Por semáforos en la esquina de Sáenz Peña y Rivadavia
El anhelo es que, de manera definitiva, se dé respuesta a los reclamos de los vecinos y comunidades educativas, se sancionen los instrumentos legales correspondientes y se establezcan los plazos para que este sector deje de ser uno de los más peligrosas del casco urbano sanfrancisqueño.
Un nuevo accidente entre una motocicleta
y un automóvil en la esquina de bulevar Roque Sáenz Peña y Rivadavia abrió otra
vez la discusión sobre la necesidad de que se instalen semáforos en esa intersección,
cercana a tres escuelas a las que concurren numerosos estudiantes, así como a
una plaza donde se congregan muchos vecinos, lo mismo que en la Iglesia
Catedral.
El choque ocurrido el miércoles pasado no registró por fortuna daños personales de magnitud para las personas involucradas. Sin embargo, puso sobre el tapete la necesidad de ordenar de alguna manera el tránsito en esa esquina, en virtud de las posibilidades abiertas desde siempre por la doble mano que allí tienen las dos calles, además de la elevada cantidad de vehículos que por allí circulan. El reclamo de los vecinos y también de los centros de estudiantes de los colegios secundarios allí emplazados volvió a escucharse luego de este nuevo episodio y la necesidad de adoptar medidas es imperiosa.
Es verdad que agentes de la Dirección Municipal de Tránsito ordenan la circulación a la hora de ingreso y salida de las escuelas en ese lugar. Pero ello no basta porque es imposible mantener las mismas condiciones durante toda la jornada. Por ello, se hace más notoria la falta de elementos -semáforos o prohibiciones de giro, por ejemplo- que atenúen la factibilidad de que el accidente se haga presente y se eviten dolorosas consecuencias.
En este contexto, ha sido recibido con expectativa el anuncio del secretario de Gobierno municipal en el sentido de que la comisión de tránsito del Concejo Deliberante reanalizará la colocación de un semáforo en la intersección de bulevar Sáenz Peña y Rivadavia. Vale recordar que en abril pasado ya se aprobó en el cuerpo legislativo municipal una iniciativa que promovía su instalación y que el Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi), entidad contratada por el municipio para organizar y mejorar el tránsito en nuestra ciudad, había dado su visto bueno.
Entonces, como admitió el referido funcionario a este diario, solo hace falta definir la cuestión presupuestaria. Y, en ese sentido, auguró que posiblemente el año próximo pueda concretarse la instalación de los semáforos, con lo que el sector ganará en seguridad, las familias que envían a sus hijos a los tres establecimientos educativos estarán más tranquilas y las crónicas sobre accidentes dejarán de ser frecuentes.
El anhelo es que, de manera definitiva, se dé respuesta a los reclamos de los vecinos y comunidades educativas, se sancionen los instrumentos legales correspondientes y se establezcan los plazos para que la esquina de Sáenz Peña y Rivadavia deje de ser una de las más peligrosas del casco urbano sanfrancisqueño.