Reciclaron 600 cubiertas y levantaron su casa en Morteros
Inspirados en el modelo estadounidense Earthship, que combina materiales reciclables, una familia de Morteros construyó una casa sustentable con 600 cubiertas. Se trata de la primera vivienda habitada del país bajo esta técnica
Cristian trabaja en el campo realizando controles lecheros; Adriana es psicóloga, pero desde hace siete años la construcción sustentable despertó su interés. Él aprendió muy bien la técnica y hasta dicta cursos de bioconstrucción. Ella, trabaja en la creación de una huerta de plantas no convencionales, que a futuro planea utilizar como medio de vida.
"Si bien desde hace mucho tiempo nos interesa esto de la ecovivienda, hace dos años decidimos terminar una parte de la casa, dejar de pagar alquiler e irnos a vivir a este hogar sustentable. A partir de allí comenzó esta aventura que desde hace 10 meses nos permite vivir en este hogar sustentable", expresó Cristian en una entrevista con LA VOZ DE SAN JUSTO.
Consultado sobre las características de la vivienda, el hombre explicó que "cuenta con unos 70 metros cuadrados y aún resta un sector de ingreso, que tendrá otros 20-30 metros más. La misma posee una mezcla de materiales reciclables: las paredes son de goma (neumáticos rellenos con tierra), los revoques de adobe y el techo recíproco; que combina con varas de madera que se autosustentan por encima un techo verde, cubierto de vegetación".
"La construcción demandó de unas 600 cubiertas, entre otros materiales reciclables que contiene la casa como ladrillos de vidrio (realizados con botellas de este material cortadas), que cumplen una doble función: la iluminación y decoración de la vivienda", precisó el bioconstructor morterense.
Asimismo, Cristian contó que "el baño no lleva pozo negro, sino biodigestor que recupera las aguas vírgenes".
Por otro lado, Cristian aseguró que "la idea es usar lo que hay. Se trata de materiales que son fáciles de conseguir, y que inclusive la gente desecha. En el caso de las cubiertas, generalmente se tiran la basura y se queman, con el daño que eso significa al medioambiente. En nuestro caso, fueron donadas por una gomería local".
Los Resumi, una familia que contribuye a reducir el "estrés" del planeta
Beneficios para la salud,el ambiente y el bolsillo
Consultado sobre la iniciativa, el morterense dijo que "con mi esposa ya habíamos visto esta técnica hace siete años pero recién hace dos empezamos a construir, cuando nos decidimos terminar una parte, dejar de alquilar y mudarnos".
"Cuando te acostumbrás a este concepto de vida, te das cuenta que es mucho mejor para la salud y el medioambiente", reflexionó.
En este sentido, recordó que "la casa mantiene la temperatura acorde a cada estación del año, por lo que no necesitamos calefacción en invierno, ni aire acondicionado en verano. Esto es posible gracias a una combinación de factores, entre ellos la disposición de los vidrios a 70º que permiten manejan la temperatura de acuerdo a la disposición del sol".
El joven constructor destacó además que en tiempos de crisis, se trata de una alternativa más económica, ya que se utilizan materiales que son fáciles de conseguir. En tanto, aclaró que "no contamos con paneles solares, ya que en este caso la inversión si sería superior a una vivienda convencional, pero con el tiempo se amortiza en el consumo energético".
"Cuando te acostumbrás a este concepto de vida, te das cuenta que es mucho mejor para la salud y el medioambiente".
"A futuro tenemos pensado agregar paneles de este tipo", manifestó.
Luego, contó que "la idea es estar desconectado del sistema y no cargar impuestos a los recursos del planeta, como agua y electricidad".
"Nos mantenemos de manera sustentable y estamos pagando menos de la mitad de luz lo que pagábamos en una casa convencional", remarcó Cristian.
Con materiales reciclables, se logra un buena
combinación: funcional y decorativa
Incursionan en plantas no convencionales
Una característica distintiva de estas viviendas ecológicas es la presencia de abundante vegetación. La familia Resumi cuenta con una huerta de la cual obtienen gran parte de los alimentos que consumen. No obstante, Cristian asegura que "llevamos una alimentación variada, no somos vegetarianos".
Asimismo, contó que su esposa, Adriana, se encuentra abocada en la creación de un vivero con plantas no convencionales, curativas, y hasta comestibles, como el caso de la ortiga que cuenta con muchas propiedades.
"Buscamos el contacto con lo natural y tratar de vivir cuidando nuestra salud y el planeta", manifestó.
Cristian contó además, que su vivienda es un atractivo en el barrio, ya que muchos pasan a verla y preguntar de la técnica. "Igualmente, la gente aún nos mira raro, porque no es un concepto que haya sido instaurado en la sociedad. Pero sabemos que una vez terminada la casa y cuando nos vean, la gente vea se va a convencer de que es un cambio muy positivo", finalizó.