La crisis de empresas pre-pandemia obstaculiza hoy el auxilio financiero
Las cámaras reclaman mayor agilidad para el acceso a préstamos bancarios con tasa negativa. La mayoría de los créditos otorgados a las pymes golpeadas en su actividad son para pagar sueldos. Las entidades se muestran algo reacias a abrir nuevas líneas a clientes con poca historia crediticia.
La inactividad económica y productiva generada por la pandemia puso en marcha un mecanismo de auxilio financiero de entidades bancarias -públicas y privadas- destinadas a sostener el funcionamiento de empresas y comercios que atraviesan con mucha preocupación la crisis.
Para ello, al igual que sucede en el resto del país, empresas y comercios de nuestra ciudad comenzaron a solicitar la ayuda crediticia para hacer frente a las obligaciones más urgentes.
Desde créditos para el pago de sueldos, otros para capital de trabajo, atender compromisos con proveedores en momentos en que las ventas se desploman o bien para cubrir erogaciones corrientes, las empresas recurren a los bancos.
Sin embargo, la posibilidad de acceder a créditos parece no estar al alcance de todos. De hecho, empresarios dicen que el crédito de emergencia sólo llega a las empresas con mejor rating crediticio (que mide la probabilidad de que esos créditos sean impagados).
La crisis que precedió al coronavirus ya tenía a muchas empresas y comercios en una delicada situación financiera lo que no las muestra frente a los bancos como las más convenientes a la hora de ser consideradas como sujetos ideales para otorgar ayuda crediticia.
Por todo ello, y por más que la oferta se muestre tentadora, lo cierto es que el menú existente en la mesa de ofertas no está disponible para todos, sino más bien para aquellos que en épocas de una economía muy inestable han podido mantenerse en pie lo suficiente para posibilitar que ahora reciban un "salvavidas".
Algunas empresas "venían con muchos problemas antes de la pandemia y entonces no se les puede dar créditos ahora", advirtieron desde uno de los bancos consultados por este diario.
En tanto, desde el Banco Nación aseguraron que se están otorgando a 8 de cada 10 empresas que lo solicitan.
El sector productivo toma financiamiento en los bancos para hacer frente a sus obligaciones.
Menos demanda que al inicio de la cuarentena
Desde el Banco de la Nación Argentina, Sergio Rostagno, quien se desempeña de manera interina a cargo de la gerencia zonal, recordó que en este momento la banca pública nacional "está ofreciendo créditos para todo tipo de empresas, rubros y sin limitante de actividad y abarca tanto el pago de sueldos que cubra el total de la nómina salarial como también el capital de trabajo hasta un mes de ventas".
Además, se brindan créditos que posibilitan la adquisición de tecnología para llevar a cabo la modalidad de teletrabajo.
Rostagno explicó en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO que "la única condición es que el cliente tenga la calificación fijada en el banco, es decir que cuente con la carpeta al día presentada lo que le va a permitir acceder a la línea de créditos".
Esto último fue considerado como "muy importante" por el directivo del Banco Nación en la ciudad porque "hay empresas muy grandes que no han traído sus balances o alguna documentación" que les termina impidiendo acceder a l ayuda.
Más allá de las condiciones que se solicitan para su otorgamiento, el ejecutivo informó que en la zona a su cargo del BNA "se otorgaron créditos al 80 % de las empresas o comercios que lo solicitaron".
Si bien en un principio de la cuarentena la demanda de esta ayuda financiera "venía muy fuerte" debido al parate total de actividades, luego con la flexibilización, "en este último tiempo bajó un poco. Gran parte quizá se deba a que algunos empezaron a contar con fondos propios para hacer frente a sus obligaciones".
Si bien en los últimos días muchos comercios y empresas reabrieron y retomaron la producción para generar ingresos -algo que no podían hacer desde el 20 de marzo-, Rostagno estimó que "esto no significa que el mes próximo no lo puedan volver a solicitar".
Claro está que la toma de créditos desde que estalló la pandemia se ubica muy lejos del último despegue que había registrado durante el primer trimestre del año. Es que pese a la reducción que hubo en las tasas de referencia que alentaron el acceso a los préstamos, las consultas cayeron fundamentalmente por la paralización de la actividad bancaria a raíz del aislamiento. En ese contexto, las gestiones que se mantuvieron fueron por parte de pymes para el pago de sueldos.
Las empresas y comercios recurren a los bancos para sortear la crisis
La banca privada apunta a las pymes
La banca privada también salió al mercado con ofertas crediticias destinadas a auxiliar las necesidades financieras de comercios y pymes asfixiados por el escenario que impuso el covid -19.
Desde el Banco Macro señalaron a LA VOZ DE SAN JUSTO que la entidad "salió en auxilio de las pymes, MiPyMEs, monotributistas y autónomos con la mejor oferta de créditos en medio de la crisis planteada por la pandemia".
