“No nos quedó más que el cielo”
Dramático momento para una familia de Frontera; se le voló el techo de su casa. Se desprendió por completo en plena tormenta y por suerte, todos resultaron ilesos, pero ahora necesitan ayuda para volver a empezar. Jorge no abandonó la vivienda por miedo a robos, pero su esposa y tres hijos se autoevacuaron en lo de un familiar. "Viví los 5 minutos más difíciles de mi vida", aseguró.
Los vientos, con ráfagas que llegaron a superar los 100 kilómetros por hora en la madrugada de este viernes, arrasaron con el techo de la casa de la familia Moreno en Frontera.
Jorge Moreno, un trabajador metalúrgico de la vecina ciudad, perdió por completo el techo y el cielorraso de su vivienda de calle 70 al 500, en la que vive junto a su esposa y sus tres hijos.
Si bien ninguno sufrió daños a causa de la violencia con la que se desprendían los bloques de yeso del cielorraso y que éstos impactaran en el pecho de uno de los hijos, los perjuicios materiales fueron importantes.
La familia Moreno necesita ayuda para empezar de nuevo
Los peores cinco minutos
"No nos quedó más que el cielo y el techo de mi pequeño taller de herrería, un trabajito que hago los fines de semana para ganarme unos pesos extra", contó Jorge con la voz entrecortada.
Este vecino está en ojotas, con los pies llenos de barro porque además del techo que se llevó el viento, la lluvia le mojó gran parte de lo que tenían en su casa. "El viento y la lluvia arruinaron gran parte del mobiliario. Limpiamos todo lo que pudimos y recuperamos los electrodomésticos que guardaron los vecinos", agregó.
La tristeza invadió cada rincón y el ánimo se repetía en todo el barrio.
"Pensé que estaban muertos", expresó una vecina de los Moreno que ayudó a Jorge a resguardar a los chicos cuando el temporal se ensañó con su vivienda.
"Lo importante es que mi esposa e hijos están a salvo, que los daños son materiales y que nos recuperaremos en el tiempo pero cuando escuchamos el sonido del viento y cómo se llevaba las chapas, viví los 5 minutos más difíciles de mi vida", indicó Jorge.
Una vivienda devastada por el temporal
Volver a empezar
Mientras sus hijos y su esposa pasarán la noche con familiares, Jorge tomó la decisión de quedarse en su casa para cuidar que no se blanco del robo de lo poco que les quedó. "Me quedo porque no falta aquel con mente perversa que venga a llevarse lo poco que nos quedó. Temo por lo que pueda ocurrir con lo poco que nos queda", dijo el padre de familia.
Ayudó a otros, pero el que necesita ayuda es él
A pesar de su situación, Jorge dejó por un momento los trabajos para devolver el orden en su casa y se fue a asistir a sus vecinos, también afectados por la tormenta. "Me fui a ayudar a los demás, a recorrer el barrio y a ver si no había nadie lastimado. Fue un momento de desesperación total", recordó.
Ahora, Jorge y los suyos necesitan de todos. "Es una casa de plan, que poco a poco fuimos acomodando con mi esposa con mucho sacrificio y con mucho amor pero ahora tenemos que empezar de nuevo, no queda otra. Necesito chapas y perfiles para volver a empezar, para poder vivir de nuevo aquí. Sabemos que hay mucha necesidad pero necesito que nos ayuden", exhortó.
Para ayudar a Jorge Moreno y a su familia, los interesados pueden acercarse al domicilio en calle 70 al 500 con agua mineral, productos de limpieza y colchones.