“Sí esto sigue así, las universidades públicas del país corren mucho riesgo”
Así lo sostiene Paulo Gianoglio, consejero superior de la UTN, quien se refirió al impacto que tiene el momento económico actual contra los centros universitarios.
El paro nacional de docentes universitarios que comenzó ayer está motivado por dos ejes: la descompensación salarial que reclaman los docentes nucleados en Conadu, lo que generó el fuerte acatamiento en la ciudad; y el otro de carácter coyuntural que hace hincaié en el estado económico que atraviesan las casas de altos estudios públicas del país.
En ese contexto, La VOZ DE SAN JUSTO, dialogó con Paulo Gianoglio, consejero superior de la UTN y alumno de la Facultad Regional, quien brindó su visión de un momento complicado para la educación nacional.
"Los docentes paran porque no se ha vuelto a reabrir la paritaria después del aumento del 5% que habían recibido meses atrás. El gobierno nacional había dado su compromiso de reabrir la discusión salarial y esto por el momento no sucede. El 5%, con los valores de inflación que hay es una falta de respeto. Algo similar sucede con el 15% de aumento de los no docentes que ya está desfasado", criticó Gianoglio.
Consultado por la situación que atraviesan las universidades públicas del país y ante las medidas de fuerza para evidenciar el estado real de los presupuestos que estas reciben, Gianoglio señaló: "Hicimos una actividad previo a que finalice el primer cuatrimestre, para pedir que la situación no quede planchada por las vacaciones y para que el alumnado sepa porque, por ejemplo, hay demoras en las becas SAE. Lo que está sucediendo es que el presupuesto universitario no aumenta de manera correlativa a los que aumentan los gastos de funcionamiento. Ese presupuesto que da la Nación por ley, no se actualiza de manera correcta. Ese congelamiento, con el aumento de tarifas, es terrible. Lo que está destinado para funcionamiento te garantiza un funcionamiento para tres o cuatro meses y te queda una ventana de ocho meses completamente descubierta", graficó.
"LA UTN tiene una ventaja con respecto a otras casas de altos estudios y es que puede combatir ese déficit de esos ocho meses por sus carreras, que permiten una prestación de servicios al medio. A través de convenios con entidades privadas, UTN genera un producido propio con lo que se puede paliar eso que falta. Pero a ese producido propio nos encantaría utilizarlo para poder traer otra máquina de prototipado y no para pagar la luz. Además hay otras universidades sin carreras afines a la técnica como la nuestra, que no pueden prestar servicios al medio, entonces ¿qué hacen con esos 8 meses que no entran en el presupuesto?", preguntó el dirigente estudiantil.
Impacto local
Gianoglio sostuvo que "esta situación, a la UTN la impacta en varios programas. Porque si vos tenés que pagar la luz o llevar adelante programas de complemento académico, de intercambio, becas, va a pagar la luz para que la universidad pueda seguir funcionando, pero no es la idea. La idea es evolucionar, seguir desarrollando, seguir creciendo, porque eso significa más crecimiento para el alumnado de UTN y por ende para el mercado laboral. Por ejemplo, las becas de ciencia y tecnología ya este año pasaron de 9 a 6 meses. Y no sabemos qué va a pasar el año que viene con respecto a esto. Pero si todo sigue así, es decir, destinando absolutamente todo el presupuesto a gastos de funcionamiento se van a tener que cortar muchos programas".
Por último, Gianoglio avizoró que el semestre final del año va a ser muy complicado de sobrellevar: "Si se sigue en este camino corren mucho riesgo las universidades públicas del país", finalizó.