A partir de esta decisión, Macro logró colocar hasta la fecha un total de $21.458 millones en créditos de la línea especial que lanzó en marzo pasado para MiPyMEs y prestadores de servicios de salud. En la provincia de Córdoba, otorgó créditos por $5.569 millones con una tasa anual del 24% fija en pesos.
Los prestadores de salud, por su parte, deben destinar el dinero para la compra de insumos hospitalarios o equipamiento médico.
Además, informaron que "de los $21.458 millones, $14.978 millones fueron colocados en préstamos amortizables. En tanto, más de $5.973 millones corresponden al pago de sueldos que se canalizaron a través de 7.055 operaciones".
En cuanto a los créditos a tasa cero para monotributistas y autónomos, "ya colocamos 15.800 créditos a través de Banca Internet por un monto que supera los $1.635 millones. Además, ya recibimos casi 30.000 solicitudes".
"Las Pymes son la fuente creadora de mano de obra y las que impulsan las economías regionales en la Argentina, son además nuestros principales clientes del segmento empresas. Por este motivo, estamos dando un fuerte impulso a estas líneas especiales", aseguró Milagro Medrano, gerente de Relaciones Institucionales y Atención al Cliente de Macro.
Más cuentas sueldo facilitan la aprobación
La banca cooperativa nacional aportó distintas propuestas financieras para llevar alivio al sector productivo golpeado por la situación epidemiológica.
Es el caso del Banco Credicoop Cooperativo Limitado. El vicepresidente de la entidad, el sanfrancisqueño Ricardo Sapei, reconoció que la operatoria crediticia "está bastante limitada por la cuarentena".
No obstante, desde la institución se encuentran vigentes para el pago de haberes. Hasta el momento el banco otorgó 7.333 créditos de estas características por casi $6.000 millones. A esto se suman los créditos para capital de trabajo con una tasa de interés del 24 % anual; créditos para monotributistas y autónomos, y de inversión en maquinaria agrícola con empresas productoras del rubro.
Para acceder a esta oferta crediticia, Sapei comentó que "en nuestro caso hemos dado respuesta a las solicitudes de créditos en función del nivel de reciprocidad del asociado. Esto hizo que otorguemos una gran mayoría de los créditos solicitados pero también hay que reconocer que hay empresas que venían con muchos problemas antes de la pandemia y entonces no se les puede dar créditos ahora".
Tras asegurar que la entidad a la que pertenece "tiene una natural vocación de prestar", Sapei dijo que "esto no justifica maniobras de sano administrador".
Producto de la política de la entidad, desde que comenzó la crisis agudizada por la pandemia, el banco incrementó en 23.400 cuentas sueldo. Esto último "muestra una mejor respuesta financiera en la entidad por parte de muchas personas que de esta manera podrá permitir la aprobación de diferentes líneas de crédito", explicó Sapei.
Apyme pidió al Gobierno mayor amplitud para acceder a la ayuda
La Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme) pidió al Gobierno nacional que se amplíen las condiciones para el acceso a los créditos con tasa negativa ante la situación financiera que enfrenta el sector, en una reunión con el secretario de Industria, Ariel Schale.
Los bancos tienen la obligación de otorgar los créditos a través del FogAr y por medio de la asistencia en marcha ya se logró otorgar unos $200.000 millones de pesos a 120.000 empresas, indicaron los funcionarios de Desarrollo Productivo a los representantes de la entidad gremial.
"Necesitamos un sistema financiero acorde a la actualidad", sostuvo por su parte el titular de Apyme, Guillermo Merediz, según difundió ayer la entidad en un comunicado.
Los representantes de pymes remarcaron que los créditos con tasa negativa, "no están llegando a las empresas que más los necesitan, en particular de los bancos privados".
Por ello solicitaron "una mayor amplitud y respuesta para que estas empresas puedan acceder, considerando también la inflación a la hora de computar los montos facturados".
También, señalaron como secuelas económicas de las medidas sanitarias la "alta cantidad de cheques rechazados", el corte de la cadena de pagos sumado a la "fuerte caída de ventas", el "abuso de las grandes superficies comerciales y formadores de precios", y el "aumento de tarifas telefónicas" y las "arbitrariedades de las eléctricas".
"Todos los dirigentes de Apyme coincidieron en señalar que la actual problemática con la implementación de las líneas crediticias pone de relieve la necesidad de fondo de una modificación de la ley de entidades financieras", afirmaron.
Según difundió Apyme, los funcionarios explicaron que los bancos tienen la obligación de otorgar los créditos a través del Fogar; que ya se otorgaron $200.000 millones a 120.000 empresas y que se extendió hasta el 21 de mayo la inscripción en Afip para recibir la ayuda para el pago de salarios de mayo.