Tres jóvenes paraguayos fueron asesinados e investigan una vinculación narco
El hecho ocurrió en Esteban Echeverría, las víctimas tienen entre 16 y 18 años eran de nacionalidad paraguaya.
Tres jóvenes paraguayos de entre 16 y 18 años, dos de ellos hermanos, aparecieron asesinados en una zona descampada de la localidad bonaerense de Monte Grande, informaron fuentes policiales.
Se trata de Osmar Benítez Palacios, de 18 años, Pedro Palacios, de 16, y Miguel Ángel Díaz, de 16, este último amigo de los otros dos.
Los tres adolescentes aparecieron muertos en un descampado de la calle Lavalle al 5000 del Barrio La Victoria de esa localidad del partido bonaerense de Esteban Echeverría.
El triple crimen es investigado como una presunta venganza, en el contexto de un "ajuste de cuentas entre vendedores de drogas", aunque no se descartan otras hipótesis. Se apunta a la teoría de la actuación de un grupo de sicarios para concretar estos "asesinatos por encargo".
Una familiar relató que los tres chicos "andaban en la venta y el consumo de drogas". El hecho provocó gran conmoción entre los vecinos y el caso quedó a cargo del personal del destacamento Las Colinas de Monte Grande, de la Policía Bonaerense.
El 22 de junio pasado también en Esteban Echeverría, pero en la localidad de 9 de Abril se produjo un cuádruple crimen, en el que se sospecha que fue por drogas.
Antes, un cuádruple crimen
Los homicidas primero mataron a Nahuel Alejandro Cisnero, de 20 años, conocido como "Francis", luego de entrar a una vivienda y gritar "vos sos transa, vos sos transa" mientras le disparaban en varias ocasiones.
En ese momento, "Francis" estaba en una escalera hablando con otro joven, quien se salvó de milagro porque al ver entrar a los asesinos llegó a esconderse.
Los homicidas entraron después a la pensión donde estaban las hermanas de la víctima, Evelin Danila Giménez (26) y Carla Gianela Cisnero (16), y su pareja, Daniela Eliana Figueroa (22), a quienes mataron de varios disparos.
Además, resultó herido el bebé de Evelin, que recibió un roce de bala, pero quedó fuera de peligro.