Vacaciones de julio: los emprendedores sanfrancisqueños en su peor temporada
Hace unos años, muchos sanfrancisqueños invirtieron en emprendimiento de cabañas en las sierras de Córdoba, pero hoy están totalmente paralizados debido a la situación sanitaria que está viviendo el país.
Por Stefanía Musso | LVSJ
Mañana comienzan oficialmente las vacaciones de invierno. Sin embargo, el sector turístico se encuentra en la incertidumbre total ya que no hay indicios que el COE pueda flexibilizar algunas medidas para este sector.
Hace unos años, muchos sanfrancisqueños invirtieron en emprendimiento de cabañas en las sierras de Córdoba, pero hoy están totalmente paralizados debido a la situación sanitaria que está viviendo el país.
En todos los casos, los ahorros de la temporada pasada se van terminando; algunos tomaron créditos otros debieron adaptarse para subsistir. El sueño de las sierras que se hace cada vez más difícil ante la pandemia.
Emilio Olivero y Bárbara Vera administran un complejo familiar en la localidad del departamento de Calamuchita.
Villa General Belgrano: ni chocolate alpino ni turistas
Las bajas temperaturas de julio invitan a saborear una taza de chocolate caliente acompañada de la repostería centroeuropea. También de las delicias artesanales en cerveza y otros platos típicos.
Todo ese encanto que ofrece Villa General Belgrano deberá esperar sabe quién por cuanto tiempo. Con mucha incertidumbre, están dos familias de nuestra ciudad, que apostaron todo para iniciar su emprendimiento de cabañas en aquella localidad del departamento de Calamuchita.
En el caso de los Bono, Fabián con su esposa Florencia y su hija Alfonsina, tiene dos complejos de cabaña que están cerrados desde el 15 de marzo.
Desde entonces, la familia sobrevive de los pocos ahorros que quedan y tuvieron que empezar un emprendimiento para tener otros ingresos. Ahora venden pañales online. "Nos agarró la desesperación de no saber si era solo por los primeros catorce días de cuarentena o que iba a pasar más adelante. Nos sosteníamos con los ahorros del verano y tanto Fabián como yo, tomamos los créditos de $150.000 que lanzó el gobierno nacional y se inscribieron en el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo (ATP) para abonar los salarios de sus dos empleadas", dijo Florencia.
Ellos estuvieron abiertos hasta el 16 de marzo. "Ese día vinieron las autoridades sanitarias y nos dijeron que debíamos desalojar el complejo. Tuvimos que devolver dinero de las reservas que teníamos para los fines de semana de marzo y abril. Algunos lo dejaron a favor y otros lo pidieron por la situación. Respetamos el cuidado de la salud pero es muy grave la situación económica que se vive actualmente y lo que se viene, porque no sabemos si la gente podrá tener sus vacaciones como siempre o cómo pagaremos las deudas de lo que tomamos", expresó Fabián.
Los Bono frente a uno de sus complejos de cabaña en Villa General Belgrano
Un sueño familiar
Emilio Olivero y Bárbara Vera son una joven pareja de nuestra ciudad que apostaron junto a su familia al turismo. En 2018, ellos construyeron Aldea Gaia en Villa General Belgrano.
El 15 de marzo cuando se decretó la cuarentena total, ellos también dijeron adiós a los últimos turistas y desde entonces sobreviven hasta que puedan reabrir sus puertas. "El emprendimiento comenzó como un sueño y hoy estamos sobreviviendo de los fondos que recudamos en la temporada de verano, aunque una parte la orientamos a remodelaciones que hacemos nosotros mismos, para no tener mayores gastos", dijo Emilio.
Aunque no pagan sueldos, aseguraron que tiene gastos fijos como la tevé por cable, calefacción a gas y otros que hay que pagar. "La situación actual es complicada tanto para nosotros como para todo el sector hotelero", manifestó el joven.
Los jóvenes avizoran un futuro sombrío y estiran los ahorros negándose a endeudarse con créditos que pueda habilitarles la provincia. Para Emilio, "no creemos que nos podamos sostener por mucho más tiempo ya que existen gastos fijos que no cesan y los ingresos son nulos desde marzo"
"Consideramos que es una situación compleja ya que están en juego dos cuestiones muy importantes: por un lado, la salud y por otro, la economía. Esperamos que pronto se encuentre la vacuna para detener esta pandemia y volver a la normalidad porque también queremos volver a ver a nuestras familias".
Villa Giardino: las
cabañas deben esperar .... TITULO
Graciela, Adelio y Emanuel Visio despidieron a sus últimos huéspedes el 12 de marzo. Ellos tienen sus cabañas en Villa Giardino, pero residen en La Falda. Por esa razón desde que se instauró el aislamiento social, preventivo y obligatorio solo pudieron volver a su emprendimiento en dos oportunidades.
En el Valle de Punilla, los casos de coronavirus no cesan. Hasta ayer, en la provincia se contabilizaron 42; con 17 casos en La Falda, uno en Villa Giradino, 9 en Carlos Paz, entre otros.
El matrimonio Visio pertenece al grupo de riesgo por su edad, mientras que su hijo Emanuel los acompaña en cada momento. "Prácticamente no salimos, solo para ir al súper cada tres o cuatro semanas, y verdulería tenemos una de barrio cerca que voy cada 10 días", dijo Graciela a este diario.
Al igual que los casos anteriores, esta familia también sobrevive con lo trabajado en la temporada de verano 2019-2020. "Sin dudas que la parte económica es un tema importante, pero vemos acertadas las medidas que se están tomando al momento, si bien el aislamiento nos genera actividad cero, tenemos en claro, que la vida está primero. Si nos cuidamos hoy, mañana nosotros y nuestros amigos nos encontraremos en nuestras cabañas para disfrutar y compartir lindos momentos", reflexionó Emiliano.
La familia comenzó este proyecto en 2012 y al año siguiente comenzaron a recibir huéspedes. El lugar, donde tienen sus cabañas, se destaca un gran esfuerzo que año a año redoblan en comodidades para disfrutar. "Desde el 12 de marzo nos tocó comunicarles a los huéspedes que teníamos alojados que por orden de la municipalidad debíamos tener nuestro complejo vacío, como todos en aquel momento pensamos que esto iba a ser por unos pocos días, pero eso no ocurrió", contó Graciela.
Con la dificultad de poder viajar, los propietarios están manteniendo su inversión mientras trabajan en las normas de bioseguridad para reabrir sus puertas. "En cuanto a protocolo, se está trabajando un proyecto para aplicar en todo el corredor Punilla, apenas es un proyecto donde en caso de una apertura para poder recibir huéspedes todo sería muy controlado y con cuidados específicos, tanto para la llegada al pueblo como para el ingreso al complejo. Por todo esto consideramos que no será fácil de aplicar aunque somos conscientes que el cuidado debe estar por sobre todas las cosas, y más cuando se viene a disfrutar", concluyó la empresaria.