Sin vergüenza y por sus hijos, 200 adultos egresaron del secundario en 2018
A través de los Cenma, el año pasado hubo 600 personas en el departamento San Justo que culminaron sus estudios de Nivel Medio. Este año estiman que 2000 personas "grandes" volverán a las aulas. Las exigencias de este título en el trabajo son también un factor de influencia.
El rompimiento de tabúes y cambios en el mundo laboral son dos factores que impulsan cada vez más a los adultos a completar el nivel medio de educación. Los "grandes" vuelven a las aulas para tomar los libros y construir una identidad de vida mejor para sí mismos y sus familias.
Durante 2018, 1900 personas eligieron retomar los estudios en los Centros de Enseñanza de Nivel Medio para Adultos (Cenma), siendo 600 de ellos los que obtuvieron su título, 200 más que en 2017.
El crecimiento de la matrícula (este año esperan 2.000 inscriptos) y el aumento en el número de egresados es algo altamente valorado por la inspectora de Zona 7 de la Dirección General de Educación de Jóvenes y Adultos, Alicia Calderone: "Esto se debe a la inmensa labor de los docentes para recuperar alumnos que no pudieron terminar este nivel de escolaridad", sostuvo a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Además de ser un agregado que facilita la búsqueda laboral o ayuda en su mantenimiento, para los adultos también influye el hecho de tener hijos que acuden al colegio y necesitan acompañarlos en sus estudios; por eso hay un número considerable de mujeres jóvenes menores de 35 años que volvieron a las aulas.
Sub 30 y 40
Quienes concurren a los Cenma abandonaron sus estudios por distintos factores. En cada banco que se ocupa hay una historia por detrás que influyó en la deserción. Pero gracias a la "identificación con los docentes" que ofrecen distintas alternativas para seguir batallando es que se animan a recuperar el tiempo perdido.
Calderone dijo que existen distintos grupos entre los que se dividen, pero todos tienen un factor común: la dedicación y esperanza puesta en el esfuerzo de estudiar.
"A algunos les faltaban algunas asignaturas y actualmente trabajan. En el caso de las mujeres, muchas porque han sido madres jóvenes y buscan educarse para acompañar a sus hijos en la escolaridad", expresó Calderone.
La inspectora también agregó que existe otro colectivo de estudiantes que podría haber terminado en el secundario común, pero por distintas circunstancias eligen a los Cenma.
"Los padres nos piden que contemplemos estos casos porque buscan que completen los estudios, no estén en la calle, ni con malas compañías o se alejen de las adicciones", indicó.
Eligen a distancia
La modalidad a distancia es una de las que más se incrementa año a año. Calderone sostuvo que de igual forma a los alumnos se los acompaña con material y apoyo pedagógico en todo momento.
"Existe un incremento en la modalidad de distancia porque tienen que asistir menos días y menor movilidad lo cual es compatible para estudiar y trabajar. Ellos tienen la opción de asistir a las tutorías y como complemento se les da material impreso y digitalizado, después rinden", detalló la inspectora zonal.
Hay otros alumnos que además de las tutorías asisten también a clases para consultar y van rindiendo exámenes parciales a lo largo del año.
Pese a que existen dos modalidades diferenciadas, muchos optan por ir igual a clases así no sea obligatorio porque se les facilita la comprensión de los contenidos; y sobre todo en virtud de que en un primer momento "se les dificultó terminar el secundario por la incapacidad de desarrollar un estudio autónomo".
Esta imposibilidad de "apropiarse del oficio de estudiante" como lo llaman los docentes, "es un factor que en muchos casos lleva al fracaso durante el secundario común".
Conscientes de que no todos aprenden de la misma manera, Calderone dijo que "estas distintas formas de estudio mantienen siempre el mismo objetivo de que puedan acceder y complementar su educación".
No quieren volver
Muchos jóvenes menores de 30 años no quieren volver a completar sus estudios en los colegios de origen, aun cuando adeudan solamente la aprobación de algunas materias.
En este tipo de situaciones, la docente subrayó que tienen que ver con "la vergüenza" y el "temor" de que se sepa sobre su falla; pero también el paso de los años o estigmatización social.
"Siempre en estos casos intentamos que rindan en la escuela donde estudiaron. Si de igual forma no quieren volver se los integra al último año del ciclo para adultos para que ingresen y lo completen", puntualizó Calderone.
Muchos en primaria
Se estima que en San Justo son alrededor de 800 los adultos que tampoco completaron la escolarización primaria.
Entre ese grupo numeroso de personas, con un escaso nivel de alfabetización, "hay muchos que son menores de 35 años".
Los hijos y la búsqueda de mejores empleos o mantenimiento del mismo son las causas más recurrentes que los impulsan a volver. Además, entre esos bancos hay muchas madres jóvenes que intentan superarse día a día.
El trabajo pedagógico de los docentes que trabajan en los Cenma, acompañando a los adultos, es el que posibilita que cada vez haya más gente que se anima a retomar los estudios, aprender a escribir, soñar con una enseñanza superior. La labor de esos maestros es la que reinventa permanentemente el derecho a la educación.
Dónde estudiar
En la modalidad semipresencial, los Cenma en la ciudad están ubicados en el Colegio Superior San Martín y en la Ipem Nº 315 "José Hernández".
También hay otros tres de modalidad presencial en el Ipem 145 "Dr. Francisco Ravetti", en el Ipet 264 "Teodoro Asteggiano" y en el Servicio Penitenciario Nº7.