Piden cadena de oración por Matías, que lucha contra el cáncer.
Matías Smut, con 11 años y una gran valentía, enfrenta un tipo de linfoma No Hodking. Quiere recuperarse para volver a la cancha, al Baby Fútbol.
Matías Smut, de 11 años, que quiere volver a la cancha, a la pasión por el fútbol del Baby en el Club Atlético Barrio Cabrera.
En 2017 enfrentó un tipo de linfoma No Hodking y logró entrar en remisión después de meses de tratamiento con quimioterapia. Hoy, nuevamente lucha contra la enfermedad y sus familiares y amigos piden a la comunidad que ayude a través de la oración.
El linfoma es un tipo de cáncer que comienza en las células llamadas linfocitos que son parte del sistema inmunitario del cuerpo.
Con el apoyo incondicional de su familia, su mamá Mariana Bornia, su papá Fabián Smut y sus hermanos Nicolás y Luciana, sus compañeros de la escuela y del equipo de Baby, Matías sigue luchando.
Con su mirada tranquila y segura, un rosario colgado en su cuello y utilizando palabras técnicas que aprendió en sus días de tratamiento, Matías relataba hace un tiempo a LA VOZ DE SAN JUSTO cómo fue es lucha y afirmaba que la fe lo ayudó mucho a superar esta difícil etapa.
Matías junto a su familia, el pilar fundamental que lo ayuda, junto a los médicos, a luchar contra la enfermedad.
La importancia del diagnóstico precoz
Todo comenzó con una pequeña mancha en la piel y un tumor que comenzó a agrandarse. La rápida consulta y el diagnóstico precoz permitieron el tratamiento sin demoras.
Su papá Fabián dijo que el diagnóstico"fue un impacto en la familia. Es importante que los padres ante cualquier cosa rara que vean en sus hijos que consulten enseguida al médico, porque el tiempo es fundamental".
"A Matías se le detectó a tiempo el linfoma y no afectó la médulaósea, ni el sistema nervioso, y por eso la recuperación fue más rápida", remarcó.
Al recordar los primeros síntomas que tenía Matías, los padres aseguraron que primero "pensamos que lo había picado un bicho, que tenía una infección, le dieron antibióticos".
"A principios de diciembre tenía una mancha en la clavícula, pero a fines de diciembre ya tenía un granito sin pus, ya en enero notamos que los ganglios del cuello se le inflamaron, tenía un tumor más grande enél y entonces consultemos a médicos en Santa Fe en el Hospital de Niños 'Orlando Alassia' y eso ayudó mucho para el diagnóstico rápido", afirmaron.
Comentaron que a Matías "lo atendió un equipo de médicos y le hicieron varios estudios, pero no tenía nada alterado como para despertar sospechas de que era algo oncológico, no tenía ningún síntoma. Le hicieron una biopsia pero no dio positivo y aunque nos aliviamos, la preocupación seguía porque no sabíamos qué tenía".
Un camino difícil
"Cuando volvimos, unos días después, Matías se descompensó y le diagnosticaron apendicitis, aparentemente un ganglio inflamado en la ingle le afectó el apéndice y lo trasladaron de urgencia a Santa Fe donde lo operaron. En esa operación le extrajeron la masa tumoral que tenía para hacer una segunda biopsia, ahí descubrieron que tenía un linfoma anaplásico de células grandes tipo T", afirmaron.
Agregaron que la enfermedad "le estaba afectando las cuerdas vocales y estaba perdiendo la voz, estaba disfónico, después de eso enseguida comenzó a hacer el tratamiento".