Poetas locales reclaman que regresen los Juegos Florales
Al rescate de las letras. El conocido y prestigioso certamen a nivel nacional cosechó cientos de adeptos hasta 2007 cuando se realizó por última vez. Los referentes de la literatura en la ciudad comentaron que desde el área de Cultura de la municipalidad adujeron que eran muy costosos para seguir realizándose. Lo cierto es que la competencia fue muy popular en San Francisco.
Por Ivana Acosta
Beatriz Mattar de Vergara y Rosa Rizzi unieron sus voces como dos de las referentes con más trayectoria en la ciudad con un pedido especial: la vuelta de los Juegos Florales de San Francisco.
La historia comienza en 1936 con el entonces intendente Raúl Villafañe, se trunca, retoma y vuelve a desaparecer en 2007. Los motivos para que dejen de hacerse, coinciden, fueron que su realización era "muy costosa" para la localidad.
Los Juegos Florales Nacionales con sede en San Francisco, eran algo más que un concurso de poetas y cuentistas, un poco más de ese voluminoso conjunto de sobres que contenía con un seudónimo una historia. El intendente, de aquel momento, Raúl Villafañe como buen escritor trajo a la ciudad esta competencia, que caló hondo en la ciudad, en la memoria colectiva y cultural local.
Corría el 1936, la intendencia tenía al frente a Raúl Villafañe, quien era conocido por su afición a las letras. Su empeño por difundir la cultura en aquella época, hizo que la competencia nacional conocida como Juegos Florales tuviera sede en San Francisco. Cuenta la historia que fue con toda la pompa de la época, reinas y trajes de gala para la premiación. Hasta la empresa "Geniol" auspició la realización del evento cultural. Si hasta en el programa de la época se detalla: "Los Juegos Florales y las cortes de amor. Disertación por el mantenedor de las fiestas Doctor Arturo Capdevilla".
Tan importante fue el certamen para aquella época turbulenta de la Argentina, que fue retransmitido por LR3 Radio Belgrano de Buenos Aires y LV3 de Córdoba.
Con este evento se cerraban de manera gloriosa los festejos por el Cincuentenario de la ciudad y Capdevilla fue el maestro de ceremonia.
A Beatriz todo esto la lleva al pasado, a revolver en su biblioteca, donde su padre Antonio Mattar, le legó la pasión por las letras, los documentos de aquel certamen y sin saberlo por aquel entonces la labor de recomenzar con los Juegos Florales.
Una reina, una corte, la fiesta, la pompa, los escritores, la poesía y los cuentos se apagaron luego de aquel año y no volvería a desempolvarse todo esto hasta entrada la década del '90.
Rosa Rizzi muestra orgullosa la plaqueta otorgada por ser jurado en la edición de 1994 y en sus manos sostiene el recuerdo de los Juegos Florales de 1995.
La historia
Los Juegos Florales surgieron en 1323 de mano de un grupo de Trovadores de Toulouse (Francia) con el objetivo de mantener las tradiciones del lirismo cortesano, algo que había quedado comprometido luego de las Cruzadas.
Su realización debía ser en épocas de la primavera y se convocaban a "disputar una violeta de oro".
"La Compañía de los Juegos Florales es tenida como la más antigua sociedad literaria viviente del mundo civilizado", reza la reseña histórica de la competencia en el libro editado en San Francisco en ocasión de la edición del '95.
En la edición de 1936 que se realizó en la ciudad, bajo la intendencia de Raúl Villafañe se entregó a los ganadores en cada género - poesía y cuento - "una rosa de oro", pero para cuando se retomó la competencia, se optó por plaquetas y dinero para los seleccionados.
En la segunda edición que fue la de los años '90 "además se compilaron en un libro las mejores cinco obras". Ese ejemplar se llamó "Juegos Florales Nacionales, San Francisco Córdoba 1995". El ganador del certamen había sido el cuento "El Kramer" de Enrique Juan José Aurora, que relataba una historia sobre la última dictadura. Mientras que en poesía el galardón fue para Marta Zamarripa, por "Jazmín Diamela".
Beatriz Mattar de Vergara exhibe los documentos de la biblioteca de su padre Antonio que dan cuenta de los Juegos Florales Nacionales de 1936.
Puro prestigio
En 1994 una comisión en la que participó Beatriz Mattar de Vergara junto a - entre otros - Fernando Lopez elevó una petición a la Dirección de Cultura para organizar los Juegos Florales Nacionales "San Francisco '95". El objetivo era: "promover la actividad literaria a través de la participación de autores que prestigien nuestra lengua, en los géneros de poesía y cuento", reza el decreto 729/94 firmado por el entonces intendente Jorge Luis Bucco.
"El Director de Cultura de la Municipalidad, José Alberto Navarro, nos convocó para planificar su implementación, entonces hicimos una comisión y empezamos en el '94 pero se hicieron al año siguiente. Hubo plaquetas y entrega de dinero, pero fue diferente a los que se hacían antes", comenta Beatriz.
Una de esas plaquetas la tiene 'Rosita' Ricci quien ofrece su casa para dialogar sobre la época en que fue jurado en la edición 2004. "Hubo muchísima gente participando de todo el país, fue arduo nuestro trabajo. El nivel de los Juegos Florales para quienes se presentan es 'otra cosa, más importante'. Participaban representantes de todo el país, era un estilo de concurso con un jurado que elegía en base a todas las obras que llegaban de género narrativo y lírico", comenta animada por aquellos gratos recuerdos.
Beatriz comenta que en aquel entonces antes de la realización en 1995, fueron a la Secretaría de Cultura en Buenos Aires, "Tuvimos una reunión y ahí lo difundimos había directores de todo el país y por eso tuvimos muchísima participación. Los jurados fueron algunos especializados en cuentos y otros en poesía".
El reclamo
Frente a la búsqueda de una causa por la cual se dejaron de realizar en 2007, Mattar y Ricci coinciden en que su pregunta fue respondida con el argumento de que "su realización era muy costosa y el municipio no podía afrontarlos".
Entonces las letras se empezaron a borrar del área de cultura municipal, el polvo tapó aquellos años en que San Francisco era reconocido en el mapa de los representantes de la literatura a nivel nacional.
"La poesía y la literatura es parte del espíritu al igual que la vida cultural, ayuda mucho. Sería muy bueno que volvieran los Juegos Florales y este tipo de competencias, de estimular la literatura y la poesía, porque acá en la ciudad hay gente joven que escribe y lo hace muy bien, que expresa muy bien sus sentimientos", concluye Beatriz.
Ricci agrega que es "una pena que se dejaran de hacer". "Por eso queríamos con unos colegas literarios, juntar firmas para que la Municipalidad vuelva a hacerlo. Lo hemos planteado en la Dirección de Cultura".
Ambas coinciden que con el destierro de los Juegos Florales se evaporaron las actividades en que incluían a la literatura como parte de la cultura local. "Me encantaría que se volviera a realizar", reflexiona.
Las letras no están muertas en San Francisco, sólo se independizaron obligadamente de las políticas culturales y con ello se marchitaron las flores literarias de la ciudad.