Papel y lápiz en el olvido: ¿Qué se pierde al dejar de escribir a mano?
"Inmediatez", es la palabra que caracteriza esta época. Las nuevas tecnologías cambiaron la forma de comunicarnos y también la escritura. Con la llegada de los celulares, las computadoras y las tablets a todos los espacios, el papel y la lapicera ya no son tan necesarios.
Hoy las respuestas están a solo un
"clic" enviando textos digitalizados o emoticones. La lista del
supermercado, el turno del médico, hasta los números de teléfono,
las tareas de la escuela, se escriben en las pantallas. Aunque muchos
adultos todavía prefieren hacerlo a mano, se impone cada vez más la
escritura digital.
¿Qué se pierde al dejar de escribir a mano?, ¿Cómo afecta el desarrollo de los niños?. La psicopedagoga Paula Daniela Botta (MP-342619) de nuestra ciudad, advirtió en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO que en los adultos, el uso de la tecnología y la rapidez de la respuesta hacen que tiendan a usar abreviaturas, omitir signos de puntuación o utilizar emoticones; mientras que los niños muestran dificultades para escribir a mano.
Se puede decir que hoy, los niños nacen "con un celular bajo el brazo" y eso impacta en su desarrollo. Al respecto Botta aseguró que muchas de las consultas actualmente tienen que ver con problemas que los chicos presentan a la hora de escribir.
"Algunos tienen una letra ilegible, otros presentan dificultades en la letra cursiva. Además otro problema a la hora de escribir es que sus respuestas son breves -con cierta escasez a nivel imaginativo- pobreza para crear e inventar historias y errores de ortografía", dijo la psicopedagoga.
Perder la posibilidad del encuentro
Actualmente los niños utilizan a edades cada vez más tempranas los celulares, por tiempo prolongado y los adultos siempre resuelven cada vez más situaciones con el teléfono en la mano.
Botta afirmó que cuando los niños "faltan o no terminan de copiar en el aula, solemos los adultos facilitarle la copia muchas veces, cuando imprimimos las capturas de pantalla del grupo de whatsapp del chat de 'mamás del cole' y así tal cual se lo anexamos a sus carpetas o cuadernos, 'para ahorrar tiempo'".
La psicopedagoga advirtió que de esta forma "se va perdiendo la posibilidad del encuentro con el otro, la mirada, la escucha, el ¿te leo un cuento?, ¿vamos a dibujar?, momentos de juego libre que potencian la actividad creadora, la inventiva, la imaginación".
Remarcó que por eso es tan importante en edades tempranas, regular el uso de la tecnología y generar más espacios de juego y de exploración. "Se pueden ofrecer diferentes elementos: masas, arcilla, tierra, pinturas, dando lugar a los primeros trazos en hoja, figuras, dibujo, para posteriormente acceder a la escritura".
En el caso de los niños que presenten dificultades que afecten la escritura como disgrafía o dislexia etc., la psicopedagoga aseguró que el uso de una tablet "sería una herramienta compensatoria, además de recibir un tratamiento adecuado y cierta flexibilidad en cuanto al criterio evaluativo por parte del docente áulico, en este tipo de situaciones".
Psicopedagoga Paula Daniela Botta
Se escribe pero de otra forma
Muchos temen que si escriben frecuentemente de esta manera los niños y jóvenes en la actualidad, ya no sabrán escribir de la manera convencional. Sin embargo, Botta aseguró que hoy en día "se escribe mucho más que antes".
"Si desde el ámbito educativo -en grados más avanzados por ejemplo- abrimos la posibilidad de que desde algunas materias pueda reflexionarse sobre los distintos espacios de escritura que abren las aplicaciones (WhatsApp, Correo electrónico, Messenger, etc) y de las condiciones de escritura y competencias que nos imponen, podremos ver que se escribe mucho más que antes, solo que no es de la forma que tradicionalmente veníamos acostumbrados", detalló.
Agregó que además es necesario "ser consiente del uso pragmático que le damos a lo que escribimos. Es decir, lógicamente no voy a utilizar el mismo código de comunicación a la hora de redactar una carta formal que el que utilizaría para escribirle a un amigo".
Recordó que los cambios en las tecnologías de la escritura fueron tan acelerados que no se termina de entender una novedad, cuando ya aparece la siguiente. "Por eso hay tanta inquietud del medio adulto y, particularmente, del medio docente con respecto a estas escrituras".
Cuando escribimos, lo que producimos tiene nuestra impronta
El valor de la escritura
La escritura es un recurso irremplazable y de gran valor en cada persona, ya que ayuda a desarrollar la inteligencia, es un proceso constructivo.
Botta explicó que cuando escribimos, "lo que producimos tiene nuestra impronta, nuestra huella y es para un otro también, para que ese 'otro' me lea, me pueda entender: ya sea las docentes en el ámbito escolar, los compañeros de aula, los padres del niño, es parte de la comunicación. Escribir en hoja exige de destrezas motrices -coordinación óculo manual-, desarrolla nuestro cerebro, implica que prestemos atención, que usemos nuestra memoria".
Añadió que al escribir se ponen en marcha varios procesos, el de percepción por el que se identifica el soporte sobre el que se escribirá, las herramientas a utilizar y el tema, además se planifica poniendo en juego en ese momento no solo los pensamientos e ideas sino también a las emociones.
"Si hacemos énfasis en el hecho escritural en sí, seremos consientes de las múltiples capacidades expresivas que somos capaces de usar y desarrollar. La escritura es activa, produce pensamiento y nos permite encontrarnos con el acto del conocimiento", remarcó.