Poco roce y visiones opuestas en el primer debate de candidatos chilenos
Del mismo participaron los ocho postulantes que aspiran llegar al Palacio de La Moneda, en las elecciones del 19 de noviembre.
Los ocho candidatos a la presidencia de Chile protagonizaron anoche un debate con poco roce en el que primó la exposición de ideas generales, con visiones de país claramente opuestas en temas como la economía, la Constitución, los derechos humanos y el conflicto mapuche.
El debate, organizado por la Asociación Nacional de Prensa (ANP), es el primero al que acudieron todos los aspirantes a llegar al Palacio de La Moneda en los comicios del 19 de noviembre próximo.
La cita se celebró en la sede del Congreso, en Valparaíso, y tuvo la participación del ex presidente y candidato conservador Sebastián Piñera; el senador Alejandro Guillier, aspirante de buena parte del oficialismo de centroizquierda, y la periodista Beatriz Sánchez, del izquierdista Frente Amplio.
También debatieron la senadora Carolina Goic, candidata de la Democracia Cristiana (DC); el aspirante del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami; el ultraconservador pinochetista José Antonio Kast; el senador Alejandro Navarro, un ex socialista cercano al movimiento bolivariano, y Eduardo Artés, postulante de la ultraizquierdista Unión Patriótica (UPA).
El debate, el primero de tres previstos antes de la votación, tuvo poca interacción entre los candidatos, debido en parte al formato de pregunta-respuesta que dejaba poco espacio a las interpelaciones directas.
Enríquez-Ominami, que se presenta por tercera vez a elecciones presidenciales, fue algo más punzante que el resto, especialmente con Piñera, a quien recriminó tener el acompañamiento de sectores que apoyaron la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), citó la agencia de noticias EFE.
Piñera, que gobernó entre 2010 y 2014 y es el favorito para regresar al Palacio de La Moneda en los próximos comicios, comenzó el debate respondiendo a uno de los periodistas a cargo de las preguntas sobre la investigación de la Fiscalía de pagos irregulares a la campaña de 2009 que reveló esta semana un diario.
El ex presidente dijo que recibió otras acusaciones de este tipo y las investigaciones determinaron finalmente su inocencia, por lo que está convencido de que con esta última polémica pasará lo mismo.
Según reveló el diario El Mercurio, el Ministerio Público indaga el presunto pago irregular de 4,9 millones de pesos (unos 7.800 dólares) por parte de la empresa minera Soquimich a la campaña del político conservador.
Piñera se comprometió a "poner en marcha" la economía chilena con la creación de empleos y el alza de los salarios, y a dar "más oportunidades" a la clase media y los sectores de menores ingresos.
Sánchez, que ha tenido un rápido ascenso en las encuestas y aspira a pasar a la segunda vuelta, que se realizaría el 17 de diciembre, ofreció un "cambio de mirada" para transformar la matriz productiva de Chile y dotar de valor agregado la exportación de cobre, el principal pilar de la economía.
También propuso mejorar los sistemas de pensión y salud elaborando una "red de seguridad social" para que esos servicios no dependan de los ingresos de cada persona, sino que se suscriba un "pacto social" basado en los aportes solidarios.
Por su parte, Guillier, que tiene el respaldo de todos los partidos de la coalición oficialista Nueva Mayoría menos la Democracia Cristiana, afirmó que la democracia chilena es representativa pero "claramente insuficiente", y planteó una "democracia participativa".
Uno de los temas que generó más controversia fue el llamado conflicto mapuche en el sur del país, que pasa por un momento álgido con la huelga de hambre que realizan cuatro comuneros desde hace 114 días y la detención, el pasado fin de semana, de ocho indígenas por la presunta quema de iglesias y camiones.
(Télam)