Llega la Casa Justina, un lugar de contención para quienes afronten un trasplante
Con gran alegría por el récord de donantes de órganos en 2018, Ezequiel Lo Cane papá de Justina, cuya lucha inspiró la ley, brindó detalles sobre los espacios donde las personas que deban realizarse un trasplante encontraran contención y seguimiento en todo el proceso.
La lucha de Justina Lo Cane, de 12 años -que murió en la Fundación Favaloro mientras aguardaba un trasplante de corazón- logró una ley de trasplantes histórica en la Argentina, por la que todos somos donantes en la Argentina. Gracias a esa ley, en 2018 hubo más de 700 donantes y
realizaron casi 1.700 trasplantes.
Con una gran alegría por este importante logro, el papá de Justina, Ezequiel Lo Cane, sigue adelante, ahora con el objetivo de instalar la "Casa Justina" en siete provincias. Espacios donde las personas que necesiten trasplantes y sus familiares -que muchas veces tienen que trasladarse a otras ciudades y están solos- podrán encontrar contención y acompañamiento durante todo el proceso, por quienes pasaron por lo mismo y también por profesionales capacitados.
En diálogo con AM 1050 y LA VOZ DE SAN JUSTO, Lo Cane adelantó que habrá una casa Justina en siete provincias. Funcionarán en Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Salta, San Juan -que estará apoyada por la Asociación de Fútbol de la Argentina (AFA), en la provincia de Buenos Aires y en la ciudad Autónoma de Buenos Aires. Son las provincias donde hay mayor cantidad de donantes, trasplantados y centros de trasplantes.
"Nos dimos cuenta que era necesario un lugar donde podamos ayudar con contención a las personas antes y después del trasplante", comentó el papá de Justina.
Comentó que hay gente que por el trasplante viaja muchos kilómetros a ciudades que no conoce, donde no están sus familiares y están solos en un hotel o un departamento alquilado. "En la Casa Justina podrán compartir la estadía con gente que está en la misma situación -dijo-, estarán no solamente contenidos por las mismas personas que han pasado por un trasplante o por profesionales preparados para contenerlos, especialmente las personas de bajos recursos".
"Esto traerá beneficios para la persona y para todo lo que rodea al trasplante, en cuanto a laboratorios, empresas, prepagas, hay una colaboración integral pensada para que haya beneficios para todos. Estamos empezando con la construcción de tres casas", destacó Lo Cane.
"Cada día que pasa la extraño más (a Justina) y el dolor es más grande", afirmó Ezequiel Lo Cane.
Un espacio alegre
Afirmó que la Casa Justina será un lugar alegre donde se podrá pintar, bailar cantar, realizar actividades típicas que se hacen en cualquier hogar cuando se comparte con amigos o seres queridos.
Lo Cane añadió que también está pensada "para que las entidades que tienen que ver con el proceso de trasplante puedan tener los beneficios de estar informados, sobre cómo está aplicándose el tratamiento cuando están fuera de los centros de trasplante, en el caso de los estudios que se realizan antes y después del tratamiento".
Gran felicidad
El papá de Justina remarcó que el récord de donantes informado por el Incucai representa para él y su familia "una felicidad tremenda. Si bien Justina no recibió su trasplante nos inspira a todos y vamos logrando cosas de a poco, primero la concientización, después la ley para el beneficio de todos y ahora el proyecto de la Casa Justina".
"En definitiva el mejor resultado que tuvimos es que hay más personas que reciben un trasplante y se salvan, poner un granito para poder lograr esas cosas es hermoso", dijo.
Justina, cada vez más presente
En tanto afirmó que su lucha hace que sienta a Justina más presente. "Cada día que pasa la extraño más y el dolor es más grande, entonces necesito equilibrar esa balanza para que no pese más el dolor, la angustia de extrañarla y no tenerla. Trato de llenarlo con estas cosas que tienen que ver con el amor, con el pensar en los demás y ayudar a todos los que podamos que es lo que nos pidió Justina", finalizó.