Río de Janeiro: el juez cree que hubo "ejecución arbitraria" en el operativo policial que dejó 25 muertos
Un operativo de la Policía Civil contra el narcotráfico en la favela Jacarezinho desencadenó el jueves un tiroteo en el que murieron 25 personas, entre ellos un agente. El episodio fue calificado de "matanza" por varias organizaciones sociales.
El juez del Tribunal Supremo Federal de Brasil, Edson Fachin, dijo que cree que existen indicios de "ejecución arbitraria" en la operación de la Policía Civil de Río de Janeiro que este jueves acabó con 25 muertos en la favela Jacarezinho, en un episodio calificado de "matanza" por varias organizaciones sociales.
En unos oficios dirigidos a la Procuraduría General de la República, el magistrado apuntó que los hechos relatados "parecen graves" y que en uno de los videos de la operación "hay indicios de actos que, a priori, podrían configurar ejecución arbitraria", informó el portal G1.
Fachin se dirigió a la Fiscalía después de que el Núcleo de la Asesoría Jurídica Universitaria Popular Luiz Mahin, vinculado a la Universidad Federal de Río de Janeiro, entregara a la Fiscalía y al Ministerio Público de Río videos de la operación para que se tomaran medidas.
(FW)"Hay indicios de actos que, a priori, podrían configurar ejecución arbitraria"(A)Edson Fachin, juez(A)
"La Fiscalía de Río viene adoptando todas las medidas para verificar los fundamentos y circunstancias que rodearon el operativo y las muertes resultantes de la intervención policial", señaló el órgano judicial en un comunicado difundido por las agencias de noticias Europa Press y Sputnik.
La institución agregó que está trabajando en el tema desde la mañana temprano junto a organismos oficiales tras conocer los hechos a través de la información que circula en la prensa y las redes sociales.
Un operativo de la Policía Civil contra el narcotráfico en la favela Jacarezinho, ubicada en el norte de la ciudad, desencadenó el jueves un tiroteo el que murieron 25 personas, entre ellos un agente.
Las autoridades investigaban el reclutamiento de niños, niñas y adolescentes para llevar a cabo actos delictivos, como asesinatos, robos o secuestros.
Según la Policía, el narcotráfico en Jacarezinho adopta "tácticas de guerrilla", incluido el uso de armas pesadas y soldados uniformados,
En unos oficios dirigidos a la Procuraduría General de la República, el magistrado apuntó que los hechos relatados "parecen graves" y que en uno de los videos de la operación "hay indicios de actos que, a priori, podrían configurar ejecución arbitraria", informó el portal G1.
Fachin se dirigió a la Fiscalía después de que el Núcleo de la Asesoría Jurídica Universitaria Popular Luiz Mahin, vinculado a la Universidad Federal de Río de Janeiro, entregara a la Fiscalía y al Ministerio Público de Río videos de la operación para que se tomaran medidas.
(FW)"Hay indicios de actos que, a priori, podrían configurar ejecución arbitraria"(A)Edson Fachin, juez(A)
"La Fiscalía de Río viene adoptando todas las medidas para verificar los fundamentos y circunstancias que rodearon el operativo y las muertes resultantes de la intervención policial", señaló el órgano judicial en un comunicado difundido por las agencias de noticias Europa Press y Sputnik.
La institución agregó que está trabajando en el tema desde la mañana temprano junto a organismos oficiales tras conocer los hechos a través de la información que circula en la prensa y las redes sociales.
Un operativo de la Policía Civil contra el narcotráfico en la favela Jacarezinho, ubicada en el norte de la ciudad, desencadenó el jueves un tiroteo el que murieron 25 personas, entre ellos un agente.
Las autoridades investigaban el reclutamiento de niños, niñas y adolescentes para llevar a cabo actos delictivos, como asesinatos, robos o secuestros.
Según la Policía, el narcotráfico en Jacarezinho adopta "tácticas de guerrilla", incluido el uso de armas pesadas y soldados uniformados,
Los investigadores consideran que la zona es la base del Comando Vermelho, el grupo narcotraficante con mayor actividad en Río de Janeiro.
Pero pese a estos argumentos, organizaciones como Amnistía Internacional y la oficina de Derechos Humanos de la ONU criticaron el operativo y lo calificaron de "matanza".
El vocero del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Rupert Colville, subrayó que el operativo "ahonda una tendencia en el uso innecesario y desproporcionado de la fuerza por parte de la Policía en barrios pobres, marginados y predominantemente afrobrasileños".
Además, denunció que "la Policía no tomó medidas para preservar pruebas en la escena del crimen", lo que podría perjudicar las pesquisas y pidió una investigación "independiente, completa y parcial".
La Comisión de Derechos Humanos del Congreso de Brasil, que anunció que abrirá una investigación, también criticó la "matanza" llevada a cabo en la favela.
Ajena a todas estas críticas y denuncias, la Policía Civil de Río de Janeiro defendió el operativo, sostuvo que estuvo "muy planificado" y que cumplió con todos los protocolos previstos en este tipo de situaciones.
Asimismo, subrayó que "eran criminales, bandidos, traficantes y homicidas, intentaron matar a los policías y no hubo más remedio que repeler esa injusta agresión".
El jefe de la Policía, Rodrigo Oliveira, incluso se quejó de lo que consideró un "activismo judicial" para atacar a la fuerza de seguridad.
En el marco de las medidas contra la pandemia de coronavirus, desde el año pasado la policía tiene prohibido realizar acciones relámpago en las favelas de Río, pero esta, argumentó la fuerza, era una operación planeada desde hace varios meses y tenía el aval de la fiscalía.
Pero pese a estos argumentos, organizaciones como Amnistía Internacional y la oficina de Derechos Humanos de la ONU criticaron el operativo y lo calificaron de "matanza".
El vocero del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Rupert Colville, subrayó que el operativo "ahonda una tendencia en el uso innecesario y desproporcionado de la fuerza por parte de la Policía en barrios pobres, marginados y predominantemente afrobrasileños".
Además, denunció que "la Policía no tomó medidas para preservar pruebas en la escena del crimen", lo que podría perjudicar las pesquisas y pidió una investigación "independiente, completa y parcial".
La Comisión de Derechos Humanos del Congreso de Brasil, que anunció que abrirá una investigación, también criticó la "matanza" llevada a cabo en la favela.
Ajena a todas estas críticas y denuncias, la Policía Civil de Río de Janeiro defendió el operativo, sostuvo que estuvo "muy planificado" y que cumplió con todos los protocolos previstos en este tipo de situaciones.
Asimismo, subrayó que "eran criminales, bandidos, traficantes y homicidas, intentaron matar a los policías y no hubo más remedio que repeler esa injusta agresión".
El jefe de la Policía, Rodrigo Oliveira, incluso se quejó de lo que consideró un "activismo judicial" para atacar a la fuerza de seguridad.
En el marco de las medidas contra la pandemia de coronavirus, desde el año pasado la policía tiene prohibido realizar acciones relámpago en las favelas de Río, pero esta, argumentó la fuerza, era una operación planeada desde hace varios meses y tenía el aval de la fiscalía.