Recibirse en tiempos de pandemia: se convirtió en Doctor mediante una videoconferencia
El pasado viernes, el ingeniero y docente investigador de la Facultad Regional San Francisco de la UTN, Matías Raspo, defendió exitosamente y de manera virtual su tesis de Doctorado en Ciencias de la Ingeniería en la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba. "Fue todo muy raro", dijo.
Hace cinco años atrás, el ingeniero y docente de la Facultad Regional San Francisco de la UTN, Matías Raspo, iniciaba un camino que culminó formalmente y de manera virtual el viernes pasado, cuando le dijeron "Felicitaciones, Doctor".
"Fue todo muy raro. Para este momento me preparé un montón y acá estoy, ya siendo doctor", dijo emocionado Matías a LA VOZ DE SAN JUSTO.
El ingeniero se convirtió el viernes 3 de abril en Doctor en Ciencias de la Ingeniería tras defender su tesis titulada "Estudio teórico y experimental del proceso de conservación de productos naturales renovables", mediante una videoconferencia que mantuvo con el tribunal de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba.
Aún con la emoción que se le notaba en la voz, Matías nos contó que fueron años intensos donde realizó los cursos obligatorios, idiomas y todos los trabajos de metodología de la investigación para culminar este camino de una manera "rara pero muy especial".
"Me preparé tanto y era mi anhelo que esté mi familia, mis amigos y mis compañeros del Doctorado pero fue distinto", señaló lamentándose un poco por el contexto en el que se convirtió en Doctor.
Una defensa atípica
"Como me dedico a la docencia, considero que tengo cierto manejo de público y siempre uno al estar exponiendo o defendiendo de manera presencial, mira al público y puede comprobar si está entendiendo o si hay apoyo. Acá sentí que me faltaba eso", dijo.
Además señaló que "en lo virtual se elimina esa aprobación, estás sentado frente a una computadora" y agradeció que se desarrolló con total normalidad, sin algunas eventualidades que podrían haberle dificultado el proceso: "fueron 40 minutos donde estuve tranquilo, por suerte no me trabé y además tenía miedo que golpeen la puerta de mi casa o que mi perro se ponga a ladrar furiosamente porque eso a veces pasa".
Respecto a sus sensaciones, Matías afirmó que lo más complicado vino cuando terminó de exponer. "Cuando salí de la videoconferencia sentí el vacío, estaba solo. Por más que haya sentido que estaba aprobado, se me hicieron minutos eternos antes del dictamen. Me llamó mi directora Alfonsina en ese momento, hasta que esperé que me avisaran por whatsapp para que me vuelva a conectar", indicó.
Después de eso, fue todo alegría aunque lamentó no tener cerca a los suyos. "Cuando corté la videollamada me salió un llanto de alegría y ganas de llamar a mi familia, pero faltó el abrazo. Tengo una foto llorando con el dedito para arriba diciendo ya está, al fin terminé".
La importancia de seguir estudiando
"Fue un proceso largo, de cinco años, donde estamos apostando por la ciencia en una facultad que nos brinda todo", dijo el flamante Doctor haciendo referencia a la Facultad Regional San Francisco, una de las sedes de la Universidad Tecnológica Nacional, aun siendo consciente de que "no tenemos el equipamiento de las grandes universidades".
"Todo esto lo hacemos a pulmón, con el apoyo fiel de los directivos y apuntando a hacer crecer la ciencia en San Francisco a través de la UTN. Hoy la facultad cuenta con un grupo reducido de doctores, no sé si seremos siete u ocho, y ojalá podamos tener más", cerró Matías.