Juegos para aprender valores
Respeto hacia uno mismo y los demás, responsabilidad, honestidad, confianza, empatía, tolerancia, amistad, solidaridad entre otros, son valores muy importantes y el regalo más hermoso que podemos darle a los chicos.
Un niño que respeta a los demás,
también será respetado y eso se refleja con todos los valores ya
que aprenderán a diferenciar entre lo que está bien y lo que está
mal. Esto les ayudará a desarrollar conductas y comportamientos para
convivir mejor.
Los valores se transmiten con el ejemplo de los mayores, pero también existen otras herramientas como juegos, cuentos y actividades. Compartir más tiempo en familia, alejarnos un poco de las pantallas y fortalecer los vínculos son acciones muy importantes.
La psicopedagoga, Daiana Ferreyra (MP-144815) aseguró que es importante y necesario educar a los niños a través de valores, ya que "éstos les ayudarán a poder identificar y desarrollar conductas y comportamientos que les permitan establecer vínculos sanos y positivos a lo largo de su vida".
Pasar tiempo en familia es la mejor manera de reforzar las relaciones, expresar emociones, sentimientos, afecto y fortalecer los lazos. "Es uno de los principales hilos conductores del amor entre padres, hijos y hermanos, además de cumplir una función educativa", aseguró la psicopedagoga. Al respecto remarcó que "es fundamental" que la familia pueda establecer momentos recreativos, de juegos, cuentos, canciones, poesías, e interacción familiar.
Psicopedagoga Daiana Ferreyra
Los valores que debemos transmitir
Valores como el respeto hacia los demás, poder actuar con gentileza, reconocer y respetar que existen diferencias entre las personas. El respeto hacia uno mismo, brindarle al niño la posibilidad de que poder expresar aquello que le gusta y lo que no, sus intereses y pensamientos. Inculcar la responsabilidad, que puedan comprender que todo accionar tiene sus consecuencias de las cuales hay que hacerse cargo. También responsabilidad de poder cumplir con las tareas, no solo del ámbito escolar sino también colaborar con las tareas del hogar, son algunas de las enseñanzas más importantes aseguró la psicopedagoga.
Responsabilidad emocional
Añadió que el nuevo paradigma de las emociones, "establece el concepto de responsabilidad emocional, responsabilizarnos de nuestras actitudes y sentimientos. Para ello es importante que se le enseñe al niño a poder identificar sus emociones, aprender a controlarlas y reconocer lo que puede causar en el otro".
La psicopedagoga dijo que ante esto es importante plantearles preguntas como "¿Qué es lo que te enoja? ¿Qué te hace sentir triste?, etc. Que ellos pueden sentirse parte de un contexto de contención, que pueden ser honestos y que pueden confiar en su familia, que no únicamente los reprenderán sino también les brindaran herramientas para poder solucionar los conflictos de otra manera y reflexionar sobre aquellas emocionales negativas".
"Es fundamental que desde pequeños puedan desarrollar la capacidad de empatía y es tarea del adulto fomentar esta habilidad. Enseñarles no solo con la palabra sino con el ejemplo a preocuparse por las necesidades de los demás, a ser generosos y comprensivos. Para fomentar esto, se pueden realizar preguntas tales como ¿Cómo crees que se siente con eso que le hiciste o dijiste? ¿Cómo te sentirías tu si te pasará lo mismo?, etc.", dijo.
Remarcó que éstos son valores que le permitirán ir desarrollando, a lo largo de su crecimiento, la inteligencia emocional. "Ésta le permite adoptar actitudes y emociones positivas en la vida y establecer mejores relaciones sociales", explicó Ferreyra.
Educar las emociones
Existen varios juegos y cuentos para educar las emociones y fomentar valores en los niños. La psicopedagoga Daiana Ferreyra detalló algunos:
Los juegos de mesa, ayudan al niño a respetar los tiempos de espera, a ser pacientes y a tolerar la frustración si pierde.
Los juegos de cooperación promueven la unión y el apoyo entre los integrantes, por ejemplo armar entre todos un rompecabezas que puede ser elaborado mediante recortes de revistas, o armar frases a partir de palabras en desorden.
Jugar con disfraces, máscaras o a través de muñecos o títeres, para estimular la imaginación y la expresión de sentimientos.
Elegir cuentos en familia, que despierten el interés en el niño, y que al mismo tiempo dejen una enseñanza. Algunos cuentos recomendables para leer en familia son, por ejemplo, "El Pájaro del Alma", "Petit, el monstruo", "todos somos diferentes", "la tortuga desobediente", entre otros. A través de los cuentos, los niños asimilan de una forma más rápida y práctica el significado de cada valor y contribuyen a imaginación y creatividad.